28 de marzo de 2022

¿Por qué esperar motivos?

La vida tal como es debería ser suficiente razón para reír. Es tan absurda, es tan ridícula. Es tan hermosa... ¡tan maravillo­sa! Es todo tipo de cosas al mismo tiempo. Es una gran broma cósmica. 

La risa es la cosa más fácil del mundo si la permitís, pero se ha con­vertido en algo difícil. La gente ríe muy rara vez, y aun cuando lo hace no es una risa verdadera. Las personas ríen como si le hicieran un favor a alguien, como si cumplieran un cierto deber. La risa es

diversión. ¡No es un favor a nadie! Igual que con el amor. También el amor es diver­sión. La risa es diversión. La vida es diversión. Pero, de algún modo, en la mente ha calado hondo que estáis cumpliendo con un deber. No se debería reír para hacer feliz a otro, porque si vosotros no sois felices, no podéis hacer feliz a nadie. Simplemente deberíais reír por voluntad propia, y sin que exista un motivo en particular. Si empezáis a analizar las cosas, no seréis capaces de dejar de reír. Sencillamente, todo es perfecto para la risa, no falta nada, pero no lo per­mitimos. Somos muy mezquinos con la risa, con el amor, con la vida. En cuanto sepáis que se puede dejar de ser mezquinos, pasaréis a una dimen­sión diferente. La risa es la verdadera religión. Todo lo demás es metafísica.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario