Saludos comunidad, el Sol en Tauro pegado a Urano nos demuestra que muchas cosas se han movido en las últimas semanas, este movimiento está auspiciado por Venus en Aries que forma aspectos muy armoniosos con Marte en Leo, un Marte que viene cargado de todos los recuerdos, emociones y pasado que recogió durante su retrogradación en Cáncer para en su recorrido ofrecer a Plutón en Acuario todo lo guardado como parte de toda la transmutación por la que necesitamos pasar en nuestra vida o nuestra historia y que ya ha cumplido un ciclo.
Dentro unos
días el Sol en su entrada a Géminis nos anunciará algo de todo ese cambio que
aprendió, pondrá palabras que declaren la nueva etapa que está a punto de
comenzar y que tendrá su inauguración oficial el próximo 24 de Mayo cuando
Saturno entre a Aries en conjunción con Neptuno después de cientos de años.
En la
astrología el 0 de Aries es el punto de partida, el inicio de la Rueda de la
vida que gira a veces a favor y a veces no tanto, pero un inicio al fin.
Inevitablemente hay algo en algún ámbito de nuestra vida que quedó atrás y que
propone ser valientes y dar los pasos que sean necesarios para establecernos en
lo nuevo.
Como la
entrada de Saturno se da con Neptuno, esto puede traducirse que muchas personas
saben lo que ya no quieren pero aún no logran ver con claridad cómo o por dónde
seguir.
Saturno es
el Maestro que enseña a dar forma, es el Juez de la conciencia que pregunta si
lo que hacemos es con responsabilidad y compromiso, Saturno en Aries es el
entrenador que necesita la llama del espíritu para dar forma y crear aquello
que aún está dormido entre las telarañas del no puedo o no me lo merezco,
Saturno es el tiempo que sabe que es necesario tener para hacer las cosas de
forma correcta.
La energía
está dispuesta a acompañar y a avanzar con nosotros. Antes de llegar hasta aquí
la señal de la última luna llena en Escorpio nos anunció está transformación
esperada.
El cambio se
siente en el cuerpo, no se evalúa. Se reconoce en la mirada, es real para quien
lo experimenta y para quienes se encuentran en este territorio común.
Esta semana
Saturno en su entrada en Aries anuncia que rasgar el velo de la ilusión es
rasgar el velo de la discordia en nuestra mirada hacia el otro y viceversa. La
ilusión de Neptuno separa y limita desde una visión diferente a la de Saturno,
entramos en la paradoja, de la cuál solo se sale con una verdad, la de lo real.
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