Mensaje del 02 al 09 de
Junio, 2013
a través Marlene Swetlishoff – Traducido por Esther Abreu
Ustedes, como nuestros Faros de Luz, están encendiendo la
atmósfera a su alrededor mientras realizan sus actividades diarias. Ustedes son
poderosos en sus modos y contribuyen mucho a la estabilización de su planeta.
Más de ustedes están ahora saliendo de los densos campos de expresión hacia
mayores sentimientos de alegría y felicidad, paz y armonía y, esto a su vez,
aumenta el campo colectivo de la humanidad. Ustedes son consciente de que sus
pensamientos, palabras y acciones tienen una mayor influencia en los que les
rodean de lo que nunca pensaron que era posible y que cada vez disciernen más
sobre las formas en que interactúan con sus hermanas y hermanos, teniendo
siempre presente que el impacto sobre sus campos de energía sea uno de
bendición, empoderamiento y buena voluntad.
Esto no quiere decir que no puedan expresar sus momentos
humanos en la medida que surjan temas viejos para ser revisados; de hecho, todo
esto es parte del proceso de dejar ir y centrarse y alinearse cada vez más con
su verdadera esencia divina. Todo lo que no está en alineación con los aspectos
superiores de su verdadero yo, seguirán emergiendo a la superficie para ser
reconocido y aceptado como una parte de su ser total, humano y divino. Lo que
sucede cuando trabajan con ustedes mismos de esta manera es que después de que
suelten todos los aspectos dentro de sí que no les sirven en su viaje de
ascensión hacia una mayor conciencia y expresión, se empiezan a apreciar y a
amar más a sí mismos y, cuando se aman a sí mismos incondicionalmente, sin
juicios ni justificaciones, empiezan a amar a los demás en la misma forma.
Sólo esto puede ayudar a aclarar y a aliviar aún más las
fuertes energías densas y, este trabajo dentro de cada uno, en última
instancia, ayuda a todos, porque todo es energía, frecuencia y vibración. Al ser consciente de su efecto
sobre los que les rodean, siempre es beneficioso para que recuerden su
verdadera naturaleza y que, por supuesto, son Seres de Amor. El amor es la base
de todas las cosas y de todas las situaciones; a veces, sin embargo, necesitan
una introspección más profunda dentro de sí mismos para conectarse con su
corazón y sentir este amor. Muchos de ustedes, en un momento u otro, han sido
lastimados o heridos de alguna manera en sus interacciones con los demás y esto
ha llevado a que ponga escudos de protección alrededor de su corazón, lo que
les impide experimentar todo lo que es bueno en su vida ahora. Es hora de
liberarlos ya, Queridos.
Atrévanse a ser vulnerable al abrir su corazón de par en par.
Su luz interior debe brillar, y es importante que mantengan al día sus rituales
y prácticas para lograrlo, ya que es a través de la meditación, el yoga, los
ejercicios de respiración, las visualizaciones, los mantras, los decretos, y
escuchando música, o incluso cantando, que se elevan e inspiran. Estas son
muchas de las maneras de mantener su resplandeciente luz brillante y estamos
seguros de que hay muchas más formas que no hemos mencionado, que ustedes
conocen y utilizan. Lo que estamos enfatizando aquí es que el jugar en su
pequeño mundo para cumplir con paradigmas obsoletos ha llegado a su fin. Ahora
es un tiempo nuevo, un nuevo comienzo, donde todas las almas tienen el mismo
derecho de perseguir sus pasiones, aquellas que les traiga alegría a su ser interior
y exterior. Piensen en las actividades que les traen alegría y háganlas una
prioridad en su cotidianidad. Gasten algún tiempo cada día en esta actividad
para el más alto y mayor bien de su
alma.
No importa si la pasión que les da alegría es algo que nunca
les traerá fama, fortuna o elogios en el mundo que les rodea, lo único que
importa es que se empiecen a conectar con sentirse bien consigo mismos para que
los dones que traen para bendecir este mundo empiecen a emerger. Cada uno de
ustedes tiene dones que traen a este mundo y ahora es el momento de
encontrarlos y conectarse con los suyos. El mundo es muy rico y hay suficiente
para todos, conéctense con su mundo interno y ¡permítanse brillar!
Hasta la próxima semana...
YO SOY Hilarión
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