La energía de Sagitario

Cualidad: Mutable/fuego.

Principio: Abstracción.

Significado concreto: Filosofía, religión, inspiración e idealismo. Temas académicos y deportes.

Significado abstracto: La mente abstracta. La mente funcionando dentro de la esfera social. Reconocimiento de las relaciones abstractas. Temas sociales, culturales y religiosos.

Michael Meyer

Cuando definimos a Sagitario solemos hablar del filósofo, de la persona interesada en estudios superiores, con gran talento para la docencia y con inquebrantables valores éticos. Por lo general, además, decimos de las personas de este signo que tienen firmes creencias religiosas y amor por los deportes y las actividades al aire libre. Su buen

humor y optimismo natural los destacan en cualquier lugar. Pareciera entonces que al referirnos a este signo solo vemos la parte del centauro- hombre y olvidamos su parte animal-caballo bien afirmada en la tierra. Por ello es interesante tener en mente que como buen signo dual que es posee intensas contradicciones que constituyen parte de su naturaleza esencial. Las luchas entre su fuerte naturaleza de deseos y su ideal de vida son parte de su privadísimo rostro oculto y enriquecen su experiencia cotidiana.

Los sagitarianos viven tiempos difíciles en una época de valores tan cambiantes como la actual. Es hora de que puedan comprender los nuevos tiempos y se abran a una nueva percepción de la realidad y puedan construir una nueva escala de valores mas afines con los tiempos que corren. El tiempo es propicio en el ámbito laboral y creativo por lo cual podrán canalizar su extraordinaria energía de forma positiva en esos medios. Diferentes proyectos se irán consolidando lentamente en un futuro mediato y nuevos ambientes y amigos ingresarán a sus vidas.

Días pasados una sagitariana me decía que era una “falsa sagitariana” porque nunca había salido de este país y detestaba viajar. Se trata de una persona con una vida de búsqueda de ideales incesantes, profesora universitaria e investigadora en temas legales muy valorada en su medio. Por supuesto que las personas de este signo suelen viajar bastante, pero este es el medio del cual se sirven para lograr su fin que es el de abrirse a nuevos conocimientos y cumplir una importante contribución social. Muchos sagitarianos no necesitan moverse de sus casas para viajar cotidianamente por medio de su mente e imaginación. Saben volar de mil y una maneras diferentes, en fin, lo importante es que puedan expandir su conciencia según su personal estilo y temperamento.

Ana Lía Ríos

EN EL TRANSCURSO DE ESTE MES LOS HECHOS MAS IMPORTANTES A TENER EN CUENTA SON:

Habrá eclipses el 25 de noviembre y el 10 de diciembre.

Urano se pondrá directo el 10 de diciembre.

En épocas de eclipses es tiempo de soltar el pasado y abrirse a renovaciones e imprevistos. Urano puede impulsarnos a actuar precipitadamente frente a temas que desde hace tiempo estamos elaborando. La retrogradación de Mercurio puede traer problemas en las comunicaciones y en la forma en que nos comunicamos mutuamente. Viajes pueden postergarse o complicarse.

SAGITARIO SIGNO DE FUEGO

El suelo tiembla con el impacto poderoso de nuestro correr; estamos disfrutando de ejercer el músculo hasta una velocidad en que parecemos volar. El viento nos revuelve los cabellos, abierta nuestra frente al azul del infinito. Liberamos la tensión que extrema la cuerda del arco, y disparamos la flecha muy alto, buscando un objetivo más allá del horizonte.

Gozosos, nos elevamos sobre los cuartos traseros. Una espesa cola bate con entusiasmo nuestros flancos húmedos, nuestras ancas de potro enardecido o yegua jubilosa. Explotamos, expansivos, en una carcajada contagiosa celebrando el disparo y el instante.

¡Somos centauros, al galope!

No se puede entrar de otra manera al dominio mítico de Sagitario, el signo con el impetuoso arquero como emblema. Un dominio virtual donde nada es imposible, regido de parte a parte por un solo principio: si eres capaz de imaginarlo, eres capaz de crearlo.

En el viaje del alma, estamos en el noveno signo, Sagitario. Por tanto, heroicamente, fuimos capaces en Scorpio, el octavo, de morir y volver a nacer. Atravesando su umbral decisivo, entregándonos a morir a lo conocido para volver a nacer en otro estado de conciencia. En esta nueva, reveladora percepción podemos asomarnos al arco iris del espíritu. Sagitario es ese arcoiris.

Pues con Sagitario se abre el cielo de los últimos signos del zodíaco, los signos de la trascendencia, los arquetipos de la conexión humana con el Cosmos. Se descorre el telón del universo y una parte nuestra ya vive en otra dimensión. Sagitario representa el don humano de ir más allá.

El prodigioso reino de Sagitario se ilumina con relámpagos de intuición, de comprensión instantánea del acontecer. Pero, tal como el relámpago, la intuición dura un instante; Sagitario la persigue ardoroso, disparando sus flechas de centauro. Flechas que son vislumbre de una realidad llena de sentido, luminosa, deslumbrante, siempre más allá del alcance. Sagitario galopa, incansable, hacia esa luz. En el galope mismo encuentra sentido, pues, más que la Tierra Prometida misma, lo inflama la epopeya de buscarla, nada de tierra lo entusiasma demasiado.

Rige este dominio de fuego Júpiter, Gran Jefe del Olimpo, dios del rayo y del trueno. El mismo expansivo, estruendoso Zeus de los griegos, de un histrionismo que aterra cuando nos amenaza, pero desata risa contenta cuando está de humor para exhibir su genio comediante.

Nacer en Sagitario concede singular afinidad con sentirse afortunado, bendito, hijo predilecto. De hecho, es difícil encontrar un Sagitario que no se sienta premiado por serlo. Probablemente, tenga que ver con papá Júpiter, exagerado en todas las cosas, y también en su gusto por mimar a sus hijas e hijos, como la mitología abundantemente confirma.

Sin embargo, observando con profundidad, descubrimos una experiencia interior que sustenta esta insólita confianza en la vida. Justamente, Sagitario activa en el alma la intuición de que todo está siempre bien. Que pase lo que pase, estamos constantemente en movimiento hacia una verdad luminosa que da sentido y libertad final a todos los momentos. Fe, ha sido llamada esta certeza puramente interna. Esta convicción de que no hay muerte ni infortunio que nos deje para siempre despojados, porque la muerte da paso a nueva vida y el infortunio enseña cómo ser feliz. Y el universo, sin falta, en la circunstancia precisa, ofrecerá la oportunidad para expresar esa nueva vida y practicar esa sabia felicidad.

Con tamaño patrimonio interior, se entiende que los Sagitario apuesten por la aventura, el viaje, el juego, las causas, confiados entusiastamente en su filiación celeste. Muchas veces, en la juventud, conocen exuberancia jupiteriana en lo que llamamos suerte. Pero la madurez les limita la llegada de regalos, para proponerles una perspectiva reflexiva donde puedan crecer en sabiduría. El aventurero se vuelve filósofo, el jugador va descubriendo de qué se trata el único Juego que hay.

Gonzalo Pérez Benavides.

"EL CENTAURO"

Asociado al planeta Júpiter

Arquetipo: maestro, sacerdote, guía

Mitología: Puente hacia Dios

Sagitario es el tercer signo de Fuego. A diferencia del impulso de Aries (ritmo cardinal) y de la expresión de un centro estable en Leo (ritmo fijo), el fuego sagitariano propone búsqueda y expansión (ritmo mutable). Su condición de signo activo y extrovertido (masculino) lo vincula a un tipo de vitalidad que anhela responder a direcciones profundas, a comprometerse con el sentido de la vida.

Sagitario es la conciencia de lo trascendente, de un orden mayor, vasto y amoroso al que se entrega con confianza.

Es la captación de un propósito divino que guía nuestra acción humana.

Se asocia a la ampliación de conciencia, a la expansión del conocimiento y a la sabiduría. Sagitario va más allá de los límites conocidos, confía en desplegarse hacia nuevos mundos. Tiene que ver con los viajes, con las geografías lejanas y el contacto con otras culturas, con otros modos de ver la realidad. Sagitario simboliza las cosmovisiones, las captaciones globales e incluyentes, las síntesis organizadoras que dan sentido a la existencia.

La cualidad sagitariana propone conectarse profundamente con un sentido más allá de lo humano. Se lo vincula con el sentimiento religioso que busca "re-ligar" lo humano con lo divino, la tierra con el cielo. Es el ámbito de las verdades trascendentes, la fe, los grandes ideales y los principios filosóficos que encienden el espíritu humano.

En la imagen del centauro lanzando su flecha se simbolizan tres niveles de conciencia presentes en este signo: los condicionamientos instintivos (caballo), la conciencia humana (jinete) y la aspiración de trascendencia (flecha lanzada al cielo). Esta figura simbólica sintetiza la vitalidad de Sagitario que necesita seguir un cauce, fluir por la vida sin demasiadas complicaciones que lo alteren en su decidida y confiada búsqueda de lo superior.

Psicológicamente, la personalidad sagitariana se muestra muy entusiasta y exuberante, con un sentido de grandiosidad que puede conducirla a excesos de optimismo, a confiar en que cuenta con el favor de la divina providencia o de estar en posesión de una verdad absoluta y de orden superior.

Su destino es aprender a vivir la natural confianza, entrega y fe en la gracia del universo, la sensación de abundancia, alegría y vitalidad infinita, su facilidad para no hacerse problema con las dificultades cotidianas porque sabe que "todo va a salir bien". Este talento se pondrá a prueba cuando surjan los conflictos que necesariamente presenta la vida, porque allí se sabrá si ese optimismo vital sirve para descubrir un sentido al dolor o, por el contrario, es usado para evitarlo. Negar los temas que perturban o intentar diluirlos con falsos idealismos o creencias ingenuas, en verdad, termina por generar crisis mucho mayores, que serán fruto de esa postergación en el contacto con el lado oscuro —o sencillamente formal— de la realidad.

Animado por su comprensión y su fe en lo trascendente, Sagitario ama el movimiento expansivo. Los viajes físicos, de la mente y del espíritu. La aventura del conocimiento, la exploración del saber, el transmitir y guiar a otros en el camino hacia realidades superiores.

Talentos

Confianza. Expansión. Optimismo. Comprensión. Entusiasmo. Síntesis. Guía. Dirección. Sentido. Alegría. Abundancia. Sabiduría. Amor. Inclusión. Creencias. Filosofía. Aventura. Viajes. Integración.

Dificultades

Credulidad. Negación. Optimismo. Dogmatismo. Exageración. Excesos. Fundamentalismo. Idealismo. Fanfarronería. Sabihondez.

Beatriz Leveratto, Alejandro Lodi.

SATURNO ENTRA EN LIBRA

Plutón abandona el grado O de Capricornio el 12 de octubre de 2009. Dentro de los dieciocho días siguientes, Saturno entrará en Libra y avanzará y retrocederá sobre el Ascendente de la Tierra hasta el 22 de julio de 2010 (véase la página 260). Es como si ambos planetas tuvieran una cita con la Cruz de la Materia y el Señor de los Infiernos tuviera que salir a hurtadillas por la escalera trasera justo cuando el Segador toca a la puerta. Saturno es tan "merecedor de una cita" como Plutón y, dado que rara vez está dispuesto a pasarla bien, la Madre Tierra ya está ante otro problema.

A Saturno, el policía arquetípico, le encanta poner restricciones a nuestra conducta. Si algo no funciona cuando hace un tránsito difícil, no hay manera de ocultárselo. Debemos enfrentar las cosas con honestidad, nos guste o no. La verdad cobra una gran importancia siempre que Saturno anda cerca, igual que la integridad. Si alguna de esas virtudes no son lo que deberían, Saturno crea un guión que las redefine o nos obliga a atenernos a las consecuencias.

Es también el abuelito del antiguo paradigma. Como tal, ha hecho una enorme inversión para mantenerlo. Todas las estructuras y patrones de creencias perimidas en las que hemos perdido la fe son su descendencia. El sentido de autoridad de Saturno sobre esas cosas probablemente sea tan fuerte como lo fue siempre, pero a esta altura es como un general del ejército retirado que alguna vez estuvo al frente de miles de tropas y ahora está sentado en la organización de veteranos sin nada para hacer. No puede volver a los buenos viejos tiempos, no se siente para nada cómodo en este nuevo paradigma y todas sus habilidades parecen ser inútiles en este momento. ¿Qué se supone que debe hacer un planeta?

Plutón no tiene problemas con el cambio, pero Saturno tiende más a mantener las cosas como están. A él le gustan sus instituciones, le encanta la estructura, y necesita de ambas cosas para sobrevivir. Sin embargo, a pesar de sus tendencias anticuadas, no es ningún tonto. Es lo suficientemente realista como para ver que todo lo que conservó durante tanto tiempo, ahora tiene una tremenda necesidad de renovación. Como parece que todo eso se está yendo al demonio, debe hallar el modo de inventar nuevas instituciones y estructuras o, de lo contrario, perderá su lugar en el esquema de las cosas.

Su ingreso en Libra lo colocará sobre el brazo izquierdo de la Cruz de la Materia. En el grado O de ese signo, transitará el Ascendente de la Tierra por un período de alrededor de diez meses. En todo horóscopo, el Ascendente representa el cuerpo físico. Es el punto donde el alma se despliega en una forma que le permitirá manifestar su propósito. Todo tránsito sobre el Ascendente tendrá un impacto, no sólo en el cuerpo, sino en la manera en que la entidad física experimenta los cambios en su entorno, porque ese eje es también la "línea del horizonte" o el plano que circunscribe y define las condiciones que cada uno de nosotros encuentra en el mundo a nuestro alrededor.

La forma que adoptan las cosas donde el alma halla su propósito se define por el signo que rige el Ascendente. Todo aquel que tenga Libra ascendente está aprendiendo lo que significa mantener relaciones conscientes y equitativas con los demás. Para la Tierra, esto implica que nuestra Madre está buscando la manera de crear ese tipo de relación con nosotros, una relación en que ambas partes compartan un propósito común y estén dispuestas a respetar las necesidades individuales de la otra al tiempo que se toman de la mano y persiguen ese propósito.

Con el Punto Aries en el polo opuesto del punto de ascenso, es como si Mamá tuviera tendencia a formar relaciones con personas egocéntricas, belicosas y para nada interesadas en nadie más que en sí mismas. Esto ocurre porque el estereotipo de Aries es intrínsecamente egoísta, tiene un enorme ego y no comprende en absoluto la idea de cooperación pacífica. Entonces, la Tierra debe luchar para satisfacer sus necesidades y lograr que se respeten sus derechos en una relación donde al otro le cuesta mucho reconocer incluso que ella está viva, y mucho menos que tiene necesidades y derechos propios.

Bajo la influencia de Saturno, nuestra Madre pondrá límites cuando empiece a redefinir su relación con una población que de manera egoísta ha explotado todos sus recursos. Como una mujer golpeada que acaba de despertar y decide hacer algo con su problema, defender sus derechos la obligará a dejarnos en claro que está harta de todo este abuso y que, si queremos mantener todo esto con vida, debemos cambiar nuestras costumbres o ella desaparecerá para siempre.

Cal Garrison.

Namaskar