Mensaje del mes de Capricornio

Capricornio es el que trepa solitario. Trata de ascender completamente solo. La cabra que trepa la montaña es su símbolo. En su camino de ascenso al monte, la cabra tiene el aferramiento de Saturno. Así es la energía de Capricornio. Saturno en Capricornio hace posible ese aferramiento. Es el agarre del cocodrilo, que es el que sujeta con mayor fi rmeza. Todo lo que agarra, lo sujeta con fuerza. Si se aferra a los objetos mundanos, queda atrapado por el mundo. Si se aferra a la ley, la ley lo respalda. Cuando el sujeto está protegido por la ley, la energía saturnina le permite experimentar el esplendor venusino. Al hombre que acata la ley en todo momento Venus le otorga comodidad y estabilidad en la vida. Esta comodidad y estabilidad no pueden ser compradas con dinero ni poder. Es inexplicable la comodidad y estabilidad que se experimenta. La estabilidad proviene de Saturno y la comodidad proviene de Venus.
A medida que la cabra va ascendiendo entra en los reinos de la luz del alma, representada por Buddhi (Mercurio). Si Capricornio supera las dificultades de Saturno a través de su obediencia a la ley, logra el estado de equilibrio y su correspondiente comodidad. Luego continúa avanzando para introducirse en los reinos de la luz. Saturno, Venus y Mercurio rigen los tres decanatos de Capricornio. Los discípulos pueden utilizar estas energías a lo largo del tránsito del Sol por Capricornio.
Los primeros diez días de Capricornio están gobernados por Saturno, y durante esos días la humanidad vive por lo general en las celebraciones y su correspondiente regodeo en la objetividad. Esto ocurre desde el 22 de diciembre hasta el 1° de enero, con los festejos de Navidad y Año Nuevo. Rara vez las celebraciones transcurren en subjetividad y en silencio. Como consecuencia, el primer paso de Capricornio es irregular. Por lo tanto, la humanidad
generalmente se pierde las energías del Salvador. La humanidad ha desarrollado el hábito de esperar un Salvador, ¡y perdérselo cuando llega! Esta paradoja debe resolverse con la correcta comprensión de las energías presentes.

Sri. K. Parvathi Kumar

Namaskar
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