Legiones de Luz asociadas con la Flama Violeta de
5ta Dimensión de la Perfección Infinita de Dios...
Enciendan la Luz de
mil Soles a través de los estratos físicos, etéricos, mentales y emocionales
dentro de los cuerpos de la Madre Tierra hasta que los elementos de tierra,
aire, agua, fuego y éter sean purificados y restaurados a su belleza prístina.
Enciendan la Luz
de mil Soles a través de todas las áreas vulnerables en el cuerpo de la Madre
Tierra. Refuercen con rayos de Relámpagos Violetas todas las fallas, grietas,
fisuras, placas tectónicas y las heridas creadas en el cuerpo de la Madre
Tierra a través de las p
ruebas nucleares, extracción de las minas, perforación
de petróleo y toda otra aflicción humana.
Enciendan la Luz de
mil Soles a través de los pensamientos, palabras, acciones y emociones de cada
hombre, mujer y niño en evolución en la Tierra hasta que cada persona
individualmente reconozca y acepte la Unidad de TODA Vida, y cada expresión
refleje la Reverencia de TODA Vida.
Enciendan la Luz de
mil Soles a través de todos los bebés que están llegando, los niños, sus padres
y los guardianes hasta que TODA la juventud sea elevada en energía, vibración y
consciencia para llevar a cabo las directivas de sus Presencia YO SOY.
Enciendan la Luz de mil
Soles a través de todos los centros juveniles y actividades, todas las
escuelas, colegios y universidades, todos los líderes, maestros, instructores y
profesores en cada línea de intento hasta que la Flama de la Iluminación de
Dios y la Iluminación Espiritual se manifiesten y sean sostenidas eternamente.
Enciendan la Luz de
mil Soles a través de todas las religiones y enseñanzas espirituales, para que
el Amor Divino, la Verdad, la Tolerancia y la Hermandad Universal Masculina y
Femenina se manifiesten rápidamente.
Enciendan la Luz de
mil Soles a través de todos los médicos, enfermeras, sanadores, hospitales,
compañías de seguros, conglomerados farmacéuticos y cada institución asociada
con la curación de cualquier tipo hasta que la Misericordia Divina, Sanación,
Compasión y Salud Vibrante sean realidades tangibles para cada alma en
evolución.
Enciendan la Luz de
mil Soles a través de todas las instituciones bancarias y financieras, todos
los sistemas económicos, todo el dinero y las personas asociadas con
interacciones monetarias de cualquier índole hasta que cada persona en la
Tierra esté demostrando abiertamente integridad verdadera, honestidad,
generosidad, ecuanimidad, abundancia y el suministro de Dios de todas las cosas
buenas.
Enciendan la Luz de
mil Soles a través de todos los lugares de encarcelación y de todas las
personas empleadas allí a través de cada institución correccional, todo el
personal de aplicación de las leyes, cada juez, cada tribunal y corte de
justicia hasta que la Justicia Divina se manifieste y se sostenga eternamente.
Enciendan la Luz de
mil Soles a través de todas las actividades espaciales por todo el mundo hasta
que cada nación se una en servicio cooperativo, para que la Voluntad de Dios
pueda ser manifestada con nuestros hermanos y hermanas a través del Universo.
Enciendan la Luz de
mil Soles a través de los cuerpos físicos, etéricos, mentales y emocionales de
la Humanidad hasta que toda enfermedad y deformaciones humanas, su causa y
núcleo sean disueltas y transmutadas en salud vibrante, juventud eterna y
perfección física.
Enciendan la Luz de
mil Soles a través de las industrias de alimentos y de agua y a través de toda
la comida y el agua utilizada para consumo humano hasta que cada partícula de
alimento y cada molécula de agua sean llenadas de Luz. Faculten a esta
sustancia Elemental para elevar su acción vibratoria de los cuerpos físicos,
etéricos, mentales y emocionales de la Humanidad hasta que la perfección física
se convierta en una realidad manifiesta sostenida para cada Ser Humano.
Enciendan la Luz de
mil Soles en, a través y alrededor de cada electrón remanente de preciosa
energía de Vida hasta que el Concepto Inmaculado de la Nueva Tierra se
manifieste y toda Vida en evolución aquí sea totalmente Ascendida y LIBRE.
Y así, es. Amén
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