Urano, el planeta regente de Acuario, que está rigiendo este cambio se le conoce como el planeta de la fuerza violeta y sus Iniciados manejan el poder del prana etérico cósmico. El prana es la energía vital que pone en conexión todo lo que hay en el universo. Y ahora estamos recibiendo un efluvio de esta potente fuerza que tiene el poder de ocasionar
cambios abruptos en todos los aspectos de la vida, incluyendo al planeta mismo. La transmutación de la materia supone la máxima prioridad en la Era Acuariana por lo que veremos cambios y más cambios.Sólo, sin amigos, familia o un grupo espiritual es más difícil vivir
estos tiempos. La vida grupal nos abre una nueva dimensión en la conciencia y
es precisamente el mejor regalo que la influencia de la constelación de Acuario
le regala a la humanidad. Acuario es grupal. Y la conciencia grupal te abre las
puertas a la conciencia de tu Ser Interno que se sabe que es uno con todos los
demás.
El Sendero espiritual, en estos nuevos tiempos se transita de forma
grupal. Si bien el desarrollo de las cualidades personales sigue siendo de
vital importancia, ahora tiene un nuevo sentido y se convierte en tu
contribución al grupo.
Esta fuerza transformadora de Urano trabaja a través de los siete
aspectos del rayo solar, que son sus siete rayos, pero en este tiempo de cambio
de Era de Piscis a Acuario trabaja muy fuertemente con la energía del Séptimo
Rayo de Magia y Orden Ceremonial que es la cualidad encargada de expresar al
primer Rayo de Voluntad Divina cuando desciende a la Tierra.
Con la ayuda del séptimo rayo Urano quema todo lo indeseable. Ocasiona
cambios abruptamente y abre caminos para la unión de lo mundano con lo
supramundano. Promueve la percepción más allá de las percepciones normales. Los
seres humanos pensamos, comprendemos y hacemos, pero allí donde trabaja la
energía de Urano, la acción ocurre primero y la comprensión viene más tarde, es
una energía que va a gran velocidad que ocurre a través de ti y después
comprendes por qué lo has hecho y como lo has hecho tan bien.
En Urano el tiempo cobra una nueva dimensión.
Todo lo que se ha dicho de la energía de Urano se puede aplicar a la
actividad de la Llama Violeta, que es una expresión de esta energía que nos ha
ido preparando para recibir la más potente influencia de Urano y los cambios
que ya estamos enfrentado y los aún más grandes que vendrán.
Sí hermanos, vivimos en tiempos de transición de una era a otra, de
Piscis a Acuario y los cambios son notorios. Piscis regido por el sexto rayo de
idealismo y devoción y Acuario por el séptimo de magia y orden
ceremonial.
Veamos las diferencias:
El sexto produjo el místico, el séptimo desarrollará el mago.
El sexto condujo a la separatividad (nacionalismo, sectarismo). El
séptimo conducirá a la fusión y la síntesis.
El sexto formó grupos alrededor de un Maestro sin conciencia grupal. El
séptimo desarrollará la conciencia grupal de los nuevos grupos. El sexto
proporcionó el sentido de dualidad.
El séptimo introducirá el sentido de unidad Superior. El Sexto permitió
reconocer al Cristo Histórico y el Séptimo permitirá reconocer al Cristo
Cósmico.
El sexto produjo grandes religiones idealistas y el séptimo traerá la
comprensión científica del Propósito Divino.
Cuando las humanidades resisten los cambios que el Cosmos les trae se
genera mucho sufrimiento. Crisis, guerras, pobreza… La vida en el planeta exige
que aprendamos a convivir, no a pelear, que aprendamos a compartir no a
declarar guerras, que aprendamos a que la conciencia grupal es superior a la
individual, que solo ella abre las puertas a la conciencia del alma que será la
gloria de esta nueva era de Acuario que acaba de empezar.
Y en esa conciencia de unidad tú y yo somos uno.
Carmen Santiago
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