Acuario "El aguador"

Mitología: Dios del Cielo

Es un signo de Aire, junto con Géminis y Libra. Como tal, está asociado a los vínculos y las relaciones; en este caso, sociales, grupales e impersonales, sin carga afectiva ni emocional que lo condicione y, por lo tanto, de gran libertad y creatividad. Acuario remite a la liviandad extrema, a la velocidad máxima y a aquello que está fuera de toda lógica de continuidad de un proceso. Nos invita a vivir en el presente, sin prejuicios ni condicionamientos

pasados, y nos incita a vincularnos libres, sin apegos ni compromisos. Acuario enfrenta a la conciencia humana a un alto desafío: vivir con libertad, aceptar el vacío de seguridades donde refugiarse y tolerar la incertidumbre existencial. Representa la oportunidad de vincularnos con independencia y de comprender el amor como una máxima capacidad de entrega y encuentro, sin celos posesivos ni expectativas de perdurabilidad.

En el signo anterior, Capricornio, existía el supuesto de que hay una sola forma de hacer las cosas y entender la realidad. Con Acuario, surge la necesidad de las diferencias, la expresión de distintas cualidades que implican la creatividad del cosmos y que juntas conforman una totalidad rica en matices, compleja y contradictoria.

Para Acuario, ninguna manifestación singular está sola o aislada, sino integrada a un todo. Surge la conciencia de red. El individuo humano es un ser de energía que forma parte de una realidad vasta; un entramado energético, antes que una entidad separada y desconectada del resto de las cosas. Acuario tendrá el talento de captar lo vibratorio, es decir, aquello que "no tiene forma". Sabe adelantarse al futuro, crear lo nuevo. Se maneja con comodidad en lo imprevisto y lo espontáneo. Por oposición, todo lo que esté ajustado a norma y pautado de acuerdo con reglas previamente impuestas lo ahoga y lo rebela.

La personalidad acuariana se manifiesta súbita, fuera de toda lógica de causa y efecto o coherencia con proceso alguno. No puede explicarse a los demás, ni siquiera a sí mismo. Por eso, suele sentirse "desubicado", raro, fuera de lugar. En un nivel extremo, esto implica la fantasía de locura, la angustia de sentirse diferente y "no encajar en ninguna parte". Así, vive la paradoja de estar en grupo, pero sintiéndose afuera de éste.

El lado oscuro de su creatividad implica el encuentro con la soledad y la acuciante necesidad de hacer algo diferente sin repetir ni copiar fórmulas conocidas. Sin saber muy bien hacia dónde se dirige, debe inventarse a sí mismo para entenderse y que lo entiendan. La incomodidad de este imperativo interno y su extrema dificultad para ser llevado a cabo, muchas veces genera comportamientos opuestos o inversos a su naturaleza. Así, podemos ver individuos acuarianos identificados con el "deber ser", altamente condicionados por expectativas familiares o sociales con las que se sienten obligados a cumplir, o muy tímidos y marginales que anhelan no ser vistos.

La principal dificultad para Acuario será sostener y dar forma a su vida. El desafío de su existencia será que su libertad y creatividad se haga amiga "del tiempo y el espacio definido", de las objetivas condiciones que impone la realidad material y concreta, con sus procesos y sus ciclos, así como también de las necesidades emocionales y los complejos miedos inconscientes.

Talentos
Libertad. Creatividad. Innovación. Grupo y red. Espontaneidad. Inspiración. Revelación súbita. Genialidad. Improvisación. Anticipación. Inventiva. Independencia. Cambio. Mutación. Visión holística y comunitaria.

Dificultades
Discontinuidad. Desapego. Rebeldía. Marginalidad. Extravagancia. Rareza. Locura. Desconexión. Transgresión. Fobia. Aislamiento. Agitación. Provocación. Imprevisibilidad. Incertidumbre. Vacío. Vértigo mental. Inquietud. Aceleramiento.

Beatriz Leveratto, Alejandro Lodi. 

Namaskar