¿Qué es un eclipse solar?
Llamamos eclipse a la ocultación del Sol o de la Luna por
un breve periodo de tiempo.
Este fenómeno solo puede producirse si los luminares y la
Tierra se encuentran alineados.
El eclipse solar tiene lugar durante la fase de Luna nueva, en cambio el eclipse lunar ocurre
durante la Luna llena. Durante el periodo de tiempo que dura el eclipse, se
interfiere el continuo flujo de ondas que llegan a nuestro planeta por parte
del cuerpo eclipsado.
Cuando se trata de un eclipse total, se produce un descenso en
las temperaturas y, como consecuencia, cambios en la dirección y velocidad de
los vientos. Esto acarrea un cambio gravitacional que ocasiona una disminución
del peso de todos los cuerpos sobre la Tierra.
Las alteraciones provocadas por los eclipses desencadenan
fenómenos como ciclones o huracanes por el cambio en la velocidad de los
vientos, debido a las drásticas bajadas de las temperaturas o terremotos
causados por los reajustes en las placas tectónicas originados por las
alteraciones gravitatorias.
Los efectos del eclipse
solar
El eclipse causa cambios del humor, temperamento y el
desequilibrio en las personas. Por eso, durante los eclipses es desaconsejable
tomar decisiones importantes no meditadas: divorcios, casamientos, compra de
propiedades o vehículos. Es preferible aplazar las decisiones hasta
cuando el efecto de los planetas se aminore.
El efecto del eclipse sobre un área específica de la Carta Natal muestra
una crisis o un énfasis en los asuntos de la casa donde se produce.
Por otra parte, el eclipse puede activar algún planeta o
punto sensible, por conjunción u oposición al que también habrá que prestar
atención. Casi todos los astrólogos coinciden en que los efectos de un
eclipse están vigentes hasta que se produce el siguiente de la misma categoría.
Durante el próximo año y medio, los cambios y crisis ocurrirán
fundamentalmente en el eje Tauro/ Escorpio. Si uno de esos dos signos está
prominente en una Carta (ya sea el Sol, el Ascendente o el Signo
de la Luna), es probable que este cambio se perciba de manera más directa.
Si bien podemos sentirnos inspirados para realizar cambios
en áreas asociadas a Tauro (amor, belleza y dinero) o a Escorpio (sexo,
pasión y la psique), algunos de los cambios pueden presentarse como por
destino.
Debido a que tanto Tauro como Escorpio son signos fijos, asociados a la
estabilidad y la seguridad: cualquier cambio puede ser difícil de vivir.
Ambos signos disfrutan de tener el control, sin embargo, con los eclipses, no
lo tenemos.
Vale la pena reiterar que la movilización no se define
únicamente por el signo solar, sino más bien por la Carta Natal completa. Tener
muchos planetas en Tauro o en Escorpio podría significar que probablemente se
sientan los cambios con más fuerza.
Por
Patricia Kesselman
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