La celebración de la Luna de Buda coincide cada año con la Luna Llena en Escorpio. Además, este año se formará junto a un eclipse total lunar.
Tradicionalmente, según el Budismo, Siddhartha Gautama fue el
primer ser dentro del Planeta Tierra que alcanzó la liberación: adquirió los
poderes de la Luz y la Conciencia. En este sentido, hizo un voto ante el Logos
Solar, prometiendo regresar a la Tierra para bendecir al mundo, manejando la
fuerza cósmica, cada año, en la Luna Llena del mes de Tauro.
La Luna Llena del mes de Tauro siempre se forma en Escorpio.
Es la Luna de Vesak o Luna de Buda y este año sucederá en la noche del domingo
15 y el lunes 16 de mayo, según el lugar en el cual vives.
Astrológicamente, la Luna Llena en Escorpio nos trae siempre
la necesidad de integrar la transformación emocional para dar vida a una nueva
estructura material, un nuevo proyecto, una nueva vida.
Según el Budismo, la Luna de Vesak o Luna de Buda cambia
nuestra atmósfera, y según la tradición se introducen en las capas etéricas del
Planeta unos átomos pertenecientes a otras dimensiones del espacio. Ello
produce la polarización de la Conciencia en niveles superiores, presupone una
aspiración superior de parte del individuo, y un gran poder invocativo.
Es tiempo para generar paz, silencio, meditar para crear un
nuevo orden interno, una nueva armonía. Y ello, para el budismo, es la mejor
devoción que podemos dedicarle al señor Buda.
En estos días previos a la Luna Llena de Wesak, el Día del
Buda, es importante abrir nuestros cuatro centros, cuatro cuerpos, las cuatro
funciones de conciencia:
ꕥ Centro Creativo: Cuerpo Espiritual:
Conciencia Intuitiva
ꕥ Centro Material: Cuerpo Físico: Conciencia
Sensorial
ꕥ Centro Intelectual: Cuerpo Mental:
Conciencia de los Pensamientos
ꕥ Centro Emocional: Cuerpo Psíquico:
Conciencia de los Sentimientos.
Es importante poner especial atención en el desarrollo del
poder de materialización de lo nuevo. Para eso, es fundamental estar abiertos,
serenos, meditar, estirar nuestro cuerpo, dejar fluir emociones, y conectar con
nuestro plano físico, con la voz del cuerpo, y con la conciencia que podemos
producir con las propias manos la nueva estructura.
Si puedes, entonces, medita en estos días invocando la
presencia de Buda, presta atención a tu voz interior, la conexión plena con tu
Ser, y así Buda aparecerá.
Es tiempo de dejar que nuestra estructura se transforme. Es
momento de liberar las emociones que ya son parte del pasado. Así que, suelta!
Es ahora que recibimos la bendición del Gran Espíritu para
nuestro renacimiento. Recuerda: el cambio es liberación, y todo cambio externo
es producto de un cambio interno. Permítete renacer.
Pronto te cuento más sobre la energía de esta Luna Llena en
Escorpio!
¡Un abrazo y hasta pronto!
Carolina Goldsman.
No hay comentarios:
Publicar un comentario