Pero también es regente de Tauro, lo que considera el arte de la seducción, y también la capacidad pues de usar nuestros magnéticos recursos.
Con estas notas entendemos pues que
tanto lo relacional, como nuestro concepto de lo afectivo, va a ocupar un lugar
más interno, dónde desde nuestra alma, poder reflexionar sobre qué es el amor,
cómo lo queremos vivir, y qué hemos aprendido de él en el pasado, pues incluso
podrían aparecer personas con quién tuvimos una relación importante, quedando
temas inconclusos, para poder cerrar bien el entendimiento de esa experiencia.
Se recomienda hacerlo desde el amor
incondicional y constructivo para todas las partes. Aquello que nos ha nutrido
de esa experiencia, es una toma de consciencia para ambos.
Vamos a ver a Venus también como lo
que nos relaciona con la economía, pues como regente de Tauro, es el tema que
le confiere a esa capacidad de generar recursos, pero también su uso. Es decir,
el consumo de nuestro dinero, y su distribución. En qué gasto mi dinero, donde
lo invierto, y cómo.
Cuál es mi escala de prioridades y darles
el lugar a las cosas desde esa prioridad. Venus retrógrado nos hará reflexionar
en la relación que tenemos con el dinero porque puede que algo al respecto se
bloquee o se ralentice si tenemos que ingresar algún dinero o una compra que
esperamos. Se pone de manifiesto nuestro sentido de propiedad y de seguridad.
Pero Venus es también el regente
espiritual de Capricornio. Eso es muy importante de tener en cuenta.
Nuestra interpretación de la riqueza,
y la austeridad. Pues venus en Capricornio rige la ley del abastecimiento.
Estando retrógrado podemos ver en el mundo como el abastecimiento de las cosas
se ralentiza también. No llegan los pedidos o se retrasa el transporte, y la
entrega de mercaderías queda afectada.
Venus como regente espiritual de
Capricornio nos invita a reflexionar sobre nuestra riqueza inconsciente. En
estos momentos que estamos viviendo es muy importante esta reflexión.
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