Reconectando con nuestra parte más sabia

El próximo 15 de septiembre, se produce el novilunio en el grado sabiano 22 del signo de Virgo. El grado corresponde a la siguiente imagen: «Un escudo real de armas enriquecido con piedras preciosas».

Este grado sabiano del signo de Virgo, hace referencia a los logros ancestrales. Tradicionalmente, el rey es el símbolo de unidad de una nación integrada; ya que se visualiza un escudo de armas, estamos tratando con un estatus que no es meramente adquirido de manera personal, sino que tiene sus raíces en un pasado notable.

A nivel simbólico, este grado sugiere que todo gran Adepto ha surgido de una línea de seres humanos que han dejado sus marcas sobre la

evolución humana. La consecución espiritual es el resultado de una serie de esfuerzos largos y repetidos; es el final de un "camino real" (raja yoga) en el sentido más amplio del término, raja, que significa rey.

Es un recordatorio de nuestra conexión con nuestra parte más sabia.

El gráfico del Novilunio sugiere un potencial de talentos o recursos ocultos que desean salir a la superficie. Veámoslo. 

Los tres planetas transpersonales -Urano, Neptuno y Plutón- conjuntamente con el Nodo y Júpiter aspectan al Novilunio. Amplían a un nivel más sutil el significado del arquetipo de Virgo.

Virgo es el signo del trabajo y del servicio, pero también el de la maduración y la cosecha. Nuestro trabajo y nuestra actitud personal merecen una recompensa que ahora recibimos. Mediante nuestra cooperación y nuestros esfuerzos por contribuir con una parte al Todo, participamos en la comunidad y eso nos permite sentirnos protegidos y apoyados por las leyes que regulan la vida en común.

 

La espera y la maduración son cualidades espirituales de Virgo que permiten la conexión directa con el ser interior. En la naturaleza, el trigo madura en julio y se cosecha en agosto y septiembre. Del mismo modo, el ser interno crece y madura según las leyes naturales del desarrollo. Los ciclos vitales y la dimensión tiempo deben tenerse siempre en cuenta.

Y la promesa de este novilunio es la de reconectarse con nuestro grupo de consciencia con el cual compartimos valores e ideales. El estar atentos a lo invisible, y confiar en la inspiración, la meditación y el silencio, nos ayudarán a gestioanr los retos que pueden presentarse duranteeste ciclo.

Y es que cuando Virgo es capaz de diferenciar correctamente, actúa y fluye en el orden vital subyacente en todas las cosas, cultivamos la confianza en la vida y el servicio a la Humanidad.