Cruz Cósmica en los cielos

Los tiempos que vienen son muy poderosos. Los meses de Junio, Julio y Agosto de 2010 serán realmente trascendentes. Tendremos la configuración de una Cruz Cósmica en los cielos. Esta nueva energía comienza con la apertura del portal del solsticio de Cáncer del 21 de junio (solsticio de verano en el hemisferio norte y solsticio de invierno en el hemisferio sur), dando inicio a la energía de la Madre Divina, acelerando la entrada de códigos de luz –activaciones- que se están emitiendo desde el centro galáctico. Después del solsticio del 21 de junio los cambios se acelerarán grandemente en la Tierra y en la conciencia humana, lo que acercará más el proceso de despertar a la conciencia de masas. Las turbulencias que podrán manifestarse son sólo las apariencias de una vieja energía que está perdiendo su poder. Si comprendemos la realidad divina, todas esas turbulencias se convertirán en oportunidades de liberación y de ganar perspectiva. Esta poderosa energía acompañará la poderosa configuración del Plenilunio del 26 de junio, la energía del Maestro Divino, con su poderosa configuración de las energías de Júpiter y de Urano actuando conjuntamente en Aries, el signo de los nuevos comienzos, dando lugar a una Iniciación planetaria. Será un punto importante de nuestra relación con la conciencia solar, la energía Crística que fluye a través de nuestro sol desde el Sol Central de la galaxia. Un gran caudal de fuego-luz estará ingresando al planeta. Se trata de la Triple Llama Cósmica (fuego por fricción, fuego solar y fuego eléctrico). En el plano físico tendremos la fusión de las fuerzas densas y etéricas; esto será consumado en el Sendero de Purificación. En el plano astral se efectuará la resolución de los pares de opuestos; esto será consumado en el Sendero del Discipulado. En el plano mental, el Ángel de la Presencia y el Morador en el Umbral estarán frente a frente; su síntesis se producirá en el Sendero de Iniciación. Entonces se abre ampliamente la puerta a través de la cual la vida y la luz de las tres constelaciones mayores pueden estar esotéricamente disponibles para que el iniciado sea un ser humano liberado. Los primeros en recibir esta influencia, a nivel humano, serán los nacidos en los signos de Aries, Cáncer, Virgo, Libra, Capricornio, Piscis. Es en estos signos zodiacales donde las aperturas energéticas tendrán lugar primero en el planeta Tierra (y en los países vinculados a esos meridianos). No temamos los cambios, porque lo que la Tierra necesita para estabilizarse es nuestra respuesta frente a los mismos. Nuestra estabilidad como Portadores de Luz es la respuesta proactiva que le ofreceremos no solamente a la Tierra sino también a todos los que nos rodean. Reciban los cambios con los brazos abiertos. El fuego es la esencia de toda la existencia y está presente en todo en forma latente. El fuego vigoriza y estimula; transforma lo denso en sutil, y viceversa. La Biblia dice: “Nuestro Dios es un fuego consumidor”. Él ha formado la entera creación con la ayuda del fuego, y a través del fuego puede absorberla de nuevo. Esta etapa nueva que comienza en la aventura humana sobre la tierra es un proceso para purificar todos los cuerpos, para establecer un cuerpo etérico puro, y para convertirse en uno con la luz. Todos los grandes Maestros han hecho esto. Pasaron a través del fuego y fueron purificados. Se sometieron al Plan Divino y han logrado las cosas más grandes para la humanidad. Por tal motivo, es vital que recuperemos –como humanidad- nuestra relación sagrada con el Sol. Sentir lo que el Sol realmente representa y pedirle que alimente y active con su energía todos nuestros centros energéticos y nuestra verdadera visión divina, mientras protege nuestro cuerpo. De esta forma la energía del Sol nos bendecirá. La ascensión es imposible si se está separado del principio solar. Honremos las alineaciones planetarias realizando ceremonias grupales de bendición a los elementales y a la Tierra, lo que nos permitirá preparar nuestra conciencia para las poderosas energías que tendrán comienzo. Somos uno en el corazón de Dios, ahora es el momento de comenzar a Ser Uno en los corazones humanos, en manifestación en la Tierra. Uno de los secretos al hacer la unidad es la de estar al servicio de la Luz y de la Ascensión, así como de los planetas en evolución. Empodérense unos a otros cada vez que se presente la oportunidad.

Namaskar
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