La energía del mes de
Piscis proporcionó a la humanidad la base necesaria para construir una vida
personal dotada de comodidad, beneficios y felicidad. Cada alma busca construir
su vida personal para alcanzar el confort que necesita. El entrenamiento
para esto sucedió durante la era de Piscis. La era de Piscis encuentra hoy su
propia limitación en que el alma no puede sentirse realizada buscando el
confort y la felicidad personal. Cuanto más el alma se orienta al beneficio
personal, más limitaciones encuentra en alcanzar el confort y la felicidad
personal. Como el alma está en continua expansión, la orientación al confort y
a la felicidad personal no le permite alcanzar la plenitud. El enfoque debe ser
diferente en la era de Acuario. Para que el alma pueda expandir su conciencia,
es necesario que piense en el confort grupal y la felicidad grupal al mismo
tiempo que piensa en el confort y la felicidad personal. Este ajuste es lo que
exige este momento, y es ahí donde se ve la limitación pisciana.
Cuando
un pajarito crece en un huevo, el cascarón del huevo ofrece confort y
protección. Esto es así hasta que el pajarito crece, pero luego el cascarón se
convierte en una limitación y el pajarito debe romperlo para encontrar una
mayor expresión de vida. Del mismo modo, la era de Acuario exige que rompamos
el cascarón del confort personal y la felicidad personal para entrar en la
dimensión mayor de la conciencia grupal.
Ofreciéndonos al confort
grupal y a la felicidad grupal y, al mismo tiempo, abandonando el confort
personal y la felicidad personal, el alma encuentra la necesaria expansión de
conciencia y disfruta de una dimensión mayor de dicha de la existencia.
Aunque
los aspirantes ya son conscientes de este cambio de dimensión, todavía no
pueden romper el cascarón de las individualidades. Hoy en día, la iniciación se
relaciona con ofrecerse a un grupo de almas, entregándose a su bienestar, su
elevación y su educación.
Del
mismo modo que el pajarito se une con alegría a los otros pajaritos al romper
el cascarón, el alma individual se une al alma grupal. El alma grupal no es más
que un grupo de almas que han roto sus cascarones de personalidad. Por lo
general, no son los compañeros que uno tiene, que trabajan como individuos en
un grupo. Por ejemplo, puede haber diez huevos en una canasta. Estos diez
huevos representan los diez miembros que conforman un grupo para un
entrenamiento grupal. El que más se ofrece al grupo, rompe su cascarón. Al
romper su cascarón, el pajarito está afuera y no se junta con los huevos en la
canasta. Salta de su canasta y se encuentra con otro pajarito que han saltado
de su propia canasta. Así, los que rompen el cascarón de su personalidad se
unen para constituirse en un alma grupal. El agrupamiento sucede según la
cualidad del rayo del alma. Las energías piscianas dan así lugar, en la rueda
invertida, a las energías de Acuario para la formación del nuevo grupo de
servidores mundiales. El nuevo grupo de servidores mundiales son aquellas almas
que han trascendido las limitaciones de sus personalidades.
Al
entrar en el mes de Piscis, que la limitación pisciana sea reconocida y
trabajada en pos de una mejor experiencia a lo largo del próximo ciclo anual.
Sri.
K Parvathi Kumar
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