Por Sarah Varcas
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28 de Marzo 2016
28 de Marzo 2016
Traducción: Fara González
Renacimiento y Responsabilidad
Saturno estacionado retrógrado en el
grado 17 de Sagitario. Este grado es de renacimiento con Saturno como comadrona
en los meses venideros. En la forma verdaderamente Saturniana puede no
ser fácil el nacimiento y la labor de parto puede ser larga, pero el resultado,
cuando se estacione directo en agosto, revelará el valor de nuestros esfuerzos.
Este renacimiento reanimará la parte de nosotros que se ha estancado y sin
vida, atrapada en un estado de animación suspendida después de un desafío,
shock o desilusión que cortó el viento de las velas. Sea que se nos haya
golpeado mediante los giros del destino, las decisiones de los demás o nuestra
falta de preparación para enfrentar el sendero, el retrógrado de Saturno ofrece
una oportunidad para recuperar nuestra energía, nuestro equilibrio y respirar
nueva vida en nuestras viejas esperanzas, sueños y aspiraciones.
Debemos ahora enfrentar el impacto de
quienes fuimos. Al incorporar la sabiduría que nace de este hecho podemos vivir
la vida con una mente abierta e inquisitiva, un corazón fiel y una disposición
a honrar las verdades difíciles de reconocer. Saturno ofrece ahora una
oportunidad para procesar en la quietud de nuestra alma las lecciones que han
surgido desde su llegada en Sagitario el pasado septiembre. Recuerden aquel
entonces y reflexionen sobre lo ocurrido hasta ahora, los cambios bienvenidos o
no, las sorpresas, lo nuevo que ha llegado, lo viejo que ha partido y las cosas
que siguen siendo intransigentes. Saturno habla más profundamente sobre esto
último, revelando por qué luchamos para cambiar ese hábito poco útil,
aferrándonos a ese comportamiento negativo o enfocando nuestros recursos
internos de manera constructiva. Al hacerlo se revela exactamente lo que
debemos sacrificar para ser libres. Donde nos mantenemos encadenados a viejos
apegos nacidos de la familiaridad cómoda con un estatus quo que nos da seguridad.
Anulados y estancados, pero ciertamente seguros.
En los meses venideros podremos
discernir cómo utilizar estos dones, habilidades, conocimiento y sabiduría
efectivamente. Podemos aprender más respecto a lo que nos obstaculiza hacer,
las pequeñas cosas que permitimos que nos distraigan de lo importante, nuestra
falta de disciplina o incapacidad para hacer el trabajo necesario para
manifestar nuestros sueños. Saturno no brinda nada en bandeja dorada mientras
nos solazamos en un lecho de rosas. Sus recompensas son ganadas con sacrificio
y a través del compromiso, la paciencia y la dedicación de todo nuestro ser a
la tarea a mano. Un rector difícil seguramente, pero también uno justo, y los
esfuerzos producen resultados a la altura. Así que si nuestros esfuerzos no
permiten el resultado, es seguro que algo está desalineado o a destiempo. En
los meses venideros Saturno retrógrado nos ayudará a rescatar nuestro sentido
de oportunidad, aplicación de la atención y paciencia en el proceso de cambio
creativo. Nos pide compromiso y una disposición a hacer lo necesario en lugar
de fantasear respecto a un mundo que cambia mientras hacemos todo lo que
podamos para mantener el mundo viejo.
Sarah Varcas
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