Alex Ferrari entrevista a Gregg Braden en Next Level Soul
https://youtu.be/yUKg3jA9xis?si=RV5e7JW-g4_HQtgn
Gregg Braden:
Uno de los primeros Rollos que se recuperó es un pergamino que lleva el nombre del Pergamino de Guerra W,A, R, el pergamino de guerra es de una batalla entre el bien y el mal, y era una batalla muy real. No es una metáfora. Con mucha información. Alguna es falsa, alguna es verdadera. Desinformación, información falsa, información generada por IA, de pronto la gente no se siente conectada con sus familias, o sus amigos, o su sociedad, y ahora no saben en quién confiar. Porque la información, no sabemos en cual información confiar. Allí es cuando la sociedad se vuelve muy
vulnerable. ¿Qué está pasando en el mundo? ¿Por qué está pasando? ¿Qué podemos hacer para aliviar el sufrimiento y mejorar nuestras vidas? La conversación que estamos por tener tú y yo es la respuesta subyacente a todas esas tres preguntas.(Empieza la entrevista)
Alex Ferrari: Creo que esta es, por lejos, una de
las conversaciones más importantes que creo haber grabado en este programa.
Me gustaría dar la bienvenida a nuestro campeón que
regresa, Gregg Braden. ¿Cómo estás Gregg?
Gregg: Estoy más que en la épica, estoy muy
emocionado de verte otra vez en tu nuevo entorno. Y ya saben, como es habitual,
esto es completamente no guionado, realmente no sabemos adónde vamos a ir.
Salgo otra vez desde nuestro estudio, estamos en las afueras de Santa Fe, Nuevo
México. En el desierto, y es un día hermoso impresionante, muy inspirador. El
día perfecto para que tú y yo tengamos esta conversación.
Alex: Aprecio eso, amigo mío. Ha pasado un rato
desde que estuviste en el show, ansío tocar algunas ideas, conceptos
interesantes de los que no hemos hablado antes. La primera cosa de la que
querría hablar contigo, y me encantaría conocer tu perspectiva, es que, ya
sabes, en los años 90 hubo gran alboroto sobre los Rollos del Mar Muerto, si no
me equivoco, Allí es cuando me hice consciente de eso. Yo era joven, y oí
hablar de esto. Qué bien, ¿pergaminos? Yo insisto en que esto ha traído mucha
controversia en torno a ellos. Nos los ocultaron durante décadas, según
entiendo por el Vaticano. Puede que eso sea incorrecto, pero vayamos un poco
más profundo en lo que son. ¿Qué dicen? Y ¿por qué son tan controversiales?
Gregg: Esta es una gran conversación, Alex, y estoy
feliz de empezar por aquí. Déjame comenzar diciendo que la gente oye hablar de
los Rollos del Mar Muerto, y suena como algo muy antiguo y lejano y tal vez
irrelevante para nuestras vidas de hoy. Y esta es una de las cosas fascinantes
sobre este tipo de historia. ¿Los Rollos son antiguos? Sí. ¿Están obsoletos?
Absolutamente no.
Y la razón de eso es que estamos empezando a
entender, los científicos e investigadores que siguen los ciclos de la
experiencia humana, ciclos de conflicto, ciclos de tiempo, es que vivimos una
continuidad de experiencias que comenzaron hace largo tiempo y que tienen
influencia directa e impacto directo y realmente da contexto a lo que vemos en
el mundo hoy.
Hace poco hice un evento en vivo, estábamos en
Toronto, Canadá, una audiencia hermosa, gente hermosa. Estuve allí con un
número de oradores, y la gente de la audiencia hacía diferentes preguntas, pero
eran una misma pregunta. ¿Qué está pasando en el mundo? ¿Por qué está
sucediendo? ¿Qué podemos hacer? Para aliviar el sufrimiento, para mejorar
nuestras vidas.
La conversación que tú y yo vamos a sostener es la
respuesta subyacente a esas tres preguntas. Entonces retrocedamos un poco. Los
Rollos del Mar Muerto siguen siendo un misterio, y aún los estamos
descubriendo. No hemos encontrado todos los rollos. En 1946 y 1947, en Qum Ram,
Israel. Creo que la mayoría ha oído la historia. Un par de jóvenes beduinos
estaban haciendo algo que aparentemente habían hecho un millón de veces antes.
Levantaban piedras del suelo del desierto y las arrojaban en las aberturas de
las cuevas de los acantilados. Supongo que habían hecho eso un millón de veces
y nunca pasó nada. Y un día tiraron una piedra y sonó diferente. Había golpeado
contra algo en el interior. Entonces treparon y entraron, y encontraron los
jarrones de barro. Si la gente nunca vio eso, estos jarrones son así de altos (señala
más arriba de su cabeza). No son jarros, son grandes jarrones de arcilla.
Estaban sellados en su mayoría. Y contenían manuscritos que no se habían visto
desde hacía unos 2000 años. Fueron encontrados en los años 46 y 47, y
finalmente fueron 11 cuevas.
Y cuando la gente pregunta sobre estas, dicen
“Bueno, ¿por qué no podemos simplemente verlos?” En primer lugar, pocos de
ellos estaban intactos. Muchos estaban en fragmentos del tamaño de un sello
postal, que se ha tardado años en armarlos juntos. Pero lo que se pone
realmente interesante, es que fueron descubiertos en el año 46 y 47 pero no
fueron liberados al público, como dijiste, hasta principios de los años 90.
Alex: ¿Sería el Vaticano? ¿Fue el Vaticano que se
apropió de ellos?
Gregg: A principios de los 90 yo era miembro de una
organización académica, se llamaba BAR, (N.T. biblical archeology revision)
Revisión de Arqueología Bíblica, y ellos publicaban una revista mensual que
describía la arqueología bíblica en Medio Oriente, y se enfocaba sobre los
Rollos del Mar Muerto, y fue su lobby lo que en gran medida liberó esos rollos
al acceso público. El Vaticano y otras religiones, no solo el Vaticano, otras
organizaciones religiosas, preferían que estos rollos no se hicieran públicos,
por un par de razones.
En primer lugar, eran los registros más antiguos.
Empujaban hacia atrás las fechas de los documentos del Antiguo Testamento casi
unos 1000 años. Entonces ahora tenemos versiones mil años más antiguas de
manuscritos del Antiguo Testamento. Pero lo realmente importante es que no
fueron editados, como lo habían sido para el canon bíblico, la Biblia que hoy
conocemos, la Biblia del Rey Jacobo (N.T. King James de Inglaterra) y
muchas otras versiones.
Entonces, esas dos cosas, ¿qué podía haber
posiblemente en esos rollos, que impedía que fueran liberados al público
durante 45 años? Y el hecho de que hicieran eso, es gran parte del asunto.
Pero lo relevante para esta conversación, Alex, no
puedo inventar esto. Esto es lo que sucedió. En la cueva Nº1, el primer jarrón,
estaban los primeros rollos que se recuperaron. Es un rollo que se conoce por
el nombre del pergamino de guerra W.A.R (N.T. war, guerra), el pergamino
de guerra. Era un rollo relativamente intacto de unas 19 columnas, si recuerdo
bien. Y detalla en un lenguaje vívido tremendo, tremendo, una batalla que se
inició hace mucho tiempo y se está desarrollando en nuestras vidas hoy en día.
Y aquí es donde entra la continuidad. Las palabras exactas de ese Rollo: esta
es una batalla, una antigua batalla entre los llamados Hijos de las Tinieblas y
los Hijos de la Luz. Cuando hablamos de hijos de la oscuridad e hijos de la
luz, no todo es masculino. No trabajaban el género como lo hacemos hoy. Esto se
trata de los humanos. Se trata de la humanidad, librando una batalla entre el
bien y el mal, y la manera en que se desarrolla esa batalla.
Y el Rollo describe 7 batallas que tendrán lugar a
través del tiempo, tres a uno por los hijos de las tinieblas, tres a uno por
los hijos de la luz. Son seis. La séptima batalla es realmente interesante y es
lo que muchos estudiosos con influencia directa ven que está sucediendo y
relevante para nuestras vidas hoy. La séptima es una batalla que ganan los
hijos de la luz. Sin embargo es ganada por medio de lo que llamamos
intervención divina y acceso a la divinidad humana, a nuestra divinidad
personal. Entonces la gente empieza a ver, sabes, qué significa eso. Cuando
oímos la palabra divinidad, de esto hablé un poco en una conversación anterior
en tu canal, mucha gente cree que la divinidad tiene algo que ver con la
religión, y yo puedo ver por qué. Ya sabes, hay escuelas de divinidad de las
que todos hemos oído hablar. Si miras la definición de divinidad, simplemente
dice que es la capacidad para trascender las limitaciones humanas percibidas,
la capacidad para trascender las limitaciones percibidas. Entonces lo
separamos, Alex. Esto me fascina, porque en primer lugar, trascender no
significa que luchemos y ganemos; significa que triunfamos y se vuelve más que
la batalla. Número 1.
Número 2: limitaciones percibidas. Todos hemos
percibido limitaciones en nuestras vidas que incluso pueden no ser reales. Son
nuestra percepción, nuestra programación a la que hemos estado expuestos a
través del adoctrinamiento dentro de la vida, desde nuestra familia, nuestra
comunidad, nuestra sociedad y religión, ciencia, educación, la educación
pública, en muchos lugares recibimos adoctrinamiento que define qué creemos, de
qué somos capaces y de qué no. La divinidad es la capacidad de trascender esas
limitaciones percibidas.
Cuando hablamos de divinidad, la divinidad es una
parte de nosotros que parece no tener edad, es atemporal, es nuestro saber
directo; cuando algo sucede en nuestras vidas está profundamente vinculado a la
intuición, y absolutamente sabemos que algo es verdad, o sabemos qué hacer.
Daré un ejemplo: hubo un tiempo en mi vida que me encontré en la escena de
accidentes de automóviles. Yo era el primero que llegaba allí a las primeras
horas de la mañana, debido a donde vivo, en el alto desierto de Nuevo México, sin
servicio de celulares. No podía llamar al 911. Yo estaba allí, y en ese tiempo
yo tenía un entrenamiento general en primeros auxilios, pero no era técnico en
emergencias médicas en modo alguno. Y cuando llego a estos accidentes, digo,
sabes, “Ayúdame. Ayúdame a servir. Ayúdame a ser la mejor versión de mí mismo.”
Y yo hacía lo que necesitaba hacer para ayudar a estas personas, hasta que
llegara ayuda. Eso es un aspecto de la divinidad. Pasó bastante. Termino
recibiendo entrenamiento, dije, si voy a estar en esta posición, mejor que sepa
qué hacer. Entonces ahora tengo un pequeño hospital que llevo conmigo en mi
camioneta, por si acaso, sabes, para tener a mano.
Entonces la divinidad es donde comienza nuestro
amor, donde comienza nuestra sanación. Es donde comienza nuestro perdón. No
vive dentro de nuestros cuerpos físicos. Nuestros cuerpos físicos son el
conducto biológico hacia una parte no física de nosotros, que la ciencia recién
empieza a entender, que los experimentos científicos ahora están mostrando que
tenemos acceso a información que no vive dentro de nosotros, sino que está
profundamente arraigada en nuestra percepción de nosotros mismos.
Entonces, los rollos hablaban de una batalla entre
los hijos de las tinieblas y los hijos de la luz. Cuando pensamos en una
batalla, a menudo pensamos en términos de personas luchando en un campo grande
con las armas que estén disponibles en el momento. Y hablan de eso en el Rollo,
pero esa batalla está en curso ahora mismo. Y puede ser una batalla cinética, y
ciertamente estamos viendo eso desplegándose en campos de batalla en el mundo,
desde Ucrania, ya sabes, hasta lo que vimos ocurrir en Israel el 7 de octubre.
Esos son ejemplos de batallas cinéticas. Pero también es psicológico, batalla
psicológica, y cuando los eventos se despliegan y las percepciones están
sesgadas hasta un punto de negar nuestra propia divinidad, eso es una forma de
maldad. Es una forma de maldad en nosotros cortar nuestra relación con la parte
de nosotros mismos que nos hace plenos y completos. Entonces cuando alteramos
nuestra biología, o cuando nuestra biología es alterada para que no seamos
capaces de acceder a información más allá de nuestros cuerpos, eso es una forma
de mal biológico.
Lo que la ciencia está mostrando, y esto es
fascinante, se relaciona con la conversación sobre el transhumanismo, porque la
ciencia está mostrando muy, muy claramente que somos resonadores biológicos. Entonces
cada célula en nuestro cuerpo funciona como transistores y resistores, en
microcircuitos y condensadores, emisores y receptores de fotones, y almacenamos
información en nuestro ADN como la tecnología de blockchain.
La tecnología blockchain, de los bitcoins y las
finanzas descentralizadas realmente imitan la forma en que se almacena la
información en el ADN humano. Y no es por accidente que eso sucede de ese modo.
Mucho de nuestra tecnología imita lo que ya estamos haciendo en nuestra
biología, lo conocemos, hemos hablado de eso en otros programas. Entonces
nuestra biología es lo que nos permite, la calidad de nuestra biología,
determina la calidad de nuestra relación con la información del campo… Y lo que
es aún más interesante, sabes, cuando estaba en el colegio. En los años 50, los
60, principios de 1970, tal vez suene extraño decir eso,
Alex: (se ríe) Bueno, luces muy bien, sin
embargo.
Gregg: Gracias. Gracias. Cuando estaba en la
escuela nos enseñaban que somos frágiles, impotentes, seres que son víctimas de
nuestras circunstancias externas de nuestro mundo, y que las células eran poco
más. Digo, la gente piensa en las células, es como suave, pegajoso, blando,
cosas en el cuerpo. Aquí es donde la ciencia está cambiando, Alex. Ahora la
ciencia mira al cuerpo humano desde una perspectiva TI, tecnología de la
información.
Y esto ahora, empezando en 1980 - es cuando comenzó
- ven a cada célula literalmente como un microcircuito. Y tenemos 50 trillones
(NT. Dice trillion, equivaldría a un millón de millones) de células en
el cuerpo. Tenemos 50 trillones de microcircuitos, y cada una de esas células
hace las cosas que acabo de mencionar, y más. La membrana de las células tiene
receptores que realmente sintonizan con la información en el campo. Y ahora, lo
que las conferencias de TI están diciendo es que el ADN es realmente lo que
llaman una antena fractal. Fractal significa que es capaz de recibir
información múltiple de un amplio espectro simultáneamente. No está sintonizada
con una frecuencia única. Es capaz de recibir múltiples frecuencias de todo el
amplio espectro de información.
Y a medida que cambiamos nuestras percepciones, en
realidad cambiamos lo que se llama la conformación, la forma y función del ADN,
permitiéndole sintonizar con diferentes facetas del campo. Y hacemos todo esto
a voluntad. Podemos hacerlo cuando elegimos hacerlo. Entonces estamos en
comunicación constante. Estamos teniendo una conversación con información que
no vive dentro de nosotros, pero somos el conducto para esa información, y de
allí es de donde proviene nuestra creatividad, nuestra imaginación, nuestra
innovación, las comprensiones que tenemos.
Sabes, tuve oportunidad hace pocos años, de viajar.
Mi esposa es miembro votante de los Grammy, y ella me invitó a ir los Grammy.
Las festividades de los Grammy, fue el año que lo hicieron en Nueva York. Por
supuesto que fui. Y aproveché la oportunidad, cada músico, cada instrumentista,
cada vocalista que tuve oportunidad de conocer, en algún momento de la
conversación les preguntaba; yo decía, “Vaya, ¿de dónde vino esa música? ¿De
dónde vino esa pieza musical?” Y ya sabes, yo ya sé de dónde. La respuesta la
comparto aquí, porque todos me dijeron lo mismo. Cada uno me dijo “No vino de
mí. Llegó a través de mí. Vino de algunos que reconocen esto. Vino de otro
lugar.” Y me dijeron: “Yo tuve que salirme del camino. Tuve que sacar mi ego
del camino, mis expectativas fuera del camino, para que pudiera fluir.”
He trabajado con científicos toda mi vida, y he
oído lo mismo por ingenieros de software. Ellos no quieren simplemente escribir
código. Quieren escribir código hermoso y elegante. Y dicen que hay un proceso
intuitivo en que se quitan del camino y ese código, la información, viene,
porque están cableados para pensar de esa manera, fluye a través de ellos,
artistas, escritores. Sabes, cuando hacemos relajación en yoga, en una playa, o
en un bosque, en la naturaleza, y de pronto tenemos esa sensación de estar profundamente,
profundamente conectados; no separados de todo lo que vemos. Estas son facetas
de nuestra divinidad. Entonces, la divinidad humana somos nosotros, siendo la
mejor versión de nosotros mismos, amando sin miedo.
Ahora, esto es poderoso, porque todos sabemos lo
que es el amor, y todos hemos amado, y todos sabemos cómo amar. Pero ¿cuántos
de nosotros podemos verdaderamente decir, Alex, que en algún punto de nuestras
vidas, hemos tenido el coraje de rendirnos a otro ser?, otro organismo, otro
humano, y amar sin miedo, a cambio de convertirnos en una mejor versión de
nosotros mismos o encontrar algo más profundo en ese amor combinado.
A menudo, al hablar con psicólogos, cuando la gente
ama, ama y siempre se reprime un poco. Siempre está la posibilidad de que algo
no funcione y no puedes darte a ti mismo. Siempre tienes que retener algo
atrás. La divinidad nos libera del miedo que nos impide amar plenamente. La
divinidad es lo que nos permite perdonar. La gente perdona y luego mira a su
alrededor y dice, sabes, ¿quién me vio perdonando así? y buscan reconocimiento,
como esperando que algo vuelva. La divinidad es perdonar sin una expectativa de
que algo van a devolverle. La clave de nuestra divinidad es que nos libera del
miedo que nos limita, y el miedo es la mayor mercancía en un mundo donde los
poderes fácticos quieren el control. El control solo es posible cuando tenemos
miedo de lo que sucederá si no seguimos los mandatos, si no seguimos la agenda,
si no seguimos las políticas que están ocurriendo allí.
Entonces, por esta razón, lo que nos separa de
nuestra divinidad, también nos separa de la sanación de nuestro miedo; nos
mantiene encerrados en el miedo, atrapados en el miedo. Ese es el objetivo
último. La batalla entre los hijos de las tinieblas y los hijos de la luz.
Puede manifestarse como una batalla física cinética, pero la batalla última es
por nuestra propia humanidad, porque es a través de nuestra humanidad que
accedemos al campo, a través de la antena, el ADN, las membranas celulares. El
movimiento transhumano; trans significa más allá; más allá de lo humano. El
movimiento transhumano es el movimiento para reemplazar porciones de nuestra
biología natural donde residen esas antenas, con sintéticos; órganos
transhumanos, tejido transhumano; no es capaz de comunicarse con nuestra
divinidad. De modo que todavía puedes ser un ser viviente, pero pierdes el
acceso a tu divinidad porque has entregado tu poder, tu soberanía como humano.
Así es como el mal, la batalla de los hijos de las tinieblas y los hijos de la
luz, esta es una de las maneras en que el mal prevalece.
De modo que es una gran conversación, sabes. Yo sé
que cuando era niño, otra vez, creciendo en el Medio Oeste, años 50 y 60,
hablábamos del bien y el mal, y siempre era como que había un diablito rojo en
tu hombro, siempre con el mismo aspecto, Tenía una cola larga y en punta y un
par de cuernos puntiagudos, sabes, y luego había un angelito de este lado con
un halo que no estaba adherido, y tenían conversaciones de ida y vuelta, y
estábamos atrapados entre los dos. Y así es como el bien y el mal eran presentados
Es más que una metáfora. Es muy real, y se está
desarrollando en nuestras vidas, y lo hace de una manera que no he visto en los
medios, en el entretenimiento, si has visto algunas actuaciones de los Music
Awards (Premios a la Música), disfrazadas como arte, definitivamente
fundamentos malignos, matices. Mucha gente mira las ceremonias de apertura y
clausura en las Olimpíadas recientes, y allí vimos imágenes desconcertantes
para la mayoría de la gente. Simplemente dijeron ¿Qué diablos significa esto?
¿Por qué estamos siquiera viendo esto?
Pero cuando entiendes el contexto del que hablamos,
lo que estaba sucediendo justo delante de nuestras caras, delante de nuestros
hijos, del público en general, quedaba muy claro. Entonces es más que una
metáfora. Y creo que la cosa más importante, es que la gente que escucha esta
conversación dice “Bueno, ¿cómo ganamos? ¿cómo se gana esta batalla?”
Creo que estamos menos preocupados por ganar, y más
por triunfar. Porque hablamos de ganar; ganar implica la vieja idea de una
fuerza contra otra fuerza. Eso es lo que nos mantiene atascados en el
sufrimiento y el miedo del mundo, y el odio y la guerra que estamos viendo
ahora mismo. En el triunfo es donde nos volvemos más, superamos ese contacto
directo, y la forma en que triunfamos es viviendo la mejor versión de nosotros
mismos. Viviendo nuestra imaginación sin miedo, creatividad sin miedo,
innovación sin miedo, amar sin miedo, perdón por el perdón; cuando hacemos esas
cosas hemos triunfado, porque ahora estamos expresando nuestra divinidad en
este reino terrenal. Sabes, en este mundo, en este reino, es a través de
nuestros cuerpos que esa divinidad llega. En otro reino vendría de otra manera.
Entonces, esta es la razón de que nuestros cuerpos
sean tan importantes, Alex, creo que esta es la razón. Y miras muchos de los
textos antiguos, y la gente quiere atribuir esto a la religión, y por hacer
eso, quieren descontarlo. De modo que olvídate de la religión, y solo piensa en
esta conversación.
Se nos ha dicho que nuestro cuerpo es el templo, el
templo del alma. Cuando hablamos de templos antiguos, esto es fascinante para
mí. Porque dentro de los templos antiguos de Egipto y Grecia y Roma, el
santuario más interno de estos templos tiene un nombre, se le llamaba Lugar
Santísimo (N.T. Sancta sanctorum), y era donde se conservaba la
información más preciosa. Dentro de nuestro templo del cuerpo, tenemos no un
lugar santísimo, sino que tenemos 50 trillones de lugares santísimos, (N.T.
trillion: millón de millones), porque el núcleo de cada célula en el cuerpo
contiene el ADN, la antena fractal que nos permite acceder a nuestra naturaleza
divina, el Lugar Santísimo. Entonces aquí está una continuidad entre el pasado
y el presente, la antigua y continua batalla entre el bien y el mal, los hijos
de las tinieblas, los hijos de la luz, y todos los eventos que estamos viendo
desplegarse en nuestras vidas, en nuestro mundo de hoy.
Voy a parar allí y simplemente diré que fue una
respuesta larga para una pregunta corta. ¿Tiene sentido lo que estoy diciendo?
Alex: (se ríe): Tiene mucho sentido, Gregg,
y lo que encuentro fascinante es, dijiste algo muy profundo que me impactó, al
menos, y es que nunca consideré al cuerpo como la antena para conectarse con
una fuente superior. Es muy simple. Y sin embargo es así por la programación de
la fragilidad, y sabes, todas esas cosas, y yo nunca realmente lo pensé de esa
manera. Y pienso que la mayoría de la gente no lo hace, la mayoría de la gente
no entiende que la comida que comen, las cosas que toman, el entorno en que
viven, en cuanto a toxinas y cosas así, eso afecta la capacidad del cuerpo para
ser esa antena que conecta con su yo divino y superior. Y uso la analogía de la
nube, básicamente la divinidad o el campo akáshico, o los registros akáshicos,
son básicamente la nube, computando más allá de lo que nuestra computadora
principal pueda manejar. Es una conexión con una fuente superior de
información. De ahí la internet. De ahí, esto, porque nuestras computadoras son
limitadas. Y yo diría esta cabeza es un disquete, un disquete grande y gordo de
los años 80, y a donde estamos tratando de conectarnos es a la computación
cuántica, en una explicación muy rudimentaria. ¿Tiene eso sentido?
Gregg. Tiene mucho sentido. Dos cosas me gustaría
compartir. Primero, les comparto un experimento que se hizo. Es algo
alucinante. Aquellos de nuestros espectadores que tienen edad suficiente,
recordarán uno de los primeros juegos de computadora que se desarrollaron,
cuando las computadoras estuvieron disponibles para las personas comunes. No
estaban simplemente encerrados en una gran computadora, en una habitación con
aire acondicionado en algún lugar. Eran computadoras de escritorio muy
primitivas, grandes, así (abre los brazos) Había un juego llamado Pong
(P,O,N,G) y sabes, la gente lo mira hoy, digo, a veces lo muestro en alguno de
nuestros eventos en vivo, tenemos una versión que mostramos en pantalla, y los
jóvenes miran eso y dicen, ¿y qué hay con esto? El pong era (se ríe)
tenis, básicamente tenis. Tenías un disco pequeño, un tejo, y un jugador de un
lado y otro del otro lado. Tenías una red en el medio y tratabas de que tu
cursor le pegara a esta cosa para que rebotara y golpeara del otro lado. Hoy es
muy rudimentario, pero te digo, yo estaba trabajando en la industria de defensa
allá por los años 80, cuando apareció el Pong.
Estos tipos estaban escribiendo software para
gatillos nucleares durante la guerra fría para nuestro arsenal atómico. Y
cuando vuelven del almuerzo, estaban hipnotizados jugando al Pong en sus
computadoras, porque nunca antes habían visto un juego en una computadora.
Entonces, Pong. En 2002, un grupo de científicos
hizo un experimento aquí en EEUU. No sabía que íbamos a hacer esto, desearía
poder mostrarte las imágenes, pero lo que ellos hicieron fue tomar neuronas y
ponerlas en una placa de Petri, entonces estas neuronas son neuronas
independientes puestas en una placa, y desarrollaron un chip muy especializado,
para que las dendritas de las neuronas pudieran entrar en los pequeños puertos
del chip. De modo que tenían una célula biológica conectada a un chip digital,
y tomaron ese chip y lo pusieron en la computadora, y trajeron el juego de
Pong. Aquí está lo alucinante. Esas neuronas empezaron a jugar al Pong, y
cuanto más jugaban, mejor lo hacían. Aprendían de sus errores. Entonces, aquí
están las preguntas para los científicos: ¿Cómo funciona un grupo de neuronas
en una placa de Petri para saber jugar al Pong? ¿Dónde están las instrucciones
para jugar al Pong? Bueno, sabemos que no están en la neurona. Entonces la
neurona está realmente sintonizándose. Hay algún lugar en el Campo donde vive
el Pong, la conciencia del Pong, si quieres llamarlo registros akáshicos, o
como quieras. Ya sabes, los científicos han reconocido que el Campo existe. Los
científicos reconocen al Campo como información, información como energía, y
que nosotros somos resonadores biológicos que podemos sintonizar con diferentes
lugares en ese Campo. Entonces, por ejemplo, soy un guitarrista. Cuando no
estoy haciendo lo que hacemos ahora. Bueno, quiero aprender un nuevo Steven
Vai, uno de mis héroes de la guitarra. Steven salió, estoy en un documental con
él, estoy honrado de estar en el mismo documental
Alex: ¡Ohh! Impresionante.
Gregg. honrado de estar en el mismo documental.
Cuando quiero tocar Steve Vai, pasaré por los mismos movimientos, y es incómodo
y es difícil. Y sabes, de pronto me despierto una mañana y está justo allí. O
si estás intentando aprender un idioma nuevo, aprender español o francés, o
algo así, lo haces fonéticamente. Y de pronto te despiertas un día y estás
pensando en español o en francés. Lo probé con el chino, no funcionó tan bien,
pero debería funcionar. (se ríen los dos) en teoría debería funcionar. Y
entonces dices, Bueno ¿por qué sucede eso? Porque ese lenguaje, por toda la
gente que alguna vez ha aprendido ese idioma, ese idioma está en el Campo, y
estamos sintonizando con el Campo.
Y donde esto se vuelve realmente interesante, es
que la Física muestra, incluso estoy cometiendo este error, el Campo no está
allá afuera. Nosotros somos el Campo. Cada una de esas 50 billones de células
en nuestros cuerpos, tiene alrededor de 100 billones de átomos. Y esos átomos,
en este instante, están emergiendo y colapsando dentro de ese Campo, en una
danza de energía, como cuantos, pequeños paquetes de energía de luz. Entonces,
para que sepamos que ese Campo está ahí. Cuando las neuronas están sintonizando
con ese Campo, están sintonizando con ese Campo donde reside el Pong, donde
todas las personas que alguna vez jugaron al pong, ya sabes, desde los años
1980 en adelante, ya sabes, jugué al Pong. La razón por la que comparto este
experimento es porque realmente ayuda a anclar la idea de que nosotros somos
resonadores biológicos. La información no vive dentro de nosotros. Nuestros
recuerdos no viven dentro de nosotros. Somos la antena, a falta de mejor
término, que sintoniza en resonancia al lugar del Campo donde vive esa
información.
Sabes, mencioné que nací en Missouri. Nací justo en
el borde de Missouri, muy cerca de la frontera con Kansas, y al otro lado de la
frontera está la Universidad de Kansas. Y cuando Einstein murió, yo estaba
entrando en el mundo aproximadamente en el momento en que Einstein dejaba el
mundo. Siempre me gusta pensar que tal vez pasamos al lado en los éteres, en
algún lugar, no sé. (se ríen los dos). Me gustaría pasar un tiempo con
él. Pero cuando murió, mandaron su cerebro a la Universidad de Kansas porque
querían descubrir qué lo hacía diferente, qué lo distinguía de los demás. Y
cortaron su cerebro en rodajas finas, y lo que encontraron fue que su cerebro
era como los de todos los demás, con una excepción. Tenía muchos más pliegues
en su cerebro que los que tiene la gente ahora. Cuando piensas en esto, si las
neuronas son la antena, y tienes más pliegues en el cerebro, si tomas ese
cerebro y lo estiras, más pliegues significa que hay más superficie. Entonces
él tenía más área de superficie, más antena para sintonizar el campo, tal vez
de maneras que recién estamos aprendiendo, empezando a aprender a hacerlo
ahora.
Pero aquí es donde las tradiciones antiguas, como
los Rollos del Mar Muerto, la sabiduría del pasado, esta batalla entre el bien
y el mal, y el transhumanismo y los nuevos descubrimientos del potencial
humano, todos se unen, Alex, de una manera realmente hermosa.
Entonces somos tecnología soft, literalmente
tecnología soft. No somos silicio y chips de computadora, productos químicos y
cables. Somos neuronas y membranas celulares, y potenciales iónicos moviéndose
a través de las paredes celulares y nos autorregulamos a través del
pensamiento, sentimiento, emoción, creencia, respiración, enfoque, todas las
prácticas espirituales. Nos autorregulamos con esta tecnología soft. Y cuando
estamos en lo mejor es cuando estamos en resonancia, estamos sintonizados con
esta parte de nosotros que llamamos divinidad, que nos permite trascender las
limitaciones percibidas. El mal es lo que nos separa de esa divinidad de modo
que nos impide ser la mejor versión de nosotros mismos. Sin eso, nos volvemos
temerosos, porque ahora sentimos que no tenemos el poder en nuestras vidas para
cuidar de nosotros mismos. Y allí es cuando la vida da miedo, cuanto más te
conoces, menos temes al cambio en el mundo. Y ese es el propósito de esta
conversación.
Alex: Gregg, déjame preguntarte eso, porque esta
idea, de nuevo, del cuerpo que es la antena, es una idea tan simple, no puedo
creer no haber pensado nunca en esto así, pero tú echas una luz sobre esto, al
menos para mí. Si empiezas a analizar a los avatares que han caminado por este
planeta antes que nosotros, los yoguis y los Maestros, muchos de ellos – al
menos por lo que sabemos – tenían una alimentación muy básica, muy sencilla,
por falta de mejor palabra, una dieta orgánica, sin químicos, antes de que todo
esto suceda. ¿Te parece que, además de sus propias prácticas, esto permitió a
sus cuerpos ser optimizados a un nivel donde pudieran recibir, no solo recibir
información, sino elevar su frecuencia a un cierto nivel?
Digamos que bebes mucho alcohol, y no estoy en
contra de nadie tomando un poco aquí y allá, incluso un trago, pero hablando en
general todos sabemos que eso es veneno. Eso es lo que es: veneno. Puede ser
divertido, pero es veneno. Sin embargo, hay una carga negativa más profunda en
beber o comer esa clase de comida, y eso baja tu frecuencia. Es casi imposible,
no puedo decirlo con seguridad, pero me parece claro que en matemáticas
básicas, ingresar ese tipo de frecuencia negativa, por los alimentos que comes,
cargados con esas otras cosas, versus tener mucho más orgánico, más cercano a
la tierra, puedes elevar tu frecuencia mucho más fácilmente que si estás
comiendo mal, alimentos procesados, comiendo todas esas cosas. ¿Eso tiene
sentido para ti?
Gregg: Sí, tremendo sentido. Y la gente pregunta a
veces, sabes, ¿Cuál es una dieta óptima? Digo, podríamos pasar … es para
siempre, sí, Podrías hacer esto. La manera en que típicamente respondo a esto:
hay un número de libros de nuestro canon bíblico, que fueron editados en el
siglo IV. Hablas sobre esto en tu increíble, increíble programa, escuché
algunas de esas conversaciones con algunos de tus invitados. Algunos de esos
libros fueron escritos por los Esenios. Y se cree que los esenios fueron los escribas
de los Rollos del Mar Muerto. No es seguro que ellos realmente hayan originado
los rollos, pero ellos definitivamente escribieron la versión de los rollos que
se encuentra en QumRam. Los Rollos pueden haber venido de otro lugar, hay mucha
controversia sobre eso ahora.
El estudio de ADN del pergamino muestra que no es
del Oriente Medio. Entonces esa es una de las grandes preguntas: ¿el pergamino
vino de otro lugar? Y luego, ¿lo escribieron en Medio Oriente, o los rollos y
la escritura fueron creados en otro lado y llevados a QumRam? Esa es la
conversación. Pero se cree que los esenios son los escribas, y algunos de los
textos esenios son registros de las palabras de Jesús de Nazaret, mientras sus
discípulos le hacen las mismas preguntas que nosotros hacemos ahora mismo. Hay
una conversación donde le decían; “Maestro, ¿qué es lo que utilizamos para
nutrir nuestro cuerpo?” Y lo que él dijo hace 2000 años, es muy claro, muy
limpio, muy preciso. Es lo que querría responder a la pregunta hoy, él
simplemente dijo esto: que los alimentos que están vivos y vienen de la vida de
la Tierra, le dan vida a tu cuerpo, y la comida que está muerta creará muerte
en tu cuerpo, por lo tanto, come alimentos que traigan vida a tu cuerpo. Y es
bastante directo, cuanto más podamos acercar el alimento a su fuente natural,
más enzimas, más vivas, la fuerza de vida, por así decirlo. Hay un componente
pránico en la comida; la comida real. es muy diferente de los alimentos que
tienen en los almacenes, que nunca vieron la luz del día, han sido completamente
creados dentro de una máquina y procesados. ¿Llenarán tu estómago para no tener
hambre? Bueno, la respuesta es sí. ¿Están dándote los nutrientes que dan vida a
tu cuerpo? Eso es cuestionable; depende de cuáles sean.
Entonces creo que la comida es importante. Y al
mismo tiempo, Alex, creo que es importante cuando no queremos darle nuestro
poder a la comida, porque somos más que esa comida. Es el sentimiento que
tenemos, el miedo a lo que comemos, o el amor por lo que comemos. Algo muy
interesante sucede cuando empiezas a pensar sobre las cosas de que estamos
hablando, desde esta perspectiva. Creo que probablemente el mayor nivel de
maestría que nos piden o nos invitan a lograr en esta vida es proteger y
preservar el don de nuestros cuerpos, el don de nuestra humanidad, que nos
conducen a darlo por sentado, y llevó a descontarlo. A la gente joven se le
enseña que en realidad somos una especie defectuosa, que necesitamos
tecnología, que necesitamos la inteligencia artificial y chips de computadora
en nuestros cerebros y químicos en nuestra piel. Eso les enseñan a nuestros
jóvenes. Entonces creo que al abrazar la profunda verdad de lo que significa
ser humano, y el don de lo que significa la humanidad, y todas las formas en que
la ciencia apoya eso, empiezan a suceder cosas realmente interesantes. Y una de
esas cosas es que los alimentos que solían atraernos, puede que ya no nos
atraigan más, porque ya no saben igual, al saber que no son buenos para
nosotros. Y no es un esfuerzo; es una consecuencia natural de abrazar un
respeto más profundo por el don de la vida y el don del cuerpo.
Y digo eso intencionalmente, es un don, porque la
ciencia nos dijo muy claramente que no somos el producto de la idea de la
evolución de Darwin; la evolución, como geólogo, licenciado en geología, yo
creo en la evolución, la he visto en el registro de los fósiles, cuando estaba
estudiando, recuperamos procesos evolutivos en restos fósiles de plantas,
animales, e insectos. Pero la teoría se viene abajo cuando se trata de nosotros
los humanos. Porque algo sucedió 200.000 años atrás. Y hubo no solo una, sino una
serie de mutaciones que no ocurrieron lenta y gradualmente a lo largo de un
período de tiempo prolongado. Ocurrieron en un período muy comprimido de
tiempo, y son mutaciones vitales que nos dieron nuestra humanidad.
Hemos hablado de esto en algunos de tus programas
anteriores, que tal vez no han visto nuestros espectadores. Pero el cromosoma
2, el ejemplo perfecto, es producto de la fusión completa de dos cromosomas
preexistentes intactos, juntos y luego atravesando, agregando, o eliminando o
silenciando genes para estabilizar esa fusión.
Y tú dirás, “Ok, ¿cuál es el gran tema con el
cromosoma 2?” Bueno, es el responsable de nuestro neocórtex. Alrededor del 80%
del neocórtex; de allí provienen nuestras neuronas espejo. De allí viene
nuestra capacidad de sintonizarnos con este campo de divinidad. El cromosoma 7
nos da un lenguaje complejo, la razón para que podamos cantar y sostener una
conversación. En tanto un chimpancé que solo está separado de nosotros por un
2% del ADN, - compartimos 98% del ADN con el chimpancé – 2% es la diferencia.
Nunca oiré a un chimpancé cantando Led Zeppelin, Escalera al Cielo (se ríen
los dos) No lo creo. Si lo oyes, quiero saberlo.
Alex: Absolutamente. Y el libro, ese libro.
Gregg: Sí, me encantaría verlo. Pero estos tipos de
mutaciones, los científicos nos dicen que no pueden suceder en condiciones
naturales. Como científico, tengo que decir que hubo algún tipo de
intervención. No puedo decir con certeza científica quién o qué; la arqueología
nos cuenta la historia, ya sea que hable de los sumerios, o los navajos o los
aborígenes, o los incas, o los cristianos, o las tradiciones islámicas, todos
cuentan una historia de cómo ocurrió. Ninguno de ellos dice que sea un producto
de un cambio lento y gradual durante un largo período de tiempo. Todos dicen
que hubo algún tipo de intervención. Eso no es científico. Lo científico es que
estas mutaciones existen, y ahora podemos identificarlas. Los científicos dicen
que cuando las probabilidades de que algo suceda están en 10 elevado a la 400,
(10 con 400 ceros), cuando las probabilidades son esas, eso es algo imposible.
Entonces, si tienes un billete de lotería, te dicen
que las probabilidades de ganar son 10 elevado a 400, podrías, sabes, olvidar
el asunto. Los científicos dicen que las probabilidades de que ocurran estas
mutaciones son de 10 elevado a 600. Entonces, si 10 a la 400 es imposible, 10 a
600 significa que es más que imposible que sean de procesos naturales. Hay
algún tipo de intervención. Fuimos modificados hace 200.000 años. Solo hemos
estado aquí durante 10.000 generaciones. Realmente no es tanto tiempo. Diez mil
generaciones; se calcula que estadísticamente una generación es 20 años, lo
consideran una generación para la reproducción. Entonces hemos estado aquí por
10.000 generaciones, y se nos dio el don de este cuerpo a través de esas
mutaciones, para que podamos acceder y refinar nuestra relación con estos
divinos, lo que llamamos principios divinos que nos dan nuestra humanidad.
Entrevista
a Gregg Braden 2024 por Alex Ferrari en "Next Level Soul".
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