Queridos amigos, yo soy María, la madre de Jeshua en la Tierra. Es tal la alegría de estar entre ustedes, de estar en vuestro círculo de Luz. Esta mañana quiero celebrar con ustedes y envolverlos en un manto de amor suave, muy ligero y dulce – siéntanlo.
Vuestros corazones están necesitando Luz. Para todos ustedes es difícil estar en este lugar. Vuestro estado natural del ser es la alegría, el entusiasmo, la creatividad. Con frecuencia ustedes se sienten sofocados por las pesadas energías de la Tierra y se sienten desconectados del Hogar.
Hoy
yo quiero traerles las energías del Hogar, de la fuente original. Entonces
respírenlo y recuerden quiénes son. Yo quiero que se bañen en la luz de vuestra
alma y en la conexión entre nuestras almas.
Imaginen que la Luz de la reconexión y de la unidad está fluyendo a través de todo vuestro cuerpo. Asegúrense de que este flujo visite cada parte de vuestro cuerpo, especialmente las partes que necesitan sanación. Déjenlo fluir hasta abajo hasta vuestros pies. Ahora hay un halo de Luz alrededor de todos nosotros. Sientan cómo se pueden relajar y estén a salvo dentro de este halo de Luz, aunque puedan sentir que algunas de vuestras partes se sienten cansadas y pesadas. Eso está bien – permitan que todo sea como es.
Todos ustedes llevan una Luz muy preciosa en vuestra alma. Cuando están conectados con esta Luz ustedes se sienten uno con el universo. Ésta es la experiencia divina que están buscando. Cuando ustedes comienzan su viaje como un alma joven aún no son conscientes de esta Luz interior, entonces la buscan fuera de ustedes, en el mundo externo. Realmente son como un niño en busca de orientación, pero vuestra verdadera misión es encontrar adentro esa orientación, y hacer esto realmente se convierte en el nacimiento de vuestra Divinidad.
La mayoría de las almas pasan muchas vidas a través de las edades tratando de encontrar Luz fuera de ellas mismas, y ésa es una parte del crecimiento. Pero ustedes ahora se están volviendo un alma madura. Son conscientes de la necesidad de ir hacia adentro porque han intentado todas las otras formas. Ustedes han intentado encontrar la Luz ganando posesiones o poder mundano. Han tratado de encontrar la Luz creando un gran ego y obteniendo reconocimiento del mundo. Y han tratado de encontrar Luz perdiéndose a sí mismos en relaciones amorosas; tratando de fundirse con la otra alma. Realmente éstas son las etapas por las que pasa cada alma en su viaje evolutivo.
Pero en un cierto punto el alma descubre que aquellas cosas no funcionan, y entonces el alma atraviesa una profunda crisis. A medida que va madurando descubre profundas emociones de soledad, de separación y de miedo, y hay una conciencia cada vez mayor de que nada fuera de sí misma puede llenar el vacío. Esta etapa del viaje de un alma puede ser llamada “la noche oscura del alma”. El alma ya no se puede perder más a sí misma en nada externo, y sin embargo no sabe cómo nutrirse, cómo ir hacia adentro. Aquí es cuando la soledad puede golpearlos del modo más duro, y cuando ustedes están en este punto, como a menudo sucede en las relaciones, se dan cuenta de que no pueden encontrar fuera de ustedes mismos lo que realmente están buscando. Entonces no queda otro camino que seguir más que el que conduce a vuestro corazón.
Ustedes son la única persona que puede reconocer y por lo tanto encender vuestro propio fuego, y a menudo se preguntan: “¿Cómo lo hago?” Ésa es vuestra pregunta perpetua: “¿Cómo me vuelvo iluminado; cómo me ilumino?” Y la respuesta es que no son ustedes quienes lo están haciendo. El “tú” que ha estado buscando, quien se ha sentido sólo, quien se desespera, no es el que se está volviendo iluminado. Esencialmente, la iluminación ocurre cuando ustedes renuncian a la parte de “tú” de ustedes soltándola. Ustedes caen completamente de rodillas dentro de ustedes mismos y renuncian. Vuestro ego se inclina, porque reconoce el hecho de que no conoce la salida – no tiene las respuestas. Por lo tanto, no saber las respuestas y estar en la “noche oscura del alma” a menudo es el anuncio de la iluminación. Es cuando renuncian que ustedes se abren a algo nuevo, algo que no son capaces de controlar. Este “algo” – la energía de vuestra alma – ha estado golpeando vuestra puerta por mucho tiempo.
En verdad, ustedes le han temido a vuestra propia Luz y Amor divino porque desde una perspectiva humana ustedes no lo pueden controlar, y entonces se han resistido a vuestra propia Luz y fuente de alegría. Para nosotros es muy paradójico ver esto desde nuestro lado, ¡porque la cosa más preciosa que buscan ya está presente dentro de vuestra alma! Y en esto yace la respuesta a vuestras emociones de soledad y de desesperación.
Cuando dejan de tratar de cambiarse a ustedes mismos, cuando dejan de intentar hacer que vuestra vida “funcione”, se abren a una fuerza mayor que quiere llevarlos con ligereza y alegría. Una vez que están en este flujo de ligereza, se conectarán con otros que están en el mismo flujo y vuestro corazón se llenará de alegría. Encontrarse con vuestra familia espiritual en la Tierra será para ustedes una de las fuentes más profundas de felicidad y de satisfacción. Pero antes de que esto suceda ustedes tienen que soltar. Tienen que encomendarse al flujo de vuestro corazón. No traten de manipular y controlar tanto la vida. La vida se vuelve mucho más fácil y liviana cuando la viven desde el corazón.
El paso más difícil es reconocer que ustedes no conocen el camino. Cada ego humano contiene orgullo, el cual a menudo los cierra al flujo del amor, así que ustedes tienen que soltar vuestro orgullo. Esto es lo que ustedes hacen cuando se conectan con el niño herido y vulnerable dentro de ustedes mismos, y hacer eso es algo profundamente espiritual. Al reconocer el núcleo de vuestra vulnerabilidad, en realidad se están acercando a otras personas. Al tomar consciencia de vuestro propio niño interior herido también lo están viendo en los ojos de otras personas. Abrazar vuestra propia oscuridad, vuestra propia vulnerabilidad, realmente construye un puente entre ustedes y las demás personas. Naturalmente crea compasión y comprensión en vuestro corazón.
Cuando ustedes están dentro del ego tienden a juzgar y a criticar a las demás personas. Necesitan hacer esto para mantener vuestra identidad. Pero cuando los miran con ojos que ven su niño interior, ustedes reconocen que ellos son seres humanos heridos, al igual que ustedes, y así es más fácil llegar a ellos. Y también pasa a ser más fácil recibir apoyo y amor de otros seres humanos. Esto es lo que significa crear un círculo de Luz; reconocer vuestra vulnerabilidad, soltar la necesidad de control, y soltar vuestro orgullo. Para el ego esto parece ser un precio muy alto a pagar, pero en realidad es pequeño comparado con la soledad y la desesperación que ustedes tienen que sufrir cuando están aferrados al ego.
En estos tiempos muchas personas están anhelando conectarse desde el corazón. Mi mensaje está dirigido especialmente a las personas que están dispuestas a dar el salto: a dejar de lado sus juzgamientos, su crítica – sobre todo de sí mismas. Ustedes han construido una prisión alrededor de ustedes, y yo los estoy invitando a salir de ella. Pueden hacerlo ahora, están listos. Todo lo que tienen que hacer es simplemente pedir. No tienen que luchar o pelear para salir de la prisión. Simplemente tienen que pedirle al Espíritu, o como sea que le llamen a la fuente infinita del universo. O pueden hacerlo a través de la oración: “Libérame, quiero estar en el Hogar otra vez”.
El Hogar está dentro de todos ustedes, y cuando abran las puertas de vuestro corazón ¡la Luz brillará tan intensamente! Vuestra Luz le dará alegría a los demás y con alegría ustedes se conectarán con otras personas, pero también estarán en paz cuando estén solos. No necesitarán de otras personas para sentirse satisfechos, sino que encontrarse con ellos será una experiencia de enriquecimiento y de abundancia, especialmente las almas compañeras.
Quisiera terminar pidiéndoles que imaginen que hoy estamos plantando una semilla. Véanla como una pequeña semilla de Luz que cada uno de ustedes está sosteniendo. Imaginen que están poniendo esa semilla dentro de la Tierra y lo desean bien con el corazón. Ustedes encomiendan este rayo de Luz a la Tierra, y luego lo sueltan. Ustedes liberan todo el control, o deseo de manipular o de saber. Tan sólo vean lo que sucede. Algún día la Tierra les devolverá esta energía en la forma de un pequeño milagro que entre a vuestra vida. Ustedes se preguntarán: “¿Por qué me pasa esto?” Y tal vez quieran preguntarle a un psíquico o médium acerca de eso, y yo les diría: “No lo analicen con vuestra cabeza, tan sólo reciban el regalo que el universo les da”.
Entonces ahora disfrutemos por un momento el halo de Luz que aún está rodeándonos y se ha ampliado ahora. La Luz, en este instante, es cálida y dorada. Por favor sepan que siempre están conectados a vuestra familia del alma. Nosotros desde el otro lado siempre estamos a vuestro lado. Acepten nuestro amor.
Octubre 2013,
Traducción del inglés por Sandra Gusella.
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