A lo largo del tiempo, el significado de los símbolos de cada idioma ha ido cambiando y adaptándose a las necesidades, inteligencias y curiosidades de las personas de cada cultura. No obstante, determinadas palabras se modificaron intencionadamente o tenían un poder especial y se prohibieron.
Hace mucho tiempo, la habilidad de identificar y nombrar los misterios y las fuerzas de la vida en el seno de la naturaleza fue reconocida como un acto de poder por ejercer una influencia sobre las propiedades mágicas de aquellas fuerzas.
La naturaleza fue reconocida como el campo de
manifestación de las leyes espirituales y cósmicas, así como de las fuerzas
dentro de una particular dimensión, lo que permitió que la conciencia pudiera
explorar la realidad desde este particular punto de vista.
En todas las formas de conciencia existe un
innato sentido de la curiosidad y las gentes de la antigüedad intentaron
entender la relación entre todas estas leyes y fuerzas. Buscaron el
conocimiento para que les ayudase en la utilización de las propiedades místicas
de la naturaleza y de la atmósfera (influenciar y jugar en el vasto campo de la
existencia). Escribir es una forma de magia que en algún momento fue aceptada y
desarrollada como método para modificar la realidad. Con
el arte de la escritura, determinadas líneas y rúbricas utilizan un código
específico de dos dimensiones (un alfabeto) y las palabras que se forman
consiguen literalmente algo partiendo de la nada porque el acto físico de
escribir crea y dirige energía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario