Supongamos entonces que sospechan de alguien y lo calumnian: se unen a su naturaleza inferior, reciben sus corrientes y comienzan a manifestar los defectos y las debilidades que no han parado de señalar en él. ¿Por qué? Porque al unirse sin cesar a estas energías inferiores, han abierto en ustedes mismos una puerta para recibirlas. De esta forma, retrasan su evolución. Si solo tienen en la cabeza los vicios y los crímenes de los humanos, atraen todas las malas entidades que están en ellos, y no se sorprendan si un día se sienten invadidos. Es un fenómeno mágico, así de sencillo.
Omraam Mikhaël Aïvanhov
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