Por José L. Stevens
"Ten miedo. Ten mucho
miedo". Quizás hayas visto esta frase en referencia a artículos periodísticos
que hablan sobre varios aspectos de lo que está sucediendo en el mundo de
hoy. Dondequiera que lo leas, es una idiotez absoluta, una ignorancia
total, y debe ser expulsado inmediatamente de tus pensamientos. El miedo
está muy sobrevalorado y no sólo se lo considera inevitable y necesario para
los humanos, sino que es extremadamente malo para ti.
No tienes que tener miedo para evitar
quemarte en un incendio. No tienes que tener miedo de huir de un Tsunami o
de una inundación. No tienes que tener miedo de confrontar o escapar de un
asaltante o de un violador. No debes tener miedo cuando te encuentres
cerca de una zona de batalla o de un sitio de desastre. Tu mente creará
todo tipo de argumentos para negar estos puntos, pero al final son simplemente
verdaderos. Cada ser humano es lo suficientemente poderoso como para
elevar su frecuencia y transformar cualquier situación en la que se encuentren
en un resultado más positivo si tan sólo lo supieran. No existen
accidentes ni situaciones aterradoras si no eliges estar aterrorizado. Por
supuesto, esto requiere práctica y algunas habilidades para lograrlo, pero se
puede lograr. El problema es que a las personas de todo el mundo se les ha
enseñado que el terror es inevitable y que sólo hay dos reacciones, pelear o
huir acompañadas de un gran temor.
¿Alguna vez has examinado cuidadosamente tu
experiencia de miedo? ¿Qué descubriste al respecto? ¿Qué
aprendiste? Si no lo has examinado, ¿cómo es posible que hayas tenido una
experiencia tan aterradora que haya alterado tu vida y no la hayas estudiado
para aprender de ella? Desafortunadamente, el miedo es casi nuestro
compañero constante, aunque a menudo no es obvio porque le gusta disfrazarse de
otros sentimientos y reacciones. Puedes rastrear el miedo hasta toda ira,
toda codicia, toda autodestrucción, toda impaciencia, toda falta de autoestima,
todo narcisismo y juicio a los demás, toda resignación y cinismo, y toda
resistencia a los demás. Lo que hace que el miedo sea tan pernicioso, tan
espantoso, es que siempre engendra más de sí mismo. Crece como un cáncer,
de modo que cuanto más miedo tengas, más miedo tendrás.El resultado final de
dejar que el miedo corra desenfrenado es que, si lo haces, terminarás
totalmente paranoico.
El miedo también es bastante contagioso, al
igual que la cepa de virus más virulenta. Se puede propagar a los demás
rápida y fácilmente hasta que toda la situación se vea fea y horrible, si te
permites verla de esa manera. No tiene que ser asi. Incluso los
eventos históricos que parecen extremadamente desagradables pueden ser vistos
con cierta neutralidad y compasión para que se sanen gradualmente con el
tiempo. Negar, olvidar o pasar por alto estos eventos, como el 11 de
septiembre o el holocausto, no es útil. Enfrentar directamente el evento
con amor y compasión en el corazón puede hacer maravillas curativas. El
trastorno de estrés postraumático se perpetúa cuando nos resistimos a recordar
o nos negamos a abordar la situación. Revivirlo y experimentar impotencia
y horror tampoco es la respuesta. Eso sólo lo refuerza.
Considera muchos pensamientos comunes que
podríamos tener durante el día o la noche. Digamos que estamos en un lugar
público y notamos a una persona hermosa, hombre o mujer. Al principio,
podemos apreciarlo, pero pronto podría haber otros pensamientos como:
"Ojalá pudiera ser hermoso o guapo también, y luego tendría un gran éxito
o podría tener a quien quisiera. Las personas hermosas siempre terminan
con toda la atención, el dinero y el éxito en la vida. Me gustaría poder
tener una relación con una persona tan hermosa, pero no soy lo suficientemente
atractivo. Probablemente esa sea la razón por la que estoy solo”. Tal vez
sintamos una picazón, nos vamos a rascar y sentimos un bulto en la
piel. "Maldita sea, espero que esto no sea cáncer de piel. María
tuvo un bulto como este y resultó ser canceroso y la mató ". Entiendes la
idea. Prácticamente cualquier pensamiento puede convertirse en un
pensamiento temeroso que nos ocupe y nos hipnotice durante períodos de tiempo. Estos
pensamientos tienden a regresar periódicamente para que nos obsesionemos.
El miedo es el producto de sentirse separado
y esto sólo puede ocurrir en un mundo dualista en el que puedes identificarte
como estando separado y siendo diferente de alguna otra cosa. En esta brecha,
el miedo puede originarse, generarse, crecer y propagarse. El miedo no
puede ser concebido en un universo en el que todo está conectado, cada uno con
el otro. Nuestro mundo parece ser un mundo dual en donde la separación es
una realidad, pero eso es sólo en nuestra percepción, en nuestras
mentes. Hay algunos pocos seres humanos que no experimentan tal separación
ni divorcio de todo lo que experimentan. Son los pocos iluminados, a los
que los budistas llaman los Preciosos o los Despiertos. La mayoría de
nosotros los descartamos porque la idea es tan extraña, tan imposible, tan loca
para nosotros. De hecho, lo rechazamos totalmente porque nos
amenaza. Amenaza nuestra identidad única, la que experimentamos como
"yo" diferente ti y de ellos. Si dejamos de lado nuestro sentido
del yo como separado, ¿quiénes y qué somos entonces? Es como si fuéramos a
ser asimilados a algo que significa nuestra muerte, eliminación, terminación,
aniquilación total, aunque los despertados dicen que no es así en absoluto. Aunque
el ego puede estar disuelto, todavía hay una sensación muy real de ser soberano
y de estar vivo, más despierto que nunca. Pero no queremos creer
esto. Simplemente es demasiado amenazador, demasiado aterrador para dejar
ir nuestro sentido único de identidad, aunque sea la causa de todo nuestro
sufrimiento y, por supuesto, del miedo.
Hay una variedad de ejercicios que pueden
ayudarte a examinar tus sentimientos de miedo para descubrir de qué se tratan
realmente. Por ejemplo, puedes tomar deliberadamente algo que te parezca
temeroso y explorarlo. Digamos que tienes miedo de las ratas. Te
imaginas una rata corriendo por el pasillo en tu casa. Se dirige directo a
ti. Exactamente ¿cuál es tu experiencia? ¿Cuáles son tus sensaciones,
pensamientos y sentimientos? ¿Una fuerte inhalación? ¿Un sentido de
enfoque reducido en la rata? ¿Una sensación de parálisis? ¿Aguantando
tu respiración? ¿Una reacción de querer huir, de alejarte lo más lejos y
lo más rápido posible? ¿Buscas un palo o algo que puedas usar como arma
para combatirla?
Digamos que te quedas con tu miedo. La
rata se acerca. Quizás empiece a subir por tu pierna, subiendo el puño de
tus pantalones o levantando tu vestido. Tal vez tenga pequeños dientes
afilados y los hunda en tu pierna, inyectándote una enfermedad
mortal. "Oh Dios mío, me está matando". Recuerda que todo esto
está sucediendo sólo en tu cabeza. En realidad no hay nada que te
amenace. ¿Qué es este extraño fenómeno de que estás absolutamente bien y,
sin embargo, no lo estás? Estás sufriendo de miedo, quizás de terror o de
horror, y sin embargo, nada te está sucediendo. Aunque no lo creas, en
realidad estás a cargo de tu experiencia, sí, incluso de la fuente de tu
experiencia. ¿Cómo puede ser que puedas aterrorizarte a ti mismo tan
efectivamente?
Si la rata no te funciona, entonces prueba
con una araña enorme o una serpiente. Esas son las tres cosas que
aterrorizan a la mayoría de las personas. Si ninguna de ellos lo hace,
estoy seguro de que puedes encontrar otra cosa que logre el mismo efecto. Examinar
tus miedos de esta manera puede enseñarte mucho sobre ti mismo. ¿Dónde
comenzó todo esto? ¿Cómo ganó tal poder sobre ti?
Casi todos los seres humanos tienen fobias y
temores almacenados en sus mentes subconscientes. ¿De dónde vienen estos
recuerdos? Una explicación es que provienen de vidas pasadas, cuando se
almacenaron en el centro instintivo o primer chakra, el cual está muy
involucrado en la supervivencia del cuerpo durante cada vida. Con cada
experiencia temerosa que amenaza la vida, los recuerdos se almacenan en el
centro instintivo para futuras referencias en caso de que uno se encuentre con
una situación similar. Entonces sabrán cómo evitarlo. El centro
instintivo reacciona ante cualquier cosa que se parezca a algo que mató o hirió
a la persona en alguna situación de una vida pasada. Por eso se dice que
las almas más viejas son difíciles de matar, mientras que las almas más jóvenes
mueren más fácilmente por falta de experiencia. Las fobias son el
resultado de recuerdos que están atados con mucho miedo; sin embargo, los
recuerdos de eventos amenazantes no tienen que contener miedo. Aunque
algunas almas más viejas pueden llevar millones de recuerdos de este tipo, no
son necesariamente fóbicas. El miedo asociado con algunos recuerdos es lo
que hace que una persona sea fóbica.
Alex Honnold es un escalador libre, conocido
por sus subidas libres a muchas rutas extremadamente difíciles, incluyendo a
“El Capitán” en el Parque Nacional de Yosemite. Un escalador libre no usa
cuerdas u los otros equipos de escalada que otros escaladores utilizan para
ascender los picos. Sólo usan sus manos y pies para encontrar sostenes y
agarres. No hay cuerda para evitar que se caigan. Alex dice que ha
sentido miedo varias veces en su vida, pero nunca durante la escalada
libre. ¿Cómo es esto humanamente posible? Para entender esto tenemos
que considerar la amígdala.
La amígdala es una glándula del tamaño
de una arveja en el punto izquierdo del hipocampo, el cual tiene forma de
herradura, en la parte central del cerebro. No es exactamente una
herradura porque los extremos posteriores se curvan para formar un punto por
encima de ella. Puedes buscarlo en línea en las imágenes de Google y ver
muchos ejemplos. Esta estructura cerebral de aspecto extraño yace
horizontal con sus dos puntos apuntando hacia el lóbulo frontal, detrás de los
ojos, de modo que la amígdala está detrás del ojo izquierdo. La amígdala
se sienta en la parte central del cerebro, cerca de las glándulas pituitaria,
pineal y tálamo.
El hipocampo está a cargo de muchas cosas,
incluida la memoria a corto y largo plazo. La amígdala está a cargo de las
reacciones de lucha o huida en las llamadas situaciones de
emergencia. Entonces, si un perro grande y vicioso te ataca, tu amígdala
se activará para proporcionarte la adrenalina para combatirla o huir de
ella. Las tomografías del cerebro de Alex Honnold no muestran casi ninguna
actividad cuando se imagina escalar o está involucrado en esa
actividad. Casi no tiene respuesta de lucha o huida. No hay una
explicación médica para este fenómeno bastante raro. El mundo médico no
puede explicar por qué Alex es diferente de los demás en este
sentido. Para comprender esto es posible que tengamos que buscar en otra
parte, por ejemplo la comprensión chamánica o el conocimiento
esotérico. Alex Honnold es claramente un alma vieja. Él vive muy
simplemente en un autobús y se la pasa viajando y escalando; sin embargo tiene
una organización sin fines de lucro a la que regala sumas considerables de
dinero, una tercera parte de sus ingresos, para llevar energía solar a
comunidades empobrecidas.
Las almas más viejas son conocidas por
dominar su miedo. Han vivido suficientes vidas como para ya no tener un
gran miedo a la muerte. Curiosamente, hay personas indígenas que son
conocidas por sus hazañas escalando acantilados imposibles sin cuerdas ni
equipo alguno. Los Huicholes del centro de México son una de esas personas
de orientación chamánica cuyos chamanes son conocidos por estas
hazañas. Han revelado que son capaces de hacer esto utilizando pequeñas
fibras que emanan de su plexo solar para escalar caras acantiladas. Los
Hindúes y los Budistas Tibetanos hacen referencia a tales fibras o canales de
energía a los que llaman nadis, de los que dicen que cada humano tiene setenta
y dos mil en sus cuerpos. Sin embargo, es la inusual persona avanzada la
que ha desarrollado la capacidad de controlar estos canales o flujos de energía
para actividades externas.Generalmente se refieren a estos poderes como
“siddhis” y generalmente sólo las almas muy antiguas los exhiben.
Que yo sepa, Alex Honnold nunca ha mencionado
estas habilidades a la prensa, pero es bastante fácil hacer las conexiones
aquí. Claramente, es un alma mayor que ha dominado la mayoría de sus
miedos y muestra al mundo sus habilidades, que luego atraen la atención a sus
actividades respetuosas con el medio ambiente. Esta es típicamente la
forma en que las almas viejas hacen las cosas. Según tengo entendido, es
un ser humano bastante tímido y humilde con habilidades extraordinarias. Recientemente
se ha lanzado un documental muy exitoso de sus capacidades de escalada. Si
quieres experimentar tu propia amígdala en funcionamiento, mira el documental.
Mientras tanto, considera que potencialmente
puedes transformar cualquier experiencia en una intrépida. Esto no
significa que harás estupideces o arriesgarás tu vida innecesariamente. No
eres estúpido. No tienes que tener miedo por evitar pararte frente a un
auto en marcha. Sólo sabes que no debes hacerlo a menos que deliberadamente
quieras matarte. Si estás atento, mirarás a ambos lados antes de cruzar la
calle. Si eres consciente no correrás riesgos innecesarios. Muchas
personas sufren lesiones y mueren porque no son conscientes. Practica con
atención plena y es probable que tengas menos miedo y vivas mucho más tiempo.
Traducción:
Marcela Borean
Difusión: El Manantial del Caduceo
http://www.manantialcaduceo.com.ar/libros.htm
Difusión: El Manantial del Caduceo
http://www.manantialcaduceo.com.ar/libros.htm
No hay comentarios:
Publicar un comentario