A partir de hora hasta el final de Julio 2025, estaremos viviendo la cuadratura entre Júpiter y Saturno, es la primera, o sea una cuadratura creciente de este nuevo ciclo de conjunciones entre Júpiter y Saturno en signos de Aire. A pesar que estos dos gigantes de gas, los dos más grandes de nuestro sistema solar, se cruzan formando una conjunción cada 20 años, la última fue en diciembre 2020 a 0º Acuario y la anterior a ésta fue el 28 de mayo del 2000 en el signo de Tauro, por esos increíbles misterios del Orden Planetario, estas conjunciones se repiten en el mismo elemento cada 200 años. Por tanto esta conjunción en Acuario de Diciembre 2020, comenzó un nuevo ciclo de conjunciones en el elemento Aire por los próximo 200 años con una
excepción en el 2159 que será en Escorpio, concluyendo así un ciclo de 200 años de conjunciones en el elemento Tierra, que comenzó en 1802 en el signo de Virgo, (excepto una vez que se alinearon en Libra en 1981), todos sus encuentros desde entonces han sido en signos de Tierra. El ciclo completo de conjunciones entre Júpiter y Saturno a través del Zodíaco completo es de 800 años. La primera conjunción del último ciclo en Aire, comenzó también con una conjunción en Acuario en 1226 y la última conjunción de estos dos planetas en Acuario (como en el 2020) ocurrió el 7 de Enero de 1405. por tanto ahora tendremos conjunciones en signos de Aires hasta el 2219 cuando comenzarán un ciclo en Agua en el signo de Escorpio.Para que quede
más claro, estos dos gigantes que son Padre e hijo en la Mitología Griega se
alinean cada 20 años y lo han estado haciendo en los principios de décadas
1940, 1960, 1080, 2000 y 2020. Se repiten dentro del mismo elemento cada 200
años y recorren todo el zodíaco en casi 800 años.
Esta es la
cuadratura Júpiter-Saturno creciente, es decir el primer ángulo recto que estos
planetas forman desde la Gran
Conjunción que
ocurrió el 20 de Diciembre 2020.
El ciclo
completo de 20 años que estamos transitando ahora ocurrirá así:
Cuadratura
creciente : 19 de Agosto 2024 a 17º27′ con Júpiter en Géminis y Saturno en
Piscis
25 de Diciembre
2024 a 14º con Júpiter en Géminis y Saturno en Piscis,
16 de Junio 2025
con Júpiter a 1º Cáncer y Saturno a 1º de Aries
La oposición: 22
diciembre 2029 con Júpiter a 18º de Escorpio y Saturno a 18º Leo ,
2 de Agosto 2031
con Júpiter a 19ºSagitario 27′ y Saturno 19º Géminis 27′
7 de Octubre
2031 con Júpiter a 23º Sagitario y Saturno 23º Géminis
Cuadratura
menguante: 26 de Abril 2035 con Júpiter 29ºAries 03′ y Saturno 23º Cáncer 03′
22 de Octubre
2035 con Júpiter 17º Tauro 50′ y Saturno 17º Leo 50′
22 de Febrero
2036 Júpiter 14º Tauro 27′ y Saturno 14º Leo 27′
La segunda
conjunción y ciclo de 20 años de este ciclo en Aire de 200 años será el 2 de
Noviembre 2040 a 18º Libra 06′.
Estos dos
planetas entrelazados arquetipal y mitológicamente, son Padre e Hijo, y
representan la rebelión de las nuevas generaciones en contra del orden impuesto
por las anteriores. Este nuevo ciclo de 20 años que comenzó en Diciembre 2020,
llega a su primer prueba, su primera oportunidad de verificar que lo que
comenzó al final del 2020, va en el camino correcto. Estos dos enormes dioses y
planetas son los dos últimos que vemos sin necesidad de tecnología, es decir,
nos marcan los confines de nuestras limitaciones humanas. REpresentan nuestras
leyes, instituciones, disposiciones sociales y culturales. Ambos lo hacen de
manera muy diferente, Júpiter con entusiasmo y grandes ideales y sobre todo con
gran optimismo y Saturno marcando límites, con leyes, multas, impuestos, etc.
Uno expande (Júpiter), el otro contrae (Saturno).
Ambos
representan el eterno juego humano de expandirnos y encontrar una y otra vez,
nuestras limitaciones. El juego consiste en seguir ese impulso humano de cruzar
fronteras, de empujar los límites de lo posible, para siempre toparnos con las
limitaciones de nuestra educación, capacidades físicas e intelectuales, como
también de las leyes impuestas por nosotros mismos en un afán de mantener el
orden. Uno sin el otro sería un imbalance difícil de sobrevivir. Sin el impulso
de Júpiter que nos promete el encuentro con lo extraordinario, viviríamos una
vida de esclavos del orden sin posibilidad de creatividad, sin Saturno poniendo
las limitaciones, nos meteríamos en unos líos de vanidad y ego desorbitados que
no podríamos manejar. La danza entre estos dos gigantes describen la naturaleza
humana y nuestra organización social. Saturno nos conecta con nuestro legado
ancestral en esta encarnación y Júpiter el espíritu que quiere liberarse de
ello. Saturno nos recuerda que todos moriremos y Júpiter nos dice que nuestro
espíritu sobrevivirá la muerte física.
En esta primera
cuadratura o ángulo de 90 grados que forman estos dos grandes dioses, desde el
principio de este ciclo de 20 años que comenzó en el crepúsculo del 2020, en
Acuario, nos encontramos ante las disyuntiva de luchar, seguir con lo iniciado
o tirar la toalla, ante la realidad de las limitaciones encontradas. Júpiter le
habla a nuestra naturaleza más indómita, a los pedidos del alma y Saturno nos
recuerda las limitaciones de nuestra humanidad, la futilidad de querer ser más
que humanos. En esas magníficas coincidencias cósmicas, las Olimpíadas de Paris
ocurren justo para cuando comienza esta cuadratura, perfecto ejemplo de esta
esta lucha humana. Cada uno de esos atletas, son la viva representación de la
danza entre el espíritu humano de ir más allá, de sobrepasar los límites de lo
posible y la frustración en muchos casos de las limitaciones de sus cuerpos. El
espíritu olímpico es la perfecta expresión de Júpiter, Dios absoluto del
Olimpo.
El 19 de agosto
de 2024, Júpiter (a 17° de Géminis) estará en cuadratura exacta con Saturno (a
17° de Piscis). Las cuadraturas en signos mutables son algo más fáciles (si es
que algo así es posible), ya que la mutabilidad nos trae adaptabilidad y nos
cuesta menos aceptar los cambios. La cuadratura ahora es entre Agua y Aire.
Entre lo mental y lo emocional. Donde tengas Géminis (Aire) y Piscis (Agua) en
tu carta natal, es donde te encuentras con la tensión entre seguir la lógica o
confiar en tu intuición. Estos dos duales signos son extremadamente diferentes,
pero ambos nos confrontan con esta dualidad interna que todos tenemos. Uno
desde lo mental (Géminis) y el otro desde las emociones (Piscis). Nuestra parte
Júpiter nos trae las magníficas oportunidades de vivir la experiencia del
espíritu en su expresión más elevada, sin límites y se siente más como destino
y Saturno nos confronta con la necesidad de planear, de tomar responsabilidad,
por tanto lo sentimos más cerca de lo humano, más en contacto con las limitaciones
de estar encarnado.
La cuadratura es
un aspecto que nos pide acción, y la acción aquí es decidir entre lo que deseas
que sea y lo que es posible. La realidad de lo que realmente puedes hacer y lo
que te gustaría hacer. La respuesta no es acerca de quien gana, sino de encontrar
el balance entre estas dos cosas, sin traicionar a ninguna de estas voces que
traen estructura e inspiración a nuestras vidas. La cuadratura nos ofrece la
oportunidad de encontrar un puente entre nuestros ideales y la realidad de
nuestra vida.
La cuadratura se
forma exacta el 19 de Agosto justo para la Luna Llena en Acuario, pero sobre
ello escribiré más tarde.
No pierdas las
oportunidades que nos ofrecen estos dos dioses, deja que tu espíritu camine de
la mano de tus posibilidades en un trayecto armonioso con los mandatos del
Cielo. Como dice el Padre Nuestro: «Hágase Tu voluntad así en la Tierra como en
el Cielo»
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Para lecturas
privadas y la comprensión más profunda de lo que esta cuadratura se trae a tu
vida: https://www.astrologiaarquetipica.com/lecturas-privadas/
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