Iniciación Humana y Solar, pág. 25
El Sonido, que fue
el primer indicio de la actividad del Logos planetario, no es una palabra, sino
un sonido pleno y reverberante que contiene en sí todos los demás sonidos,
todos los acordes y ciertos tonos musicales (a los que se les ha dado el nombre
de «música de las esferas») y disonancias, aún desconocidos para el oído
moderno. Es este Sonido el que el «Ascendente» debe aprender a reconocer, y al
que debe responder no solo mediante el sentido del oído y sus correspondencias
superiores, sino mediante una respuesta de cada parte y aspecto de la
naturaleza de la forma en los tres mundos…
Sanación Esotérica, págs. 688-689
…el sonido
impregna todas las formas; el planeta mismo tiene su propia nota o sonido; cada
diminuto átomo también tiene su sonido; cada forma puede evocarse en música, y
cada ser humano tiene su acorde peculiar, y todos los acordes contribuyen a la
gran sinfonía que la Jerarquía y la Humanidad interpretan, e interpretan ahora.
Cada grupo espiritual tiene su propia melodía… y los grupos que colaboran con
la Jerarquía crean música incesantemente. Este ritmo sonoro y esta miríada de
acordes y notas se fusionan con la música de la propia Jerarquía, y esta es una
sinfonía que se enriquece constantemente; a medida que transcurren los siglos,
todos estos sonidos se unen lentamente y se fusionan hasta que algún día la
sinfonía planetaria que Sanat Kumara está componiendo se completará y nuestra
Tierra contribuirá notablemente a los grandes acordes del sistema solar; y esto
es parte, intrínseca y real, de la música de las esferas.
Glamour, Un Problema Mundial, pág. 260
…mediante su
conocimiento del ritual (que es el antiguo medio codificado mediante el cual se
organiza y relaciona la naturaleza atractiva y expresiva de las energías a
emplear), su comprensión de las «Palabras de Poder» (que descubre
experimentalmente) y el uso de la potencia del sonido, el discípulo del futuro
trabajará y construirá el nuevo mundo con su cultura y civilización.
Un curioso indicio del efecto del trabajo mágico de séptimo rayo en la
conciencia colectiva es el creciente uso de lemas y frases pegadizas… que se
emplean para lograr resultados e impulsar a los seres humanos a ciertas formas
de acción colectiva. Este es el uso embrionario de las Palabras de Poder, y a
partir del estudio de sus valores tonales, sus indicaciones numerológicas y su potencia
inherente, los hombres eventualmente alcanzarán vastos logros y creaciones
mágicas, generando actividad grupal y la aparición de ciertas formas de
expresión en el plano exterior.
El Destino de las Naciones, págs. 130-131
Uno de los
principales procesos de conexión y fusión es el trabajo creativo de la música.
Les sugiero que incorporen la música a sus vidas mucho más que hasta ahora, en
particular la música orquestal. El efecto de la fusión de instrumentos y la
producción sonora ampliada sobre su personalidad romperá la oposición que esta
presenta al contacto con el alma e impondrá una nota y una tonalidad diferentes
a su vida. Permitan que el amor, la luz y la música se integren más plenamente
en su vida diaria.
El principio divino que preocupará principalmente a la humanidad de séptimo
rayo es el de la vida tal como se expresa a través del cuerpo etérico. Por esta
razón, observamos un creciente interés en la naturaleza de la vitalidad; se
está estudiando la función de las glándulas y pronto se observará su función
principal como generadoras de vitalidad. Esotéricamente, se las considera
externalizaciones en el plano físico de los centros de fuerza del cuerpo
etérico, y su vitalidad o inactividad indica el estado de dichos centros. El
interés mundial también se centra en el ámbito económico, que es, sin duda, el
ámbito del sustento vital. Por lo tanto, es inevitable que ocurran muchos
cambios en todas estas esferas de interés, y una vez que el cuerpo etérico se
convierta en un hecho científico establecido y los centros —mayores y menores—
sean reconocidos como los focos de toda la energía tal como se expresa a través
del cuerpo humano en el plano físico, veremos una gran revolución en la
medicina, la alimentación y el manejo de las actividades de la vida diaria.
Esto producirá grandes cambios en la forma de trabajar y, sobre todo, en las
actividades de ocio de la humanidad.
Discipulado en la Nueva Era II, págs. 699-700
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