Por Lee Harris
Durante las últimas semanas, algunas personas se paraban a saludarme en
la calle y me decían con expresión de agobio: “Las cosas están muy intensas
ahora…”. Entiendo bien a cualquiera que esté sintiendo así en este momento.
Sigue habiendo una corriente que nos lleva a sumergirnos en nuestras cuestiones
más profundas y oscuras, antes de saltar hacia una versión más expandida de la
realidad. Porque la realidad conocida en la que crecimos está cambiando rápidamente,
y nuestro viaje interior también debe efectuar cambios para poder reflejarla.
Lo que ocurre afuera afecta a todo lo que ocurre en nuestro interior. Por
consiguiente, muchos Trabajadores de Luz, personas sensitivas,
conscientes o despiertas, están hablando estos días de pequeñas noches
oscuras del alma.
Si algo puede ayudarnos a cambiar nuestros patrones de
comportamiento es la disciplina y la práctica diaria. Cuando nos encontramos
bajos de energía podemos incurrir en crisis que nos hacen sentir incómodos;
entonces aparecen pensamientos de juicio hacia nosotros mismos, sentimos
vergüenza y toda clase de sensaciones que nos hacen pensar: “Las cosas van mal,
estoy mal, ¿por qué me siento así y qué me está pasando?”. Según mi
experiencia, es algo que forma parte del camino de nuestro avance espiritual.
Si somos sensitivos, no podremos evitar sentirlo. A medida que el planeta
cambia y nos exige que cambiemos con él (tanto a nivel interno como externo),
no podemos evitar entrar en contacto con esas emociones básicas.
La rabia ha sido un tema importante últimamente. Como mencioné en mi
última Actualización, ha habido una confrontación entre la energía de
conflicto y la energía de paz.
Cuando pienso en el mes de Abril, hay dos cuestiones que me vienen en mente.
La primera, es que será un mes “fogoso” en el ámbito internacional y que
podemos esperar estallidos ocasionados por esa rabia en el marco de
ciertas interacciones y determinados acontecimientos, tanto a escala global
como a escala local. Es curioso, porque la rabia y la tristeza se encuentran
estrechamente relacionadas. Normalmente, la rabia suele enmascarar sentimientos
de tristeza y dolor, por lo que podría ser una actitud defensiva. A menudo se
trata de un estallido que intenta marcar un límite, pero suele ser una
reacción defensiva que esconde la tristeza y el dolor que realmente
sentimos.
Si no eres alguien que se identifica con la rabia, no sería de extrañar
que últimamente estuvieras sintiendo tristeza y dolor, como la contraparte de
esa energía de fuego que se está expresando ahora.
La segunda cuestión es que, durante este mes, las personas que
hasta ahora han estado dando demasiado, esas que regalan luz y amor
en su entorno (pero que no se han asegurado de ser correspondidos o de si
los demás les trataban de manera adecuada), aquellos que pensaban que su misión
era dar luz y amor al resto del mundo, no deberían sorprenderse si ahora se
sienten rechazados por otros o se les cierran puertas, o si desaparecen
posibilidades que parecían viables. Todo ello se debe a que en este periodo
deberán aprender discernimiento.
Recuerdo que en una canalización de hace algunos años mis guías me
aseguraron que para poder abrir el corazón y recibir más amor resulta
fundamental establecer límites. En aquel momento me pareció que la información
se contradecía con lo que mi intuición me decía. Sin embargo, ahora puedo
comprender que, si no tenemos límites sanos alrededor de nuestro campo de
energía, cualquiera que desee algo que tenemos, sea cual sea su intención,
puede entrar en él y tomar lo que quiera.
Todos conocemos a personas que tienen la capacidad de entrar en una
habitación e iluminarla, lo cual es una gran cualidad. Pero, puede convertirse
en un problema si se trata de una habitación llena de personas hambrientas de
esa energía en concreto, que no comprenden que por el simple hecho de estar
cerca de ella tienen la ocasión de experimentar esa energía, de sentirla y
aprender después a manifestarla en sí mismos. Sin embargo, cuando alguien está
hambriento sólo quiere comer, no se para a reflexionar y dice: “No debería
tomar demasiada energía de esa persona porque podría agotarse”. No podemos
culpar a alguien que se siente desesperado de intentar robar una energía que
aún no ha aprendido a conseguir por sí mismo, pero debemos saber que eso es
justo lo que hará. Por ese motivo, el discernimiento y los límites serán una
lección fundamental este mes para aquellos Trabajadores de Luz a quienes les
guste formar parte de la “Brigada de luz y amor”, a quienes les guste entrar en
una habitación para iluminarla y dar su energía positiva al mundo.
Mi opinión al respecto es que ahora se nos pide dar menos o retirarnos
de alguna manera, para poder en el futuro asegurar la cantidad de energía que
tendremos a largo plazo. De esta manera, en lo sucesivo podremos dar de forma
más sabia, no sólo allí donde sea importante para aquellos que reciben nuestra
energía, sino donde también lo sea para nosotros y nuestro crecimiento, porque
todos los Trabajadores de Luz tenemos una misión. Algunos estamos aquí para
inspirar a otros a través de la música, otros daremos nuestro amor mediante el
hecho de ser padres, pero en cada una de nuestras misiones individuales
pasaremos por experiencias que nos harán subir de nivel para fortalecernos. Y,
por lo general, el inicio de esas subidas de nivel suele ser doloroso, es algo
que forma parte de la experiencia del crecimiento humano.
Al principio, tomaremos conciencia de todas las emociones a las cuáles
no prestamos atención mientras estábamos en la “Brigada de luz y amor”. Por
ejemplo, si hemos estado dando nuestra energía durante años y años, llega un
momento en que el Universo nos dice: “Muy bien, ahora vamos a enseñarte a
identificar dónde, cuándo y hasta qué punto debes dar tu energía en lo
sucesivo”. En un principio, es posible que sintamos dolor, porque nuestras
necesidades no se han visto satisfechas durante todo ese tiempo (porque no les
hemos prestado atención), o tristeza, porque nos sentimos traicionados
(porque mientras estábamos dando, los demás no han cuidado de nosotros, sólo
nos han agotado). Por lo tanto, ahora podríamos conectar con esas emociones y,
poco a poco, a medida que las vivimos y las dejamos ir, irá tomando forma en
nosotros una nueva manera de ser. Porque esa es la profunda remodelación que
todos estamos atravesando en este momento, tanto a nivel externo como a nivel
interno.
Por consiguiente, en los períodos en que nos sentimos menos estables y
experimentamos una mayor crudeza emocional, la repetición de una práctica
diaria se convierte en algo esencial. ¿Qué es lo que te anima?¿Podrías hacer
hoy algo nuevo y diferente que te ayude a volver a tu centro? Es algo
especialmente importante cuando el centro de muchas personas a nuestro
alrededor esté inestable y dando vueltas, como ocurre ahora.
Como mensaje final, repetiré algo que he dicho con frecuencia en los
últimos meses: hay tanta energía elevada disponible para nosotros aquí (Lee se
señala la parte superior de la cabeza), hay tanta orientación a nuestra
disposición, y no está separada de nosotros: formamos parte de ese continuo de
energía. Una de las falsas creencias como seres espirituales que hemos
mantenido durante generaciones es que la energía elevada y la energía más densa
estaban separadas. Por el contrario, ambas forman juntas un continuo y estamos
aprendiendo a sentir más esa continuidad. Por lo tanto, muchos tendremos más
experiencias psíquicas, intuitivas, o de canalización que nunca, porque ese
tipo de energía se está incrementando ahora; utilízala en tu vida para
divertirte o crear, disfrútala y reconoce que puede formar parte de tu día a
día.
Me ha alegrado mucho poder estar con todos de nuevo este mes. Mucho amor
y cuídense.
Mucho amor para todos.
Lee
(c)
copyright 2017 - all rights reserved by Lee Harris Energy
Traducción:
Rosa García
Difusión: El Manantial del Caduceo
http://www.manantialcaduceo.com.ar/libros.htm
https://www.facebook.com/ManantialCaduceo
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