Marte se encuentra en Géminis desde
el 21 de abril y esto significa, a grandes rasgos,
que la energía mental del mundo está siendo dotada de una intensidad extra.
Veamos en qué puede continuar influyéndonos la estancia de esta posición
marcial y el relevo de Los Gemelos que ésta le otorgue al sol en la siguiente
lunación. ¿Será el locuaz Géminis el salvador de un Venus secuestrado por
Urano? O, por el contrario, ¿encenderá el Dios de la Guerra la mente
calenturienta y la retorcida verborrea de Los Gemelos?
Este Marte en Géminis está
ejerciendo de dispositor de Urano en Aries, lo
que a
priori es positivo, pues digamos que Urano se está sirviendo de una
energía marcial de carácter mental que está en un muy óptimo sextil con su tránsito actual. Aries y Géminis están
sembrando una conciencia revolucionaria combativa que
sus frutos dará en los próximos meses. Sin embargo, esta energía marcial
proveniente de Urano puede resultar excesivamente estimulante en el momento en
que a Marte se le unan el sol y la luna. En concreto
hemos calculado una posición que creemos determinante a nivel colectivo (y, por
supuesto, como todas, a nivel personal): la conjunción del sol y la luna
en el grado 4 de Géminis (25 de mayo, 2017, 22:00 [GMT + 01]). La
unión del ser consciente (sol) y el
inconsciente (luna) en el mismo grado habitando el mismo signo (Géminis) que el dispositor de Urano en Aries (Marte), será un empuje relámpago, una
inyección breve, pero con una influencia importante sobre la consciencia
individual (sol) y colectiva (luna),
El hecho de que Géminis (sol, luna y Marte) se encuentre en sextil con
Aries (Urano) en ese momento, otorgará un fluir muchísimo más dinámico y
eficiente en lo referente a los ámbitos mentales concernientes a los grandes
cambios. Como decíamos, esto puede resultar estimulante mentalmente pero quizá
en exceso, por lo que tendremos que prestar mucha
atención a los tránsitos en los que intervenga esta triple conjunción
geminiana, dispositora de Urano.
Por ejemplo, observamos una conjunción exacta entre Venus y Urano el 4 de junio, 2017, 23:00 [GMT + 01], lo que nos indica
un cambio brusco en nuestra forma de tratar las relaciones amorosas (no tiene
por qué ser un cambio en éstas en sí, dado que ésa área la domina la casa 7 de
cada individuo, aunque Venus afecta directamente a ésta, puesto que es
ciertamente determinante al tratarse de la base de control de las energías afectivas).
Este cambio venusino no tiene por qué ser negativo si sabemos qué
energías debemos utilizar y cómo hacerlo para bien, para que la transformación uraniana
no signifique el desmoronamiento absoluto de nuestras relaciones. El sol
en Géminis en conjunción con Marte de ese momento,
como decíamos, se comunicará cordialmente (sextil) con
ese Venus-Urano en Aries. Eficiencia comunicativa no es
sinónimo de buenas ni de malas vivencias, así como tampoco es justo calificar
el concepto de revolución uraniana como algo
malo, todo depende del uso que demos de esas energías
y de saber aprovechar ese tránsito.
Si la conjunción entre Venus y Urano nos insta a cambiar instintiva y repentinamente lo referente a lo afectivo,
tendremos primero que concienciarnos de que este hecho será inevitable. Para aquéllos que no tengan pareja, esto
podría significar el surgir de una, y mucho más si Aries o Géminis se encuentran
en la Casa 7 de las personas involucradas; sin embargo, para quien ya tenga
pareja estable, esto podrá resultar desestabilizador,
por lo que sería conveniente prestar atención al mapa en este caso y saber así
qué habremos de reforzar y qué
tendremos que evitar para que la inevitable transformación de Venus sea positiva
tras este sextil Géminis (sol, Marte) – Aries (Urano):
REFUERZOS
PARA SALVAR EL AMOR
Diálogo:
Podría resultar terriblemente problemático el hecho de que Marte y el
sol tengan un contacto directo con Urano (conjunto a Venus), pues a Gëminis se
le puede ir la fuerza por la boca y, usando al Marte que alberga, podría
destruir toda estabilidad amorosa en un eficiente impulso uraniano.
Si prestamos atención a este posible fenómeno y cambiamos discusión guerrera por conversación direccional, podemos utilizar este
Marte en Géminis para revolucionar nuestra relación en el buen sentido,
diciéndole a la cara de una forma racional todo aquello que teníamos que
decirle a nuestra pareja, todo aquello que está
ensuciando la relación y que merece un buen lavado de cara.
Afecto:
Esta conjunción de Marte y el Infortunio hace
que toda fuerza manifestada resulte perjudicial, por lo que sería muy positivo
obligarnos a prestarle mucha atención a Venus, a la expresión
del afecto, e incrementar voluntariosamente el nivel de éste,
tanto para huir del marciano Infortunio actual,
como para ser coherentes con el cambio venusino que pide Urano,
haciendo que este cambio sea un aumento en la conciencia sobre el amor,
y cumpliendo así con la sincronicidad natural que nos pide esta posición
astrológica.
Esperemos a que entre Marte en Cáncer el 4 de junio para
poner el hogar patas arriba y ser activos físicamente, de forma cardinal,
notoria, pues será a partir de esta fecha cuando Marte se aleje un poco de ese
caótico Infortunio.
Hagamos que los astutos gemelos manipulen positivamente al impulsivo
carnero uraniano que quiere revolucionar el planeta del amor, hagamos que
Géminis salve por una vez aquello que no consigue entender del todo: el amor.
Fuente:
Campus Astrología
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