Por Jennifer Hoffman
http://enlighteninglife.com
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Traducción: Fara González
Una de las preguntas que me hacen los
clientes a menudo, después de decirme cuán atascados se sienten, es cuál es
el próximo paso mejor. Pero esa respuesta depende de muchas cosas, incluyendo
lo que estén deseando hacer para permitir que sea posible un próximo paso. La
necesidad de conocer nuestro próximo paso es realmente secundaria a nuestro
deseo de no repetir errores pasados o hacer algo que lamentemos después. Y
también tenemos miedo de elegir algo que no quereos y con lo que estaremos
comprometidos para siempre. El cambio de nuestra mente y la elección de algo
diferente es parte de nuestros nuevos paradigmas de 5D pero primero tenemos que
cambiar cómo vemos nuestros próximos pasos y nuestras elecciones.
Hay algunas cosas en la vida que
tienen consecuencias permanentes – tener un hijo es una de ellas – y la mayoría
de nuestras elecciones se pueden cambiar y podemos salirnos de ellas. Pero nos
quedamos con nuestros sentimientos de arrepentimiento y nuestro auto
juicio respecto a lo que pensamos fueron malas decisiones o elecciones
inadecuadas, estas son las que nos hacen temer en nuestros próximos pasos y
limitan lo que consideraremos para nuestros próximos pasos. No podemos borrar
el pasado pero podemos hacer algo diferente en el presente si no permitimos que
los juicios del pasado se conviertan en las razones para no hacer elecciones en
el presente.
Si alguna vez han hecho algo de lo
cual se han arrepentido después, y todos lo hemos hecho, saben cuan dolorosas
son esas memorias. Pensamos del pasado en términos de lo que se pudiese haber
hecho de forma diferente, pero la única forma en la que podemos saber esto es
si hacemos una elección y la llevamos hasta el final. La persona con la que no
debían haberse casado, la decisión que no debían haber tomado, la acción que no
debían haber considerado, todas estas cosas están claras en retrospectiva, que
siempre es 20/20. ¿Por qué no podemos tener vista 20/20 del futuro y conocer
los resultados antes de tomar estas decisiones que cambian nuestras vidas?
Podemos, de cierta forma, y eso depende de nuestra alineación e
intención.
Estamos en alineación con todas
nuestras elecciones, hasta con las que pensamos que son malas o que no
consideramos bien. Eso se debe a que la energía que tenemos cuando tomamos una
decisión empodera esa elección. Si queremos beneficiarnos de otras elecciones,
necesitamos mirar más allá de los próximos pasos y considerar nuevos
potenciales. ¿Qué más está disponible para nosotros, además de las cosas
obvias, y estamos dispuestos a considerarlas, permitirlas y expandirlas? Eso
implica hacer unos pocos cambios en cómo nos vemos a nosotros mismos, como
limitados o ilimitados, y qué estamos dispuestos a liberar para que esos nuevos
potenciales sean parte de nuestra realidad. Y esa es la parte difícil.
Toda energía ocupa un espacio en
nuestras vidas, y no podemos tener dos energías polarizadas en el mismo espacio
energético. No podemos por ejemplo, ser felices y estar tristes, o valientes y
temerosos, confiados y dudosos. Una energía tiene que irse si otra está por
ocupar ese espacio. Todas las elecciones giran en torno a lo que estamos
dispuestos a expandirnos hacia o repelernos de. Si podemos expandirnos hacia
nuevos potenciales entonces podemos liberar todos los temores y limitaciones
que utilizamos para mantener estos fuera de nuestras vidas. No es una elección
fácil el abandonar nuestros temores de un potencial desconocido que puede
resultar una elección peor que las previas también malas Pero no creo que ese
sea el caso.
No obstante, nunca sabemos hasta que
lo probamos, así que tenemos que enfrentarlo y permitirnos elegir y cambiar
nuestras mentes, sin juicio de nosotros mismos o de nuestras elecciones, si
nuestros resultados no cubren nuestras expectativas. Los nuevos
potenciales no significan una alegría y seguridad permanentes, significan
diferentes resultados de los que tuvimos en el pasado. Y no son más que un
escalón hacia potenciales nuevos y diferentes (especialmente si no nos gustan
los resultados de nuestras elecciones) si no quedamos atrapados en nuestro
temor, crítica y juicio.
No podemos saber si algo nos gustará
hasta que lo probemos y no es irresponsable ni inmadura hacer una elección y
entonces decidir que no es la correcta para nosotros. Es un signo de auto
amor empoderado y aceptación el reconocer que elegimos algo que no queremos,
entonces confiadamente tomar nuestro menú de elecciones y elegir otra cosa.
Elijan los resultados más elevados y dejen espacio para cambiar de opinión
porque pueden decidir, una vez que escalen la montaña, que no les gusta y
quieren hacer otra cosa. Y esa es siempre su elección.
Derechos de autor reservados © 2016
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