Hoy
lunes 3 de julio tenemos el plenilunio de julio que activa el eje Cáncer (Sol)
y Capricornio (Luna).
Hoy
lunes 3 de julio tenemos el plenilunio de julio que activa el eje Cáncer (Sol)
y Capricornio (Luna).
Se
trata del eje de individualización, y desde el punto de vista esotérico,
mientras Cáncer es el signo de la manifestación y tiene dependencia al
colectivo (desde su instinto de rebaño), Capricornio (su signo opuesto)
representa la conciencia individual.
En el proceso de iniciación, el ser humano se encuentra inmerso en la polaridad entre el colectivo y la individualidad, y debe llegar a unir estos dos polos en su interior. Esto significa que, una vez que el
individuo ha alcanzado el punto más alto de la experiencia de sí mismo en Capricornio, debe regresar de nuevo a la humanidad, es decir, debe volver a bajar al colectivo, representado por Cáncer.El
signo de Cáncer debe comprenderse como un camino hacia las raíces y el origen
de la vida, a la sabiduría ancestral. Además, su lema espiritual, «Construyo
una casa iluminada y en ella moro», nos confronta con las partes de nuestra
vida que necesitan atención en estos momentos.
Por
su parte, Capricornio, nos recuerda que la conciencia superior es fruto de un
trabajo interior, en solitario y, siempre, con tenacidad.
Centrándonos
ahora algo más en este plenilunio, que también es superluna (la luna estará en
su perigeo más cercano a la Tierra), podemos revisar cómo funciona este eje
Cáncer/Capricornio en nuestras vidas:
• La luna llena, reflejando la luz del Sol,
iluminará los retos del Signo de Capricornio, los mismos que nos atrapan en la
reactividad emocional
• La energía de Cáncer, donde se encuentra el Sol, permitirá deshacer los espejismos lunares y el encuentro con nuestra familia del alma.
Veamos ahora el gráfico.
En el gráfico del Plenilunio destaca una figura llamada Cuna, que en esta ocasión une a las luminarias con Mercurio, Júpiter y Saturno.
La
figura Cuna estimula el interés en buscar algún tipo de filosofía o herramienta
emocional que aporte tranquilidad o serenidad, tomando distancia de los retos
diarios para encontrar un orden interno y una visión más amplia y desapegada de
la reactividad personal hacia el entorno.
Encontramos
también una figura lineal que une a los transpersonales y al Nodo con
Marte/Venus. Ella es la encargada de poner a prueba ese orden, deparando
sorpresas a través de relaciones cercanas.
Es
la sinergia entre ambas figuras las que aportan la posibilidad de una apertura
consciente en el presente, indicando el camino hacia la sabiduría personal y
cómo acceder a la quietud del silencio interno, confiando en lo nuevo, en
aquello que está por llegar.
Vale
aquí la pena recordar que Cáncer es un signo de agua y cardinal, regido a nivel
exotérico por La Luna y, a nivel esotérico, por Neptuno.
En
este plenilunio, ¿cómo puedes construir algo nuevo más afín a lo que eres?
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