Por Sarah Varcas
http://astro-awakenings.co.uk/
8 de Junio 2016
Traducción:
Gabriela Halblaub
La sabiduría del miedo
La relación presente entre Plutón y
el Nodo Norte (que continúa hasta mediados de Octubre) llega como una gran
bendición. Ahora más que nunca, el poder transformativo de Plutón apoya una
manifestación positiva de nuestro destino colectivo. Vemos en este tema el
potencial para el cambio, que consolida el progreso, incluso si a primera vista
aparecen muchas causas para la desesperación.
A través de todo Junio, el trino
entre Plutón y el Nodo Norte está más realzado por una conjunción entre el Nodo
Norte y Júpiter, subrayando la esperanza, y luchando en contra de las
narrativas de la perdición. Es vital que distingamos cuidadosamente entre esto
que podría causarnos miedo, y aquellos que las distribuyen gratuitamente como
un medio de control. El miedo no es nuestro enemigo, sino un indicador, que una
parte de la persona se ha apartado o está en negación. Tememos no poder con el
futuro porque hemos perdido contacto con nuestra fuerza interior. Tememos que
la vida dé un giro hacia lo peor, cuando perdemos conexión con la esperanza.
Tememos que la raza humana se destruya a sí misma porque hemos perdido la
visión de nuestro más alto potencial. El miedo nos muestra dónde debemos
reconectarnos, y por qué. Es nuestro amigo, que nos guía a través del bosque de
las emociones. Un poderoso aliado con regalos para compartir.
Cuando se lo mira a través de los
lentes de la sabiduría y se lo abraza con un corazón abierto, el miedo es
nuestro maestro y nuestro sanador, digno de respeto por el mensaje que brinda.
Aquellos que lo usan como un medio de control sólo pueden tener éxito en tanto
nos neguemos a enfrentarlo nosotros mismos. Una vez que se conoce el miedo
íntimamente, podemos evaluarlo, distinguir su verdadera causa (¡que raramente
es lo que habíamos pensado en primer lugar!) y decidir la mejor manera de proceder.
El miedo podría ser nuestro mejor amigo, que nos mantiene seguros cuando la
autoprotección es necesaria, o podría ser nuestro mayor obstáculo, que nos
mantiene asustados y empequeñecidos cuando se requiere gran valor para hacer lo
que es necesario. Pero sin conocerlo íntimamente, no podemos discernir la
diferencia, ni tampoco podemos decidir a qué o quién le deberíamos dar el poder
de influenciar nuestras vidas.
Mientras Plutón trina al Nodo
Norte, nos invita a abrazar al miedo, simplemente como otro aspecto de la
experiencia humana, no algo para evitar a toda costa. Tampoco es un signo de
debilidad ni un profeta de la perdición. El miedo nos recuerda que estamos creciendo
y cambiando, recorriendo nuevos caminos, encontrando cosas que habían sido
evitadas, llegando más allá de nuestra zona de confort. Es una respuesta
natural a los desafíos que enfrentamos actualmente, y a las posibilidades que
nos esperan. Si tememos a la experiencia del miedo, no podemos atravesarla y
salir victoriosos. Si lo enfrentamos, lo apropiamos y lo aceptamos, el miedo se
transforma en el valor necesario para fortalecernos otra vez.
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