A
partir de ahora podemos trabajar con las energías de Marte. El planeta rojo
transitará desde el grado 17º de Capricornio y activará gradualmente en
conjunción a Júpiter, Plutón y finalmente a 0º39 de Acuario a Saturno. La
energía baja de Marte es el miedo, las fobias y paranoias, la violencia, la
agresividad, la destrucción, la guerra, el egoísmo por falta de poder personal
y el victimismo. Las energías elevadas son el coraje, la acción, las decisiones
tomadas a tiempo y correctamente, el instinto de supervivencia, la sexualidad,
el impulso de vida, la vitalidad, el deporte, las artes marciales, el
autocuidado, el proteger a otros, la fuerza y el asertividad.
Durante
las próximas dos semanas esta fuerza roja se unirá con la fuerza expansiva de
Júpiter que generará muchísima energía que no es ni buena ni mala pero que se
puede descontrolar por su excesivita. También proporciona oportunidades para
crecer como personas y como colectivo. Al estar todo eso en Capricornio
tendremos la oportunidad de construir en lugar de destruir a pesar de las
adversidades, pero quizás estos tránsitos de ahora sean el preludio de un
cambio de Paradigma más grande a lo largo de las próximas semanas y meses
debido a las conjunciones de Júpiter con Plutón.
Plutón ha estado desde el 2008 en Capricornio haciendo su trabajo pidiendo una reforma de todo nuestro sistema económico, político y social. Parece que no ha habido demasiado avance sobre todo a nivel político agarrándonos a viejos paradigmas sin sentido ya. No son los planetas que «hacen», sino somos nosotros.
Con el planeta de la acción conjuntándose a las tres piezas pesadas en Capricornio creo que es el momento de reflexionar colectivamente y revisar nuestras actitudes y acciones. Marte es un planeta bastante demonizado, lo fue incluso en el medioevo donde se llamaba el Maléfico menor, el mayor era Saturno. (Plutón no se descubrió hasta el 1930 sino seguramente sería el rey de los Maléficos). Creo que es el momento para trabajar con la energía de Marte y canalizarla de una forma positiva para que esta energía psíquica vibre bien en nosotros. ¿Cómo? Es muy sencillo: moverse, hacer deporte, ejercicio, caminar, artes marciales, luchar bien nuestras batallas, desarrollar coraje, capacidad de decisión, ser proactivos, cuidarse bien la alimentación, el cuerpo, cultivar el impulso de vida y la vitalidad. Ser asertivos, manejar con responsabilidad nuestros impulsos más agresivos, y si tenemos el poder personal para ello proteger a los demás cuando es necesario. Marte es el camino del Guerrero, de la nobleza y de la valentía. Estáis invitados a participar de su energía de una forma consciente.
Esto evitará que se descontrole la energía en nuestra realidad personal y en lo colectivo. Cuando nos responsabilizamos de lo que hemos demonizado y lo integramos, el demonio se convierte en aliado.
© Margit Glassel
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