LOS CICLOS DEL PODER EN ARGENTINA

Alejandro Lodi

 “…En los jóvenes más politizados de la generación que había nacido con la llegada de Perón al poder (en sincronicidad con la conjunción de Saturno y Plutón hacia 1947) comienza a gestarse la convicción de que la revolución social en Argentina sólo podía estructurarse desde el peronismo. El ideal de una patria socialista y el culto al líder que encarna la justicia social en el sentimiento popular anima la visión redentora de grupos juveniles que, muy pronto, concluyen en la necesidad de asumir la lucha armada como legítimo y único medio efectivo para generar una auténtica revolución,

convencidos de que la democracia y su sistema electoral sólo reproduce las injusticias y genera la simulación de 'un cambio para que nada cambie'. De este modo, en el clima astrológico de Urano y Plutón en tránsito por la casa XII de la carta de nuestro país, las consignas 'revolución o muerte' y 'Perón o muerte' forjan su encantamiento en el inconsciente colectivo de la comunidad y, en especial, en el de esa generación…

En marzo de 1976, un golpe militar derroca a Isabel Perón e instaura el llamado Proceso de Reorganización Nacional: un régimen que suspende la actividad de los partidos políticos, las libertades democráticas y las instituciones republicanas, e implanta un plan sistemático de represión ilegal de la guerrilla. Nuestro país se sumerge en un tenebroso período de Terrorismo de Estado...

Este es el trágico fruto que ofrece el tiempo de cuadratura menguante del ciclo de organización del poder iniciado en 1947 con la conjunción de Saturno y Plutón: la polarización máxima entre dos visiones de la Argentina, a extremos de exterminio y de sacrificio. La vida cívica tomada por las armas.

Este fruto tóxico y revelador de una patología colectiva sólo podía agotarse con una disolución contundente del encantamiento que lo animaba. Como ocurre con cualquier adicción, debe llegarse a la experiencia límite que propicie el rayo de discernimiento, la emergencia de conciencia, de lo que hasta ahora fue confuso e inconsciente. Así ocurre en lo personal tanto como en lo colectivo. Y no sólo es el agotamiento del ciclo Saturno-Plutón de 1947, sino también del tránsito de Plutón por la casa XII de la Argentina iniciado en 1965: una travesía del dios de las oscuridades del alma humana por la zona de la psique colectiva más sensible a hechizos y encantamientos, una recapitulación profunda del símbolo de la pulsión vital -tan creativa como destructiva- por espacios de resonancia con la fascinación por el sacrifico redentor y el exterminio purificador viva en el inconsciente colectivo de la comunidad argentina, con todos los fantasmas del pasado histórico invocados y excitados...

Pero restaba, aún, un agónico intento de recuperar confianza y poder: el recurso extremo de la causa nacional que 'nos une a todos', del cepo patriótico de la guerra ante un enemigo extranjero 'que anula todas las diferencias internas. El efectivo narcótico del nacionalismo para ocultar crímenes y justificar tragedias. La Guerra de Malvinas como perverso ritual de sacrificio y oscura manipulación de la conciencia colectiva…

”. LOS CICLOS DEL PODER EN ARGENTINA, Editorial Kier, (pág. 181-193).