El
hombre nuevo, el del único mirar, mostrará contextura sin males. El microbio
enfermante desaparecerá por ineficaz. El hombre nuevo será de cobriza tez,
resultante ello del fundido de razas. Será dueño de fuerza física de tres
hombres de ayer.
Enseñará:
vehemencia en vehemencia, ponderación en ponderación, belleza en belleza,
oración en oración. Será en el libre albedrío y la libre acción. El hombre del
único mirar, desconocerá el apetito carne, porque él será en nuevo amor.
¡El
nuevo amor será Paz!
Susana Peralta
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