Si no te gusta el cambio y te paraliza por la indecisión cuando tienes que considerar opciones y tomar decisiones, probablemente no te sientas muy cómodo con este artículo y podcast porque involucra la inevitabilidad del cambio y cómo las fuerzas del cambio nos obligan a cambiar. incluso cuando no queremos. Esto no está fuera de nuestro control, pero recuerda que somos guiados por la misión de nuestra alma y cuando nos resistimos al cambio estamos involucrados en una batalla entre el ego y el alma y eso rara vez es agradable.
¿Qué nos impulsa a hacer cambios en nuestra vida? A veces es lo que hacen otras personas y las decisiones que toman. He asesorado a muchos clientes que estaban haciendo su vida diaria y luego tuvieron que hacer cambios porque su pareja los engañó, o se fue, o murió, o tomó una decisión con la que no podían alinearse y el cambio tenía que ocurrir.
A veces cambiamos cuando hemos tenido suficiente de una
situación y un día decidimos que hemos terminado con el status quo.
Otras veces decidimos que vamos a cambiar y lo hacemos, solo
para descubrir que no elegimos sabiamente porque no obtuvimos el resultado que
queríamos. ¿Es esa la verdad o tratamos de elegir algo con lo que no estábamos
alineados o no pudimos crear o tenemos el hábito de adivinar cada elección?
Cuando adivinamos nuestras acciones es desde el punto de
finalización, después de que se haya realizado el cambio. Olvidamos nuestros
pensamientos, mentalidad y creencias en el momento en que estábamos
considerando esa acción. En ese momento fue probablemente la acción más obvia,
la única acción que consideraríamos, o la única acción que pensamos que tenía
alguna posibilidad de éxito. Más tarde, cuando tenemos diferentes opciones
disponibles, pensamos que hicimos una elección equivocada, pero no lo hicimos.
Hicimos la elección correcta en ese momento.
Si miramos el cambio tenemos que mirar el camino del cambio y
eso tiene 4 partes,
Creencias
Potencial
posibilidades
Consecuencias
Si vamos a hacer un cambio, nuestro sistema de creencias tiene
que apoyarlo o simplemente no sucederá. ¿Alguna vez te has preguntado por qué
pospones tanto las cosas cuando intentas tomar una decisión? Es porque las
opciones que está considerando no están alineadas con tu sistema de creencias.
Hay otra razón de la que hablaré en unos minutos. Pero primero debes considerar
lo que crees acerca de tus elecciones si tienes problemas para tomar medidas.
Necesitamos creer que podemos actuar con éxito sobre nuestras elecciones para
tener éxito. De lo contrario, no tendremos ninguna confianza y no haremos
ningún cambio.
Necesitamos ver algún tipo de potencial positivo, edificante,
apropiado y satisfactorio en el cambio o no lo haremos porque será como entrar
en un agujero negro. ¿Por qué alteraríamos nuestras vidas de esa manera si no
vamos a tener idea de cómo los resultados que estamos creando van a crear un
cambio que nos guste y con el que podamos vivir?
Las posibilidades de nuestros potenciales es fundamental
porque por mucho potencial que tenga algo, si no creemos que es posible, no
sucederá. Alguien podría decirte que tienes la habilidad de ser un trapecista
pero si tienes miedo a las alturas no sucederá, simplemente no será posible.
Es importante explorar nuestras posibilidades a medida que
establecemos intenciones y abrimos el camino al cambio porque sin la alineación
de nuestras posibilidades no permitiremos que suceda el cambio. No importa cuán
emocionante pueda ser el potencial, si no hay una posibilidad coincidente en
nuestro sistema de creencias, no lo haremos.
Y luego está nuestro buen amigo, las consecuencias. No
pensamos mucho en las consecuencias, o solo cuando tenemos un accidente o nos
pasa algo. Llamamos a esas consecuencias y, sin embargo, las consecuencias son
parte de cada cambio y elección, cada decisión y cada acción que tomamos. Toda
acción tiene una consecuencia, que es también una ley universal, la Ley de
Causa y Efecto.
Lo creas o no, porque es verdad, las consecuencias son lo que
usamos para decidir sobre nuestras elecciones, acciones, cambios, los caminos
que tomaremos y los potenciales que permitiremos que se manifiesten. Basamos
cada decisión en las consecuencias y eso incluye lo que otros hacen, dicen y
piensan sobre nosotros y lo que estamos haciendo.
Si no tenemos una opinión o somos neutrales acerca de las
consecuencias, seguirán ahí, pero no nos importarán tanto o nada. La elección
segura surge cuando somos conscientes de las consecuencias, hemos considerado
sus ramificaciones y elegimos nuestra opción más poderosa en función de lo que
queremos, independientemente de las consecuencias.
Pero si no estamos seguros de las consecuencias o realmente
las tememos, es cuando se establece la parálisis de la elección. No es que no
podamos elegir entre las opciones que tenemos, es que cada elección tiene una
consecuencia que no estamos dispuestos a vivir. con lo que retrasamos,
procrastinamos, buscamos excusas para evitar elegir y, finalmente, abandonamos
el cambio.
El problema no estaba en el cambio que tratábamos de hacer,
estaba en las consecuencias, pues ahí es donde radica nuestro miedo.
Siempre digo que no le tenemos miedo al 'miedo', el miedo no
es una cosa. Tememos las consecuencias y son algo muy real porque las hemos
experimentado, sabemos de dónde vienen y qué sucede, y haremos todo lo posible
para evitarlas.
¿Como funciona esto? Daré un ejemplo de un cliente al que
llamaré Ada. Ada quería mudarse a los EE. UU. desde su país de origen, la
India, e ir a la universidad cuando era joven. Su familia se opuso
unilateralmente y se negó a dejarla ir. En cambio, querían que se casara con el
buen joven que habían seleccionado para ella y se estableciera en la calle de
la casa de su madre, tuviera hijos y fuera una buena nuera, hija, esposa y
madre, en ese orden. . De esa manera estaría cerca de ellos cuando la
necesitaran, especialmente cuando envejecieran. Ada se dio cuenta de que tenían
su vida planeada y que no era lo que ella quería.
Así que ahorró su dinero, se matriculó en la universidad y se
fue de casa sin el permiso de sus padres. Estaban furiosos y la repudiaron,
diciéndole al resto de la familia que ya no era parte de la familia.
Ada sabía que sus acciones tendrían consecuencias y estaba
dispuesta a enfrentarlas inicialmente. Pero a medida que pasaban los años y
continuaba siendo condenada al ostracismo por su familia, se preguntó si había
tomado la decisión correcta. Cuando su padre murió y ella trató de asistir al
funeral, la familia no la dejó entrar a la casa. Su madre se negó a verla a
pesar de que había viajado miles de kilómetros para visitarla y compartir su
dolor por la muerte de su padre. Ada se da cuenta de que, debido a su elección,
su familia la había rechazado y probablemente nunca podría volver a verlos o
hablarles. Ahora se pregunta si hacer lo que quería era lo correcto, que tal
vez debería haber escuchado a sus padres en lugar de seguir su propio camino.
Ahora, cuando Ada tiene que tomar decisiones, usa esa
consecuencia para asegurarse de que todos estén de acuerdo con su decisión.
Hace un sinfín de preguntas a todos los involucrados y tiene miedo de seguir
adelante sin obtener el pleno acuerdo de todas las personas a las que afecta su
decisión. Esto significa que nunca toma una decisión con la que se sienta
completamente cómoda, evita el cambio y duda de cada movimiento que hace.
La elección y el cambio son parte de la vida y no podemos
evitarlos, no importa cuánto lo intentemos. Si comprendemos el proceso de
elección y sabemos cómo elegimos, tendremos menos miedo de elegir y más
confianza en las opciones que consideramos y las elecciones que hacemos.
Aquí hay una pequeña guía para ayudarte con tus elecciones:
1. Tendremos
desafíos ocasionales en nuestra vida, no importa cuán 'ascendidos' creamos o
creamos que somos.
2. Nuestros
desafíos exigen que seamos más creativos con nuestras elecciones. Cuantas
opciones diferentes podemos crearnos ante este desafío, que es la otra opción a
ser abrumados por los desafíos.
3. Conoce tus
posibilidades, que incluyen tus propias limitaciones y las cosas que
simplemente no harás. No puedes hacer una elección que cree una transformación
con la que no estás alineado.
4. La intención
establece la frecuencia para los tipos de elecciones que creamos, por lo que es
necesario establecer intenciones grandes y poderosas que aprovechen toda
nuestra energía si vamos a crear muchas opciones de alta frecuencia.
5. Las
consecuencias siempre serán parte de tus opciones, elecciones, decisiones y
transformación. No hay forma de evitarlos, pero puedes ser consciente de ellos
y estar preparado para ellos.
6. También es
importante aprender a crear un diálogo entre nuestra intuición (conocimiento
interno) y nuestra voz externa, para que podamos usar la asociación co-creativa
equilibrada entre lo humano y lo divino para tomar conciencia de otros niveles
de elecciones que no podemos imaginar usando nuestra propia mente y pensamiento
basado en el pasado.
Y no te sorprendas si tienes que repetir una elección que has
hecho antes. Si bien es molesto enfrentar un desafío en la vida cuando creemos
que no tendremos que lidiar con esos problemas nuevamente una vez que lleguemos
a cierto nivel en nuestro ciclo de ascensión, sucede. Sé que algunas personas
te dicen que llegas y luego estás libre de todos los desafíos para siempre.
Desafortunadamente, eso no es cierto y es solo más información falsa y engañosa
de las mismas personas que también les dijeron que el camino de la ascensión
fue fácil, rápido y divertido.
Si bien esto puede ser molesto, es una prueba de nuestra
autoconciencia, autoestima, nuestros límites y de cuántas elecciones y opciones
podemos crear para nosotros mismos. Si bien todavía estamos operando en 3D en
el ciclo de ascensión, no estamos en un camino lineal limitado de una sola
elección y eso es lo que podemos celebrar cuando nos enfrentamos a cambios
desafiantes que exigen elecciones creativas.
Este es el mes cuyo tema de elección y cambio nos anima a
abrirnos a diferentes tipos de elecciones. Y esto, a su vez, eleva nuestra
frecuencia y vibración energética. Sí, el miedo es una opción y también lo es
el pensamiento de víctima, pero ¿qué pasa si consideramos estos desafíos como
una confirmación de que estamos listos para un nuevo paradigma de vida y los
usamos como un trampolín hacia otras posibilidades, potenciales, elecciones y
creaciones que nunca antes habíamos considerado? . Cuando un viejo camino se ha
quedado sin energía, necesitamos cambiar de camino y cuando estamos atrapados
en nuestras incómodas zonas de confort, este imperativo de crear un nuevo
camino entrará en nuestras vidas de una forma u otra.
Elegir sabiamente y elegir bien son parte del proceso, pero lo
más importante es hacer una elección y luego decidir sobre la acción y no
perderse en el proceso. No pienses demasiado en esto y trata de hacer la mejor
y más perfecta elección.
Haz
una elección, considera las consecuencias, toma una decisión y luego evalúa sus
resultados. Asegúrate de establecer intenciones fuertes, incluidas aquellas que
desafíen tus creencias y pensamientos actuales, de modo que abras de par en par
las puertas del portal de opciones y ten una amplia gama de posibilidades y
opciones para considerar.
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Derechos de autor reservados © 2022 por
Jennifer Hoffman. Pueden citar, traducir, reimprimir o referirse a este mensaje
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Traducción y Difusión: El Manantial del
Caduceo en la Era del Ahora
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