Realmente podemos invocar a Mercurio para que nos asiste en ese flujo de apariencias que llamamos Realidad, para que nos inspire y ayude con los asuntos sobre los que preside. (Cada planeta es experto en ciertos temas y no tanto en otros). Aquí no voy a entrar en el debate de si una divinidad planetaria existe, no existe o de una misteriosa manera existe y no existe al mismo tiempo. Ese tipo de análisis son más tema de mi Patreon, ahí nos podemos explayar a gusto.
Ahora lo que me interesa es transmitiros algo importante: como
trabajar conscientemente con Mercurio en Libra y sintonizarnos con su energía
para nuestra evolución durante las próximas dos semanas y media.
Mercurio ya viaja
rápido. Solo estará en Libra del 11 al 29 de octubre y además por segunda vez
en poco tiempo. La primera fue del 26 de agosto al 23 de septiembre, pasó en el
signo parte de su retrogradación. Pero eso ya es agua pasada. Centrémonos en el
ahora y aquí y lo que viene. Si no hemos hecho las cosas bien en las primeras
tres semanas de septiembre, ahora tenemos una segunda oportunidad.
Primero hay que comprender qué o quién es Mercurio. Pues es la
fuerza que habita en nuestro infinito universo interno y externo (que para mí
no es tan separado) que nos impulsa a pensar, a interpretar los
acontecimientos, a entenderlos, a darles sentido, a conectar ese sentido, las
ideas, pensamientos, movimientos, inteligencia, astucia y estrategia en nuestra
cabeza y además es la capacidad de usar el lenguaje y comunicar nuestros
pensamientos a los demás de una forma bastante sofisticada. Es versátil,
rápido, e ingenioso. Bien, este es nuestro amigo Mercurio.
De paso os dejo algunas fotos de mis caminatas, una actividad
muy mercurial que nos pone en contacto con la belleza del mundo.
Ahora hay que considerar otro punto: Mercurio siempre estará
en alguno de los doce signos y en cada uno de ellos su energía pura se
expresará de formas distintas. En este momento viaja por Libra, el mes que
viene transitará por Escorpio y esto será otro cantar (Os contaré…).
Mercurio en Libra nos puede ayudar a ser más diplomáticos. A
decir las cosas de una forma que no hiere sentimientos ajenos, a no ser tan
brutos, ni tan intensos, ni tan “honestos” (ya tendremos tiempo para ello
cuando naveguemos los mares oscuros de Escorpio). La “sinceridad” sin empatía
puede dejar a más de un corazón destrozado. Libra es dulce, busca la belleza y
la paz. Tiene mano izquierda. Nos podemos preguntar si lo que vamos a decir
crea armonía y belleza o guerra y destrucción y según lo que elijamos, si
estamos dispuestos a aceptar las consecuencias.
No podemos juzgar y quejarnos de lo que ocurre en Ucrania si
no somos capaces de negociar, llegar a acuerdos y crear paz en nuestras
relaciones personales o dentro de nosotros. Si estamos sumergidos en un
conflicto interno viviendo en un mundo en guerra, este Mercurio nos viene bien.
Saca la balanza y evalúa, al estar en un signo de aire es racional, sabe tomar
distancia y no dejarse arrastrar. Respira y crea espacio. Es firme, ve las dos
(o más) partes y negocia, cede un poco, pacta y crea tranquilidad para todos.
Aborrece las bombas y la violencia bruta.
Pero claro, necesitamos abrirnos a su influencia, no es
automático. A veces si nos afectan los planetas de una forma inconsciente,
simplemente manifiestan su lado más sombrío. En este caso la indecisión y el
miedo a posicionarse y ser asertivo, por ejemplo.
Puede ser incendiario y feroz en cuando siente que hay alguna
injusticia. Ojo con eso, analiza bien la situación. A veces solo vemos la capa
externa de la cebolla.
Perder los papeles no
es moralmente malo, no es eso. Simplemente es negativo porque perdemos eficacia
y poder y no vamos a conseguir nuestro objetivo. Respira y crea espacio,
cálmate para ganar la batalla sin tantas bajas ni ríos de sangre. Cuando
pactamos a veces hay que ofrendar algo, sacrificar algo…el apego a nuestro
personaje quizás, a querer tener la razón, a percepciones caducas o a miedos
irracionales.
Pactar puede crear una liberación donde dos energías separadas
se integran. Puedes pactar con tus demonios, con ciertas fuerzas, con tus
enemigos, con tus amigos y con quien consideres. Pero no te sometas, ya que
entonces la balanza de Libra no está equilibrada. Lo notarás en el cuerpo. Si
conseguimos canalizar bien a Mercurio en Libra, se crea una sensación dulce, de
apertura, de tranquilidad y de espacio. Evolucionamos, se siente una alegría
interna muy grande.
Libra es la base de calma y sensatez que necesitamos para
luego poder soportar las intensidades escorpiónicas. Aprovechemos la
oportunidad. Si el mundo no lo hace, podemos practicarlo nosotros. Si tienes
miedo, pacta con tu miedo para que no te paralice y por el contrario te sirva
como aliado.
© Margit Glassel
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