Ya llevamos una semana con las vibraciones de
la Diosa del Amor en tierras de Capricornio. Tradicionalmente, este
signo gobernado por Saturno no se considera el mejor lugar para Venus. Hemos
podido explorar las energías capricornianas durante las últimas semanas: Mercurio
lo ha revistado en su retrogradación, ahora ya avanza en directo (todavía en
Capricornio). El Sol acaba de dejar atrás este signo la semana pasada
cuando entró en Acuario. Su energía se asocia con el plomo, con las
estructuras, los límites, las tradiciones, el orden, las
jerarquías, la política y los gobiernos.
Os he hablado bastante de Capricornio en otros
posts, así que no hace falta que me extienda pero una cosas sí es muy
importante: mientras esté Plutón en Capricornio (desde el 2008 hasta el
2024), transmite sus cualidades a los planetas que pasan por este
signo, es como si el Señor de la Muerte y de la transmutación, aquel que
nos da fuerza para morir y renacer de nuestras cenizas, hubiera
impregnado las energías de Capricornio. Cada planeta que transita el
signo se conjunta con Plutón, inevitablemente,
y es profundamente
transformado por este abrazo. Mezcla sus cualidades con las cualidades de
Plutón. Seguramente todos podemos recordar una situación así, donde nos
encontramos con alguien o con una experiencia que nos
cambia…profundamente. Pues esto es lo que le espera a Venus (y las cualidades
que representa) el día 6 de febrero cuando su conjunción con Plutón es
exacta.
Nos afectara de varias maneras: es
posible que sintamos una intensa necesidad de mayor profundidad en
nuestras relaciones. Quizás las situaciones o personas que no nos
convienen los podemos dejar atrás…por fin. Cortar lazos. Las relaciones
que no son reales, donde no hay compromiso de verdad o donde quizás
seamos solo el segundo plato o capricho de alguien, nos resultarán cada
vez más insoportables durante este tránsito. Puede haber cierto drama y
emociones fuertes (Plutón), pero controlado, ya que Venus en Capricornio
no pierde los papeles fácilmente.
Tampoco se compromete a la primera, es
selectiva, tiene fama de ser un poco materialista y muy seria. Sabe estar sola
y no se engancha fácilmente a alguien toxico. Es demasiado práctica para
dejarse marear y no quiere ser la “madre” de nadie. Pero cuando se compromete,
es de verdad. Nos infunde un gran sentido de responsabilidad; respetamos
los principios de la tierra, del mundo, de la realidad y a nosotros
mismos y nuestras necesidades. Venus en Capricornio puede ser un poco
ermitaña, pero porque quiere algo que sea auténtico y no le importa esperar;
opta por la soledad elegida y por su trabajo y su misión en la vida si
fuera necesario.
Este tránsito también nos puede confrontar con
como gestionamos nuestra economía, nuestras inversiones y gastos. Venus rige el
dinero y la creatividad. Plutón además de Señor del Inframundo es el Señor de
las Riquezas, sobre todo de las que surgen de las profundidades. Es un
buen momento para ponernos en serio con el trabajo, respetar nuestros
valores y sobre todo trabajar nuestra autoestima. Es un momento auspicioso
para ponernos manos a la obra para crear mejores realidades en este
sentido, hacer por ejemplo algún curso de formación o aceptar un trabajo con
más responsabilidades y mejores ingresos.
Con las influencias conjuntas de Venus y
Plutón en Capricornio es probable que cambien nuestros valores, como nos
vemos a nosotros mismos y que necesitamos para sentirnos mejor. Las estructuras
(Capricornio) que gobierna Venus (amor, economía, belleza, arte,
creatividad, autoestima) seguramente necesitan una profunda transformación
auténtica (Plutón).
Mercurio acompañará a Venus en su tránsito por
Capricornio hasta el 13 de febrero. Nos dará la capacidad para
comunicar lo que queremos a los demás. Nos ayudará a dar estructura a lo que
tengamos que decir y nos otorgará la habilidad de ir al grano y dejar atrás lo
superfluo y lo superficial.
29/1/2016
Copyright© Margit Glassel.
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