por Dana Mrkich
www.danamrkich.com
Traducción: Fara González
Terminamos el 2015 en el cual muchas personas tuvieron momentos
difíciles, incluyendo mi familia. Accidentes potenciales o reales que pudiesen
haber terminado peor solamente por pocos segundos de diferencia. Al final,
percibí que aquí estábamos en esta realidad donde todo funcionaba bien, pero
que había una realidad paralela muy diferente que había sido desviada y en la
cual nuestra vida hubiese cambiado drásticamente.
Esto me puso a pensar. ¿Cuántas
veces nos ha ocurrido esto como colectivo en el Planeta Tierra? Más
específicamente, ¿cuántas veces ha ocurrido en años recientes particularmente
con respecto al ‘Cambio’? Miramos alrededor y pensamos que las cosas pudiesen
estar mucho mejor, pero cuando experimentamos algo cercano a un accidente vemos
que las cosas pudiesen haber sido mucho peores al punto de desconectarnos, de
terminar el juego aquí.
Qué, si la vida aquí y ahora es una
realidad muy parecida a la de un filme donde el desastre global se evitó en el
último momento, mientras la humanidad estuvo felizmente inconsciente de que las
cosas pudiesen haber sucedido de forma diferente si la trayectoria del
asteroide hubiese estado un poco más cerca o esa súper tormenta solar cambiase
de dirección.
¿
Qué si nuestra fiesta de
celebración ‘lo logramos’ no fuese en espera del día en que el mundo fuese perfecto?
¿Qué si se trata del día en que nos demos cuenta que a todos se nos ha dado una
segunda oportunidad (o un millón de ellas) para apreciar cuánto del paraíso
está aquí ahora, sabiendo cuánto poder tenemos ahora, para hacer que las cosas
mejoren, para ayudar en todo lo que podamos?
A menudo subestimamos lo que
nosotros, como individuos podemos contribuir para hacer la diferencia. Pensamos
‘soy una persona, qué diferencia puedo hacer realmente con lo que haga o lo que
no’. Miren el rompecabezas. Vean que está compuesto por siete
millones de piezas. ¿Qué si todos pensaran que su pieza no cuenta? ¿Qué si
todos pensaran que sí cuenta?
Ustedes hacen una diferencia créanlo
o no. Su pieza contribuye a darle forma a ese rompecabezas en su totalidad,
aunque sientan que no es así. Ustedes no tienen que hacer nada
espectacular. Como me recordaba mi tía ayer ‘son las pequeñas cosas y son todas
las pequeñas cosas’. Es esa palabra, esa firma, esa sonrisa, ese paso, ese
abrazo. Una pequeña cosa para ustedes puede serlo todo para el otro.
Reafirmamos nuestra gratitud y
aprecio por la vida cuando experimentamos las tragedias y los accidentes.
Reafirmamos nuestro deseo de vivir más amorosamente, de amar con mayor
profundidad, de estresarnos menos y de dejar de juzgarnos tan críticamente.
¿Qué de esas situaciones negativas potenciales que no conocemos? Es razonable
asumir que hemos tenido muchas. Es razonable asumir que el planeta ha tenido
muchas. ¿Son ellas merecedoras de
esa misma gratitud y aprecio? ¿De la misma pasión, amor, cuidado y compasión?
Por supuesto que sí.
Al escribir pienso en ese dicho de
quienes adoptan una buena actitud hacia el envejecimiento. Preguntados cómo se
sienten ante el envejecimiento contestan “es mejor que la alternativa”. Al
mirar alrededor del planeta hoy con todos sus problemas, podemos ver que no es
perfecto. Pero todavía estamos
aquí. Y hay tanta belleza. En la
gente, en la naturaleza, en los animales, en las causas, en las ofertas
creativas, en la propia vida. Tanta belleza a pesar de nuestros asuntos
personales y los globales. Nuestros problemas no nos definen, tampoco deben ser
ignorados. No son marcadores del fracaso, ellos son los que resaltan aquello
dentro de nosotros y a nuestro alrededor que busca transformación. Podemos utilizarlos
como catalizadores para el cambio, como guías que nos indican qué necesitamos
cambiar, abordar, apoyar, amar y atender.
Cuando ocurre una tragedia todo su
mundo cambia incluyendo su perspectiva con respecto a lo que es o no es
importante en su vida. Una situación así los hace preguntarse “¿Qué están
haciendo con su vida. Son felices
con todo. Aprecian lo que tienen?”.
Obviamente es preferible tener un
llamado así de alerta que tener que experimentar la alternativa. ¿Qué si eso es
lo que hemos recibido y no nos hemos dado cuenta? ¿Qué si nos despertamos una
mañana, sintiendo nuevo aprecio por estar aquí en la Tierra pero sin estar
seguros de por qué? Muchos se han sentido así en los últimos años. ¿Qué si se
debe a que la vida en la Tierra pudiese haber tomado una dirección pero no lo
hizo, y aquí estamos todos en esta realidad? ¿Lo sentirían ustedes a algún
nivel?
Las actuales condiciones en la
humanidad, en las sociedades, dentro de las comunidades y dentro de nosotros
mismos están lejos de ser perfectas, lejos de un mundo en el cual la mayoría de
nosotros tiene en sus visiones como más ideal. Nuestro cambio en conciencia no
es y nunca ha sido una tarjeta de ‘salir de la cárcel gratis’. Es una
oportunidad, una invitación, un llamado, un impulso, que nos pide y nos
compulsa a crear ese ‘algo mejor’ que sabemos posible. También actúa como un
limpiador de los lentes a través de los cuales lo vemos todo. Podemos ver con
mayor claridad, actuar con mayor sabiduría. Podemos sentir más desde el
corazón, actuar con mayor compasión.
Las personas se preguntan: ¿Cómo un
cambio en conciencia cambia el mundo real? ¿Qué efecto tiene por ejemplo, sobre
las compañías que colocan las ganancias y el poder por encima de la ética y la
salud de los consumidores? Aquí está el asunto: la conciencia, cuando se
experimenta por parte de los humanos físicos en un planeta físico, conlleva a
un pensamiento y acción inspirados.
Como un ejemplo, nuestras prácticas
de cultivo y los alimentos consumidos por gran parte del mundo occidental son
insostenibles a muchos niveles, particularmente desde el punto de vista
ambiental y sanitario. Millones de personas sienten la urgencia, sea interna o
externa, hacia una forma más natural de alimentarse que esté en mayor armonía
con nuestros cuerpos y con el planeta. Cada vez más personas desean cultivar
sus propios alimentos, cocinar con ingredientes naturales, y comprar en granjas
locales que producen alimentos orgánicos.
Muchos han previsto el cambio que
ocurre ahora dentro de los alimentos, la salud y el bienestar, sin embargo se
desconoce qué es lo que dispararía un cambio masivo de esas proporciones. Una
realidad paralela alterna pudiese haber creado una situación que provocara la
caída de las rejillas de poder a nivel global, y que forzara definitivamente a
todos a comenzar a vivir en una forma más sencilla, reconectados con el apoyo
comunitario que nos rodea. El hecho de que algo que no sea un apagón global
durante tres años, un escenario potencial considerado por videntes y científicos,
y que preocupa a muchos, tiene que decirnos algo.
Si siempre hubiese existido este
objetivo como destino y aquí estamos avanzando hacia el mismo por el sendero A
en lugar del B, ¿no es esa una buena señal? En lugar de cambiar debido a un
evento global dramático, al parecer existen otras influencias que sacuden
nuestra conciencia – visibles e invisibles, físicas y no físicas. Sigue siendo
un viaje azaroso, existen todavía circunstancias complejas para muchos, pero
cada día más personas tienen la mentalidad de ‘todos a la vez’ colaborando y
ayudando dondequiera que puedan. Nuestra nave tierra no se ha hundido, y si
alguien piensa que somos una nave que se hunde, bien, ¡que tome un balde y
ayude a sacar el agua!
Aquí tenemos lo que se está
hundiendo: la matriz del viejo mundo colapsará, y está colapsando, no tanto
porque los que estén dentro de ella tengan una súbita crisis de conciencia o
porque ocurra algún milagro o desastre global del día a la noche. Probablemente
colapsará porque una por una, la gente se está desconectando de lo viejo de una
forma u otra. Esto no significa que podamos dejar atrás los aspectos más
difíciles de la vida navegando hacia la puesta de sol. Significa que ya no
aceptamos que se nos diga cómo tenemos que pensar, cómo vivir, a quién tener
miedo, a quién ayudar y a quién ignorar. Nos estamos desconectando de un
sistema de control masivo, y reconectándonos con nuestra propia fuente de poder
interior, conectada a su vez con nuestra Fuente mayor.
La enormidad de lo que necesita
cambiar a nuestro alrededor puede parecer aplastante, pero si están leyendo
esto tienen que haber sentido lo que significa estar conectados a su corazón, a
su verdad, a la voz de su alma. Esto cambia la forma en que ustedes viven de
manera cotidiana. Cambia sus elecciones y decisiones. Les brinda un enorme
poder con respecto a lo que eligen hacer con su pieza del rompecabezas.
Imaginen ese poder multiplicado millones y eventualmente billones de veces. Su
luz ayuda a la pieza del rompecabezas próxima a ustedes a que vea su propia
luz, y así sucede como el dominó en reversa, levantando cada pieza una por una,
cada vez con mayor rapidez.
El auto cuidado y la compasión comunitaria
Se siente que el 2016 se enfocará en
el auto cuidado y la compasión comunitaria, de lo cual empezamos a ver más.
Estamos viendo cambios masivos que
hacen que las personas se alimenten y vivan vidas más saludables, limpias y
naturales.
Vemos más campañas y movimientos que
buscan terminar con la violencia doméstica, que entienden y apoyan los
problemas de salud mental, que buscan la igualdad para todos independientemente
del género, sexo, raza o religión, que demandan la justicia contra el abuso
sexual, le brindan asistencia inmediata a los refugiados, incrementan su
percepción de los derechos de los animales y ambientales, entre un millón de
otras iniciativas que se manifiestan ahora en todo el mundo.
Todo lo anterior ha venido
sucediendo durante décadas entre individuos y grupos en las comunidades. La
diferencia ahora sin embargo radica en que toda esta compasión comunitaria y
auto cuidado está en primer plano, al igual que un video se vuelve viral. Se
está convirtiendo en nuestro nuevo normal.
¿Cuáles son las tres cosas (o más)
que ustedes se inclinan a hacer respecto al auto cuidado, cosas que saben que
siempre los hacen sentir bien?
Escriban estas cosas en un pedazo de
papel y colóquenlas en la pared o en la carátula de su diario, o en algún sitio
donde puedan revisarlas regularmente. Este no es un ejercicio de Resolución de
Año Nuevo. Es más como un recordatorio gentil hacia sí mismos, algo a notar de
vez en cuando al salir de su habitación o al abrir su diario. Es como un
pequeño y callado impulso desde su Alma cada vez que ven su lista para
recordarles lo que su Yo necesita.
¿Cuáles son los tres asuntos
sociales o globales a los que quisieran dedicar una contribución positiva?
Escríbanlos. Establezcan una
intención de buscar formas en este año de hacer una diferencia en esas áreas.
Una de mis hermanas tiene pasión por los animales, siendo los orangutanes uno
de sus favoritos. Ella hace un esfuerzo dedicado al no comprar productos
contentivos de aceite de palma, ya que su producción contribuye directamente al
rápido declive de nuestra población de orangutanes. Son las pequeñas cosas. Por nuestra cuenta no podemos cubrirlo
todo, pero podemos escoger unas cuantas cosas por las cuales sentimos pasión
para hacer nuestra pequeña contribución.
El año 9 en un ciclo
de 9 años.
El 2016 es un año 9, que se asocia a
menudo con la finalización de un ciclo numerológico, pero en un año 9 también
vemos los comienzos de lo que será el próximo ciclo de 9 años. En una visión a
‘vuelo de pájaro’ del período 2017-2025, veríamos posiblemente una continuación
e incremento en la tendencia de la gente a la desconexión del sistema, a
volverse más soberanos, libres, empoderados y auto sostenibles/localmente
sostenibles.
El incremento del empuje hacia
juicios de ley marcial y cierre de ciudades bajo la excusa de protección, en
respuesta a una amenaza fundada y alimentada por nuestros ‘protectores’ es
predecible, energéticamente y en todo lo demás. ¿Qué hace la vieja energía
dentro de ustedes cuando ustedes se comprometen con un hábito nuevo? ¡Ella se agita, se rebela, resiste, se
enoja! A nadie le gusta perder el
control, a ningún aspecto dentro de nosotros y ciertamente a ningún mega-cuerpo
fuera de nosotros. Y aquí es donde estamos. El control sobre nosotros por una
parte, y la reclamación de nuestro poder y nuestra libertad de la otra.
La evolución de la humanidad siempre
ha jugado este juego. Miramos hacia atrás en la historia y vemos a los
controladores controlando y siendo derrotados. La sociedad reprimida, luchando por su
libertad. Hemos ido de ciclo en ciclo. Eras diferentes. Países y culturas diferentes.
El mismo baile. Sólo que ya es
hora de detener el disco rayado. Estamos tan acostumbrados a vivir sin nuestro
poder y libertad que hemos llegado a creer que así es como un humano debe vivir
la vida en la Tierra
Imaginen la época en la cual este planeta
tenía pleno acceso a todos los canales del universo, de forma que todos aquí
sabíamos exactamente quienes éramos como raza, sabíamos de donde veníamos,
sabíamos que había otros seres en otros planetas en otros sistemas estelares, y
sabíamos de lo que éramos capaces como seres multidimensionales.
Imaginen que en ese tiempo se colocó
algo en este planeta. Un tipo de cúpula de cristal o red, para que tuviésemos
acceso limitado, o ningún acceso a esos otros canales. Imaginen tener un
solo canal en su tv y eso es todo lo que han conocido. Piensan que así es
cómo es, y cómo siempre será.
Imaginen que con el tiempo, esta
cúpula de cristal, esta red, comenzara a disolverse. Y que unos pocos aquí y
otros allá comenzaran a tener acceso a más canales. Y así más y más personas. Y así más y
más canales.
Las personas sin canales o que no
tuviesen acceso a ciertos canales mirarían a los que afirman tener otros
canales como si estuviesen locos. Solamente sabemos lo que sabemos, y lo que no
sabemos puede sentirse imposible. O puede inspirarnos. “Bien, si él tiene el
canal de los deportes, quizás haya un canal de deportes y si lo hay, ¡yo quiero
ese canal también!
Al avanzar a lo largo del 2016
comenzaremos a tener el sabor de las energías del tema de los próximos 9 años
del 2017-2015. ¿Cómo se vería el mundo sin la cúpula o la red, o dónde ésta sea
tan delgada que parezca que no está allí? ¿Cómo se vería el mundo donde la
mayoría tiene acceso a los canales de frecuencia superior que nos permitan
recordar quienes somos, y vivir como intentamos vivir aquí: con libertad y
poder?
Vamos a ver a qué se parece esto –
no como un concepto intangible de conciencia, sino como cantidades
incrementadas de ejemplos tangibles de aquello a lo que se parece la conciencia
en acción.
Vivan apasionadamente
Amen profundamente
Reclamen su poder y su libertad
Aprecien lo que tienen
Actúen compasivamente
Practiquen el auto cuidado
Deseándoles a todos un año en el
cual sean amables consigo mismos y con los demás, uno en el cual ustedes
desplacen el dial de la luz de su parte del rompecabezas al máximo.
Mucho amor,
Dana
© Dana Mrkich 2016. Se
permite compartir este artículo gratuitamente siempre que se acredite la autora
y se incluya la URL www.danamrkich.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario