Festival de Virgo, 2020
Steve Nation
Saludos amigos y bienvenidos a esta meditación de servicio mundial en el Festival espiritual de Virgo.
Nuestro trabajo unido con estas meditaciones mensuales es una preparación para lo que la profecía sugiere que será una Nueva Religión Mundial. Los cambios en la relación cíclica de la Tierra con el Sol se reflejan en el ritmo lunar de la luna llena y la luna nueva (con eclipses ocasionales), así como en los solsticios y equinoccios; y se predijo que estos ritmos emergerán como una fuerza unificadora en la vida
religiosa de la humanidad. Es interesante considerar un tiempo futuro en el que los fieles de diferentes tradiciones y comunidades se reúnan para hacer rituales, meditaciones y para orar y adorar durante estos períodos del calendario solar y lunar.Hay algunas señales de que esto está sucediendo: por
ejemplo, el movimiento Global Silent Minute
coordinó en el solsticio del 21 de diciembre del año pasado el
lanzamiento de un enfoque en un momento global de silencio compartido durante
la reunión que programó Lucis Trust para celebrar la Semana del Festival del
Nuevo Grupo de Servidores del Mundo. Después, el 21 de junio de este año, de
nuevo se observó con cinco minutos de silencio en todo el mundo, y lo mismo se
hará a finales de este mes, el 21 de septiembre, cuando se prestará especial
atención al 75o aniversario de las Naciones Unidas,a los Objetivos de
Desarrollo Sostenible y al Día Internacional de la Paz de las Naciones Unidas.
Podemos ver esto como una evidencia de que la relación cíclica entre el sol, la
tierra y la luna está influyendo
en el ritmo de la vida espiritual en el tiempo y espacio de nuestro mundo, y
podemos esperar que esto
sucederá cada vez con mayor frecuencia.
Por supuesto, es importante señalar que, desde la
perspectiva científica y cosmológica del esoterismo, el ritmo lunar es
significativo sólo porque ofrece una evidencia de la relación entre la Tierra y
el Sol y con la red de interacción de las vidas planetarias que constituyen el
sistema solar y las constelaciones estrelladas de los cielos. La luna, después
de todo, está llena y es una luz dominante en el cielo nocturno porque está
iluminada por la luz del sol y no por una luz que emana de la luna misma.
Para quienes participamos con regularidad en las
meditaciones de luna llena puede ser fácil olvidar la semilla que estamos
sembrando y nutriendo para el futuro mediante la regularidad misma del ritmo de
este trabajo. Por lo tanto, es útil tratar de imaginar lo que será vivir en un mundo
donde un gran número de personas se reúnan a través de una diversidad de
prácticas religiosas durante el período de luna llena. Es claro que en un
futuro así, la religión tendrá una fuerte presencia en la vida social y
espiritual. Este ritmo energético no requiere que todos compartamos las mismas
prácticas. Me gusta imaginar las iglesias locales, los templos, mezquitas y
lugares de culto llenos con todas las comunidades del planeta al mismo tiempo
que millones de personas se reúnen durante los 5 días del ciclo de luna llena
para participar en diversas prácticas compartiendo una aspiración y
acercamiento hacia lo divino.
En cierto nivel no es difícil imaginar que las
actividades durante las lunas llenas y nuevas y los solsticios y equinoccios,
ayudarán a enfocar, unificar y coordinar energéticamente la aspiración de la
humanidad. Sin embargo, a otro nivel también podemos esperar que el despertar
de un espíritu religioso global produzca una mayor tensión espiritual en la
mente de los intelectuales durante el período de luna llena. Imaginen a los
pensadores inteligentes y a los trabajadores esotéricos de todas las
tradiciones compartiendo de manera más consciente una invocación mundial
concentrada y generalizada a la Jerarquía de los Seres de Luz y Amor durante la
luna
llena. Imaginen, por ejemplo, las reuniones que cabría
esperar se lleven a cabo en todos los colegios teológicos del mundo. Sin duda
podemos esperar que a medida que continúe el paso hacia Acuario, habrá muchos
de esos lugares de aprendizaje y de estudio, así como habrá Escuelas de
Misterio probatorias y avanzadas, nuevos monasterios, comunidades y centros de vida
espiritual. La imaginación es una de las herramientas más poderosas que podemos
utilizar para nutrir las semillas de las posibilidades futuras. Por lo tanto,
este ejercicio de imaginación se puede emprender con propósito y dedicación.
Mes tras mes, año tras año y década tras década, los
estudiantes de la sabiduría eterna se han estado reuniendo para cumplir con
este ritmo de meditación grupal para el servicio mundial durante el período de
luna llena. Es algo así como el ritmo de la respiración grupal alineado con el
ritmo del aliento del Gran Ashrama y del aliento del Logos Planetario. Así que
esta noche estamos entrando en un campo de la mente grupal enfocada y llena de
corazón, la cual tiene sustancia y está bien establecida. ¿Podemos imaginar por
un momento la vida y la presencia de este cuerpo de actividad humana plena de
propósito, llevada a cabo a través del tiempo por individuos y grupos en el
mundo espacial de la vida física? Imagínense a los pequeños grupos reunidos
para trabajar con este ritmo ayer, hoy y mañana... y en tiempos del coronavirus
imaginen todos los grupos ZOOM reunidos para este trabajo ... y piensen en las
dedicadas personas que se encuentran sentadas en la privacidad de sus propios
hogares ... todos
contribuyendo al enriquecimiento del campo palpitante
de la vida grupal en el plano mental, trabajando con las leyes de invocación y
evocación al servicio de los Planes mayores de Dios.
Alineados con todos los verdaderos pensadores
esotéricos de todas las tradiciones podemos imaginar que, al trabajar con esta
meditación de luna llena, somos parte de un enfoque humano compartido hacia los
mundos superiores y hacia el gran corazón de la vida planetaria.
Es un acercamiento al núcleo mismo del Ser, a la
morada del Cristo y los Maestros de Sabiduría y Compasión de todas las
tradiciones.
Podríamos llegar a pensar que ese enfoque interior de
cierta manera está separado de todas las cuestiones que están ocurriendo en la
comunidad humana en este momento: el coronavirus, la crisis económica, las
crisis en todos los ámbitos de la vida, desde la educación hasta las relaciones
raciales, la salud y las perturbaciones en la psique. Pero en la medida en que
el grupo de meditación sea sensible y se preocupe por el corazón atribulado de
la humanidad, es este corazón atribulado el que el grupo eleva para recibir las
energías curativas del mundo superior; este corazón perturbado de la humanidad
es el que se lleva a un alineamiento con la Jerarquía.
La radiación de amor que fluye del Cristo y de los
Maestros de Sabiduría y Compasión durante el tiempo sagrado de la luna llena
tiene el poder de sanar y transformar. A medida que esta radiación llega a la
mente y a los sutiles reinos energéticos del tiempo y el espacio, inspira, energiza
y sostiene toda iniciativa creadora a través de la cual se está realizando el
Plan de Amor y de Luz.
¿Podemos hacer una pausa con este pensamiento por un
momento y luego pronunciar la Afirmación de un Discípulo? ¿Y podemos hacer un
esfuerzo especial para utilizar juntos esta afirmación, como grupo? La
Afirmación afirma que “soy un punto de luz” y así sucesivamente.
Esto puede dar lugar a una tendencia a centrar la
atención en el ‘yo’ personal y en el propio viaje espiritual privado. Usar esta
afirmación como grupo significa identificar el “yo” como el grupo; como una
identidad grupal singular, un grupo de discipulado cuyo poder es mayor que el de
la suma de los individuos separados que estarían implícitos en la palabra
‘nosotros’. Así es que en la imaginación y en el símbolo, podemos imaginar que
el grupo se eleva a fin de “permanecer” como si fuera un ser fusionado.
Ese gran principio femenino del tiempo y espacio, los
tres mundos de la personalidad, el mundo manifestado que vemos alrededor, ocupa
una parte central del enfoque del grupo en Virgo. Muy a menudo la materialidad
del mundo y la materialidad del ser humano encarnado se consideran como si
estuvieran separadas y en oposición a la abundancia iluminada que se encuentra
en su interior. La experiencia del alma y la personalidad como dualidad domina
gran parte del viaje espiritual. Esta es una parte necesaria del Sendero. Los
dos deben estar separados para lograr la misión de la individualización y la
preparación del camino hacia la integración y la fusión definitiva entre el
alma y la personalidad. Esto es inherente a un sistema de cuarto rayo donde los
pares de opuestos están en una relación dinámica, donde a veces compiten entre
sí oponiéndose unos a otros antes de poder alcanzar el equilibrio adecuado y que
el espíritu pueda irradiar a través de la materia.
Virgo nos da otra perspectiva sobre la dinámica
alma/personalidad con su mensaje “Cristo en ti, esperanza es de Gloria”. En
esta frase clásica de la Biblia, Cristo se compara con el feto, particularmente
cuando llega el momento en que se sienten sus movimientos – la “esperanza de
Gloria”-; mientras que la personalidad se compara con la madre embarazada,
respondiendo a los movimientos musculares cada vez más insistentes de la nueva
vida en su interior. Si no se nutre y se cuida durante el tiempo requerido
dentro del cálido abrazo oscuro del vientre de la madre, no habría nacimiento;
ninguno de nosotros estaría aquí en el tiempo y el espacio y no habría
“esperanza de Gloria”.
Las energías de Virgo nos animan a meditar acerca de
esta interdependencia en la relación entre el alma y la personalidad; ambas se
necesitan una a la otra. La evolución y todos los planes de Dios para que la
Tierra se convierta en un Planeta Sagrado dependen de la relación entre el alma
y la personalidad. La “esperanza de Gloria” o las posibilidades futuras
predichas por las enseñanzas espirituales, requiere que la conciencia del alma
esté incrustada dentro de la personalidad durante todo el tiempo que sea
necesario. En lugar de que los tres cuerpos de la persona sean el enemigo del
alma, la realidad es que proporcionan el ambiente necesario para el alma
mientras se prepara para cumplir su propósito de convertirse en el factor que forma
y define el mundo. La personalidad proporciona los límites de la experiencia
humana en el tiempo y el espacio dentro de la cual el mundo de la realidad
espiritual echa raíces y encarna.
Sin la resistencia de la personalidad, las fuerzas de
la luz serían relativamente impotentes en el mundo, estarían perdidas, sin
tener el conocimiento del idioma o la cultura o de cualquiera de las normas del
mundo del tiempo, del espacio, del deseo y de la materialidad. El ser humano está
destinado a revelar y crear los nuevos recipientes necesarios para contener el
vino del espíritu. Virgo nos recuerda este proceso mayor del que formamos
parte.
El símbolo universal del signo apunta al nacimiento
virginal, enfatizando el significado que se encuentra en lo que el mitólogo
Joseph Campbell denomina como
“el nacimiento de la vida espiritual en el animal humano”.
Sin embargo, como sabemos, hay algo más que la
historia del camino espiritual individual. Virgo representa las cualidades
sustentadoras de lo femenino y de la Diosa y su papel en la evolución de la conciencia.
El tiempo y el espacio, la tierra y la materialidad, actúan como un útero, como
un recinto dentro del cual se desarrolla y madura la conciencia que se prepara
para las dolorosas horas de las pulsantes crisis que conducen al nacimiento y
al surgimiento de la nueva vida.
Más allá de la persona, esta imagen del ‘Cristo en ti’
ofrece una poderosa manera de entender el amor que subyace a los
acontecimientos de la época. Particularmente en tiempos como estos: Tiempos
interesantes, caóticos y llenos de crisis en los que todo parece estar agitado
y el significado puede ser difícil de discernir. Algunas de las primeras
enseñanzas espirituales hacen eco de la idea de que es en esos tiempos cuando
ocurre un Nacimiento virginal. Como el Gita famosamente señala: “Siempre que haya un debilitamiento de la ley y un
crecimiento de la ilegalidad en todas partes, entonces Me manifiesto ... Yo vuelvo a nacer edad tras edad”.
Tiempos como estos son tiempos de esperanza, tanto
porque dirigen nuestra atención a lo que está por venir, pero tal vez lo más
importante, porque evocan la voluntad de emplear nuestro pleno potencial
creador utilizando nuestro tiempo con sabiduría en la construcción de bases sólidas
para lo nuevo. Es un poco como cuando los padres prepararan la habitación para
el nuevo bebé y para la reinvención de sus vidas, no siendo ya dos individuos
que se conocen y establecen su relación; ahora enfrentan la responsabilidad de
cuidar a un niño y de aquello que vendrá después de la crisis que marca la
transición del parto y el nacimiento. En la matriz del tiempo y el espacio, el
Cristo que está a punto de emerger ha crecido y se ha vivificado en la
oscuridad oculta de un mundo atrapado entre la separación y el sentido de totalidad.
El espíritu crístico ha sido estimulado el corazón humano. Los servidores
iluminados dentro del Grupo de Servidores del Mundo están siendo influenciados
colectivamente por la
vida y el espíritu crístico. Y ahora es como si el
trabajo de parto hubiera comenzado en serio, lo que las parteras denominan ‘el
trabajo activo’, el cual culminará en una fase de transición antes del
nacimiento. Trabajar con símbolos como éste no compagina bien con una visión
lineal del tiempo. El momento real del nacimiento, de la reaparición, no es
para que lo sepamos o especulemos. Lo que podemos saber sin embargo es que el
proceso de parto con seguridad está en marcha. Y esto es lo que puede darnos
esperanza.
El debilitamiento de la ley y el surgimiento de la
anarquía en nuestro tiempo pueden
entenderse como la desaparición de las normas que
rigen las relaciones. Por ejemplo, en los últimos años las normas establecidas
en la diplomacia se han visto sacudidas; las normas y estándares de las
relaciones raciales se están revelando como inaceptables a la luz del creciente
respeto por todas las vidas independientemente del color, la fe, la cultura o
el idioma. El reconocimiento de que algunas vidas importan más que otras está
minando las normas existentes... dejando a muchos confusos, desesperados y
deprimidos y a otros con un fuerte sentido de misión para ser parte de la
conformación de las nuevas normas. De manera similar, el reconocimiento de que
los animales, las plantas e incluso los minerales tienen un valor intrínseco y
que valen más allá de su utilidad superficial para la humanidad, está
invalidando las normas establecidas de nuestra relación con la tierra. Las
nuevas normas aún no han nacido en
la mente y el corazón de las comunidades humanas, de
las naciones y de los pueblos ... pero claramente están tomando forma en estos
interesantes tiempos ... y nos recuerdan que el Cristo en Ti no es sólo una
esperanza de gloria, sino también una clara señal de lo que está por venir.
En estos tiempos, es como si el trabajo activo de
parto, con todas las dolorosas contracciones experimentadas por la madre,
proporcionara una metáfora apropiada. Antes del trabajo de parto, el instinto
de las madres ha sido sostener, proteger, nutrir y cuidar la vida que crece dentro
de ellas. En el trabajo activo de parto (las etapas finales que en las salas de
parto llaman ‘transición’) la tarea de las madres es cooperar con el impulso
que el bebé tiene por nacer. El nacimiento es un asunto desordenado. Y así es que,
si miramos demasiado a la perturbación en el mundo, podemos perder de vista los
acontecimientos más profundos de este tiempo y la anticipación y preparación
para las nuevas normas que están naciendo – y la reaparición que se puede
esperar que surja.
Con esto en mente, parece que uno de los servicios más
útiles que los esotéricos pueden proporcionar mientras observan los
acontecimientos de la época, es desarrollar un ojo que pueda discernir;
aprovechando las habilidades, intereses, educación y experiencias profesionales
desarrolladas a través de nuestras diversas vidas, cada uno puede identificar
las normas acuarianas que están en proceso de emerger en este momento. Podemos
esperar que haya muchos – y podemos esperar que provengan no sólo de una
perspectiva particular (‘progresista’ o ‘conservadora’, por ejemplo) o de una
cultura o nación o grupo religioso en particular –sino desde el interior de
diferentes perspectivas como normas que garanticen un avance correcto que vaya
tomando forma en campos tan diversos como la ley y el orden, la psicología, la
resolución de conflictos, la superación de las desigualdades económicas en las ciudades,
las naciones y las regiones, la educación de los niños y adultos y otros. Las
normas son diferentes según los medios o formas que adoptan en diferentes
entornos. Se pueden asemejar más a un propósito común compartido o a un sentido
de dirección o de ideas sobre las normas de comportamiento. Por ejemplo, en la
Enciclopedia de Filosofía de Stamford las normas sociales se definen como “las reglas informales que rigen el comportamiento de los grupos
y sociedades”.
Gran parte del tema Virgo nos lleva a
reflexionar sobre la naturaleza y el valor del tiempo y de la experiencia en
esta transición entre las eras de Piscis a Acuario. Olvidamos que el paso entre
dos conjuntos de normas dominantes lleva tiempo, pasando por crisis, momentos
de pausa y descanso similares a las del signo de Libra, cuando los cambios en
la conciencia pueden penetrar en las raíces del ADN y en las estructuras
glandulares. Se necesita tiempo para que la sustancia del deseo en la vida de
las naciones y de los pueblos sea remodelada y reorientada.
Con el nacimiento final de lo Nuevo todo
parece cambiar repentinamente, pero eso sólo sucede debido a todo lo que ha
ocurrido antes. No percibimos los cambios subterráneos que se han ido produciendo,
de modo que cuando por fin el trabajo de parto nos sobrevenga a todos como especie,
podremos sorprendernos, sin darnos cuenta de cuánto progreso se ha hecho.
La idea a la que debemos aferrarnos aquí
es al papel de la voluntad. DK se refiere a la cualidad de la voluntad sustentadora de segundo Rayo de la Madre, ya que la oculta vida Crística es protegida,
cuidada y nutrida durante muchas vidas mientras está entretejida en el triple
mundo de la personalidad. La gestación da su fruto en el momento del
desordenado trabajo del parto.
En efecto, desde una perspectiva
metafísica, el nacimiento del Cristo-Niño también marca la muerte de la
relación entre la Madre y el Niño: el momento en que el Cristo-Niño surgirá liberado en la luz de la materia de la matriz
del tiempo. Y todo esto sucede (evolución, transformación,
surgimiento hacia las normas de la Era Acuariana), nos dice DK, debido principalmente
a “la voluntad sustentadora de la
Madre, más la voluntad dinámica del Cristo-Niño”. [Astrología
esotérica, p. 627 ed. inglesa] Al observar el mundo en nuestro tiempo, puede ser
útil tener en cuenta estos dos aspectos de la voluntad: el empuje
exteriorizador de la Jerarquía de Luz y la capacidad de los tres reinos de la
personalidad para mantenerse firmes, seguir adelante y mantener las cosas sin
interrupción. La Madre tiene estas notables cualidades de mantener cierto
semblante de normalidad incluso en medio de las náuseas, el malestar, la ausencia
de certezas y el desorden que acompañan el nacimiento de lo nuevo.
En conclusión, algunas palabras de
Joseph Campbell parecen especialmente apropiadas:
En alguna parte
leí sobre una antigua maldición china: “¡Que nazcas en un momento
interesante!”
Este es un momento MUY interesante: no hay modelos para NADA de lo
que está
pasando. Es un período de caída en picada en el futuro, y cada uno tiene que
hacer su propio
camino. Los modelos antiguos no funcionan; los nuevos aún no han
aparecido. De
hecho, somos nosotros los que incluso ahora estamos dando forma a lo
nuevo en la
configuración de nuestras interesantes vidas. Y ese es el sentido (en términos mitológicos)
del desafío actual: somos los ‘antepasados’ de la época venidera, los generadores
involuntarios de los mitos que los apoyarán, de los modelos míticos que inspirarán
sus vidas".
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