Del muro de
Amanda Lorence:
MOSTRADORES DEL CAMINO:
DENTRO DE ESTE MASIVO PROCESO DE ASCENSIÓN COLECTIVA DE LA
HUMANIDAD:
EL VELO:
Es tu propia encarnación de tu PROPIA CONCIENCIA individualizada, que entonces experimentarás que NO HAY NINGÚN VELO. Esto sucederá uno por uno en el momento perfecto de cada uno. Estamos EN esta LÍNEA DE TIEMPO. Una Línea de Tiempo de cierta longevidad para que muchos lleguen en su propio tiempo. No hay prisa... no hay presión. Es lo contrario, el SOLTAR continuo, una y otra vez...
Desde este nuevo estado INTERIOR, eres testigo de la realidad
holográfica Y DE TU NUEVO MUNDO desde DENTRO. Desde un ESTADO INTERIOR de AMOR.
Tu mundo INTERIOR emana y ES desde donde procedes en todo momento. Amor por
todos y por todo. Porque has encarnado plenamente el Amor de Dios...
Ves todo a través de los ojos del Amor de Dios. SIENTES todo a
través de la experiencia del Amor de Dios. La energía de Dios es... AMOR.
Encarnado a varias octavas del Amor, para infinitas experiencias de SÍ Mismo.
SENTIR LA ESENCIA DE DIOS:
Como parte del proceso de ascensión (o iluminación), llega una
etapa de encarnar la ESENCIA de Dios. Se siente como una vibración particular y
ÚNICA. Sólo se siente cuando se está EN un estado de sentir AMOR. Eso es una
etapa de sentir y encarnar la esencia de Dios. Y tu enfoque está entonces en
sostenerlo y hacer crecer ese sentimiento hacia todas las cosas fuera de ti.
VER LA ESENCIA DE DIOS:
Pero luego viene el VER físico. Donde VES la ESENCIA de Dios
en todo. Ya sea una persona, una botella de plástico, una flor, el cielo, un
bolígrafo con el que escribes, la ropa que llevas, los árboles, los animales,
la lluvia, el fuego, etc. Todo está hecho de lo mismo... la ESENCIA de Dios. La
cual ves físicamente. Ves que todo es UNA sola ‘cosa’.
EL VELO SE DISUELVE:
Después de acostumbrarte a esa etapa, el ‘VELO’ se disuelve
por medio de tu cambio a una experiencia de conciencia de MAYOR FRECUENCIA CON
un cuerpo físico. Experimentas AFUERA del ‘sueño’ o lo que la gente también
llama la ‘ilusión’, el ‘maya’ o la ‘realidad holográfica’. Eres menos
consciente del cuerpo, pero lo manejas y lo cuidas. Hablas porque la gente
espera esa forma de comunicación. Tal vez escribes en el lenguaje lineal tal y
como lo conoce la humanidad. Pero ya no te SIENTES HUMANO. SIENTES que eres
ENERGÍA de tu conciencia Y de tu ALMA como LUZ de mayor vibración que ves en y
alrededor de tu cuerpo físico.
Te conviertes en conciencia afuera de la ilusión. Por lo
tanto, el velo no existe. Experimentas como conciencia PRIMERO. Presenciando
casi una película que se desarrolla ante tus ojos todo el tiempo.
INTERACCIÓN CON LA ILUSIÓN:
Puedes interactuar ya que has CONSERVADO el CUERPO físico.
Al interactuar con la gente, ellos te ven a través de SUS ojos
y SU estado de conciencia. En esta ETAPA COLECTIVA, la mayoría de la gente te
verá como un ser HUMANO más. Por ahora...
Ellos no ven que has encarnado totalmente. No pueden, hasta
que también lo HAYAN hecho ellos. Sin embargo, tú los ves a ellos, y ves lo
DIVINO en ellos, DENTRO de tu propia ilusión autocreada. Pero ellos SÍ sienten
que hay algo en ti. Tú los afectas. Tienen autorrealizaciones, particulares a
su estado de conciencia y etapa del viaje de regreso a Dios. Ellos no pueden
definir qué es lo que les sucede exactamente cuando tú sostienes el espacio
para ellos, a través de tu estado alterado de conciencia, el Corazón del Amor
de Dios a través de tu interacción. Pero TÚ lo sabes, porque estás fuera de la
ilusión y eres CONSCIENTE energéticamente de lo que se le está otorgando a ese
ser frente a ti, a través de ti. TÚ los sientes PROFUNDAMENTE y con el inmenso
AMOR que hay dentro de ti. Tienes un ENORME sentido de compasión por haber
tenido la experiencia humana del sufrimiento humano. Tú realmente comprendes
todas las emociones y miedos humanos, pero no absorbes el de nadie, ya que
estás fuera de la ilusión. Te conviertes en el contenedor para que Dios trabaje
a través de ti.
Pero eres consciente de eso en CADA matiz de CONCIENCIA
ENERGÉTICA en tu nuevo Estado de Conciencia.
No hay que intentar. Ni siquiera hay necesidad de hablar. Sin
embargo, la gente sigue esperando que tú hables, porque están acostumbrados a
ese lenguaje de comunicación. Así que tú SABES lo que se necesita en ese
momento, para abrir su puerta. Se les transfiere una chispa de luz y se
enciende una luz que ya está DENTRO de ellos, aun cuando todavía no puedan
comprenderlo. Se sentirán diferentes. E intrigados dentro de lo que acaba de
suceder. Entonces, seguirán con su vida y su viaje, y tu trabajo estará hecho.
Tal es la belleza del Amor de Dios a través de ti. Porque es un Amor sin
palabras, un DAR de la energía del Amor de Dios. Desapegado de la ilusión. Tú
en esos momentos no deseas NADA. Tu alegría está en sentir el Amor de Dios
tejiendo su ENERGÍA a través de ti, hacia aquellos a quienes luego tocas. Tú no
buscas a las personas para ayudarlas, Dios las trae a ti ENERGÉTICAMENTE dentro
de tu PROPIO diseño. Todo está diseñado por Dios.
Uno por uno, el VELO de cada uno se levantará. A un estado sin
sufrimiento mental ni emocional. Porque has trascendido la experiencia humana
temporal del olvido. Un estado donde el Amor de Dios se siente, se ve, se
experimenta en todo momento. Y no sientes ninguna preocupación, pérdida ni
soledad, para que alguien a tu alrededor se reúna rápidamente contigo, porque
no hay tiempo en este ESTADO de ser. Sólo existe el AMOR ETERNO de DIOS. Su
existencia y la tuya es para siempre...
Un Amor
Amanda Lorence
11 de Septiembre 2022
Traducción:
Margarita Lopez
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