por cristinalaird
Ya estamos en el
último retrógrado de Mercurio que casi siempre ocurre en esta época y en el
signo de Capricornio. Como ya sabemos Mercurio, el planeta más pequeño de
nuestro sistema solar tiene un año de 88 días, por tanto, 3 ó 4 veces al año
pasa entre el Sol y la Tierra, produciendo esta ilusión que llamamos Mercurio
Retrógrado. Por supuesto que el planeta no retrocede en absoluto, pero al
pasarnos a más velocidad, debido a la rotación de la Tierra, parece como si se volviese
en grados hacia atrás. Eso periodo de pre-sombra que comienza en el grado de
Capricornio, hasta donde llegará Mercurio en retroceso, comienza el 1 de
Diciembre a los 28º Sag 50', luego se intensifica del 15 al 19 cuando se
estaciona Retrógrado, a 15º de Capricornio, comienza su aparente marcha
atrás. El 5 de Enero, justo antes de
Reyes, entra una vez más en Sag, y el 8 de Enero cuando llega otra vez a los
28º de Sag se estacionará directo y comenzará su vuelta hacia adelante, pero no
llegará a los 15º de Cap hasta el 28 de Enero, que es cuando podemos considerar
que se ha terminado este ciclo.
Así que 3 ó 4
veces al año, se nos ofrece la oportunidad de Re-pensar, Re-visar,
Re-considerar, Re-envisionar, Re-establecer, lo que sea que estemos haciendo o
planeando hacer. Es por eso que siempre tenemos esta impresión a principio de
cada año, que debemos Re-estructurar nuestra vida, tomar nuevas decisiones,
etc, etc.
Como todos los
ciclos planetarios, aunque cíclicos, nunca iguales. Este Mercurio Retrógrado es
particularmente definitivo, pues se estaciona justo en línea con Plutón a 1º de
órbita. Todo lo que se alinea con Plutón, como ya sabemos, demanda
transformación, cambio, purgarse, dejar ir, amputar de nuestra vida. Algo en el
"Colectivo" pide que nos Re-adaptemos a lo nuevo, que aprendamos a
evolucionar, a aceptar el movimiento colectivo sino queremos quedarnos atrás.
Con esto no quiero decir que todo el mundo se ponga a bailar hip-hop, o
convertirse en vegano. Pero sí respetar, el hecho que esto ha entrado en la
consciencia colectiva y que nos dice algo, del momento actual, de una obvia
manifestación del presente.
Como estamos
hablando del signo de Capricornio, tendremos que tener en cuenta los mensajes
de este signo. El símbolo de este signo es la cabra, y como una cabra de
montaña, el deseo es subir más y más en la vida y de a pie, para empezar, por
sí mismos/as. Esto demuestra la gran ambición de este signo. Se siente seguro
de sí mismo y establece metas elevadas. Se siente satisfecho cuando otros
respetan sus capacidades. No evitan tomar riesgos, pero no son muy temerarias.
Todas las acciones se ensayan antes de ponerlas en acción. Pueden ser muy
pacientes y tienen una necesidad de elevar su estatus en la sociedad. Hace
poco, miraba uno de esos magníficos documentales de David Attenborough, (que
son la mayoría de los documentales de animales y Naturaleza) que nació con el
Sol en Tauro en oposición a Saturno, casualmente, y miraba unas cabras de
montañas rocosas, con la facilidad que se movían, aún corriendo por esas
laderas perpendiculares que ningún humano atentaría a escalar sin cables y/o
zapatos especiales. Pues ellas corrían a toda velocidad en superficies
completamente perpendiculares y me recordaba la facilidad de los Capricornio,
de andar por las alturas.
Mercurio
Retrógrado-Plutón en el signo de la cabra nos da un impulso de ambición si no
lo tenemos, pero para aquellos que se hayan excedido en ella, puede resultar un
llamado de atención importante. Tendremos que Re-considerar nuestra posición
profesional, social, financiera, todos temas Cap. Buen momento para
replantearnos si estamos a la altura profesional que nos gustaría estar, qué
nos falta, qué nos sobra y sobre todo, qué es lo que queremos profesionalmente.
Donde caiga Cap, en tu carta astral, zona que ya estará afectada por el pasaje
de Plutón por allí, es donde todo este movimiento tendrá lugar.
Mercurio se
estaciona Retrógrado el día que Marte entra en el signo de Piscis y por
supuesto que considerando lo que está ocurriendo en Siria, puede ser un
importante llamado a los gobiernos y las clases pudientes, (aquellos de las
alturas), de tomar acción para ayudar a los habitantes de Aleppo. Marte se
alinea con Neptuno en Piscis el último día del año y qué buen momento para
recolectar ayuda humanitaria internacional para aquellos que están viviendo una
de las peores catástrofes humanas de los últimos tiempos, mientras todos
miramos esas imágenes por TV, impasibles.
El 26 y 27, justo
después de Navidad, Júpiter, todavía en cuadratura a Plutón se opondrá a Urano.
Esta oposición es parte de un ciclo que comenzó con la triple conjunción de
estos dos planetas entre 2010-2011, en el signo de Piscis. Ahora se oponen en
este ciclo que dura unos 13 años, en los signos de Libra y Aries. Claro está
que en el momento cuando esta primera oposición se forma, Urano en Aries está
acompañado de Eris y de Ceres y además Saturno desde Sagitario forma un trígono
a Urano y un sextil a Júpiter. Esta
oposición que nos confronta con lo que vivimos cuando la conjunción hace unos 6
años. Como todos sabemos esos fueron los momentos del comienzo del movimiento
de liberación llamado Primavera Árabe, cuando estos pueblos decidieron tomar el
destino de sus países en sus manos y quitarse de encima dictadores que estaban
sentados en el poder por décadas. Sin embargo en esta oposición nos encontramos
que aquel primer grito de libertad quizás no se realizó de la forma más
correcta y la inestabilidad reina en muchos de esos países. Esta es una
oportunidad más de revisar la situación y tomar las riendas de la libertad con
más sabiduría y aplomo.
Recuerdas que
pasaba en tu vida en el 2010-11? Toda combinación entre Júpiter y Urano, habla
de libertad, de liberarse de algo o alguien, de iniciar nuevos caminos, hacia
una existencia más libre de cadenas
auto-impuestas, por nuestra familia y la cultura de dónde venimos. Una
oportunidad más de detenerse a contemplar qué es eso que nos detiene, que no
nos deja ser feliz y tomar las riendas de nuestro destino, siempre con la
consciencia que hay muy pocas cosas que realmente podamos controlar. El dejar ir del control y rendirse a la
providencia es uno de los mejores caminos hacia la libertad interna. Júpiter y
Urano nos guían y animan a expandir nuestros horizontes de una forma renovada y
creativa, hacia algo diferente que nos permita experimentar todo lo que somos,
todo nuestro ser, en vez de esa imagen familiar y cultural implantada en
nuestra consciencia.
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