La energía que venimos manejando del mes de junio nos ha permitido ser pacientes y sobre todo a
cultivar mejor nuestras relaciones personales. La clave era saber equilibrar
ambas cosas y poder conseguir paz y bienestar en nuestro camino. Solo de esa
manera podríamos conseguir respuestas claras y reales al crecimiento que hemos
querido materializar. Tuvimos la oportunidad de enfocarnos con lo
verdaderamente importante, y, sobre todo, nos dio la oportunidad de reafirmar
que si podemos ser parte de algo y hacer un cambio que vaya desde el interior y
que termine de proyectarse en el plano exterior.
Julio es considerado el séptimo mes del año en el
calendario gregoriano. Originalmente este era el quinto mes del primitivo
calendario romano y se solía llamar Quintilis. En un principio,
comprendía 36 días pero luego fue cambiado a 31 días por Rómulo y
reducido a 30 por Numa, para luego señalarse finalmente los 31 días
que tiene ahora gracias a Julio Cesar; de allí recibe el
nombre de Julio, ya que durante ese mes en el día 13 nació el
emperador romano. Si hablamos de iconografía es de importancia señalar que este
mes es representado bajo la figura de un joven de carnes bronceadas por el sol
y con los cabellos coronados de espigas.
Desde la numerología, este mes nos refiere al número 7, el
cual está relacionado con el pensamiento, la espiritualidad, la conciencia, el
análisis y la sabiduría. Vibra con la profundad, el poder interior y la
dignidad personal. Bajo la energía de este número se desencadena una necesidad
innata de conseguir un mundo ideal. Las visiones, los posicionamientos de
nuestra mente se enfocan en hacer un mundo cargado de solidaridad y de ensueño.
Puede que bajo esta energía este mes provoque que nos aislemos de la
realidad, porque, en esa búsqueda de un mundo mejor, nos olvidemos de lo
que realmente sucede en nuestro entorno.
“Disfrutemos del proceso y aprendamos de
todo lo que nos rodea,
tienes que aprender a valorar los esfuerzos”
Si hablamos desde la tarología, este mes está marcado por la
cara del Triunfo VII, considerada esta como una de las cartas más
positivas del tarot. Esta carta habla de triunfos, éxitos, logros, obstáculos
vencidos, determinación, fe y, sobre todo, mucha sabiduría. Dota de energía,
claridad, vida y luz en medio de la oscuridad. Podríamos decir que, en
consecuencia, Julio es un mes para que tomemosconciencia
del poder nuestras acciones para que las enfoquemos hacia el cambio
que deseamos y de esa manera poder encontrar todo que nos propongamos.
En el campo de la astrología, tendremos un mes cargado de
una energía bastante interesante. Por un lado, tendremos el inicio Retrógrado
de Quirón en Aries, un suceso que nos ayudará a entender mejor nuestra
manera de ser, y la forma en cómo nos hemos venido proyectando a los demás. Así
mismo, tendremos por otra parte, el retorno de viaje Directo de Júpiter
en Escorpio, dotándonos de una energía bastante positiva que nos podría
permitir alcanzar bienestar en todo lo que hemos querido hacer, proyectos y
demás.
Otro suceso de gran relevancia durante este mes será el Eclipse
Parcial de Sol, un encuentro que nos ayudará a sanar ciertas cosas de
nuestro pasado y sobre todo a cerrar ciclos que no nos permitían fluir como
verdaderamente queríamos. Además de ello, comienza el segundo proceso Retrógrado
de Mercurio y será en Leo, este encuentro nos ayuda a trabajar nuestro
y nos permite conectar con nuestra energía humilde y sincera para
fortalecer mejor nuestras comunicaciones y relaciones personales.
Por otra parte, tendremos también el Eclipse Total de Luna un
encuentro que te permitirá mejorar tus emociones y fortalecer mejor tu carácter
y tú manera de conectar con las personas que te rodean. Es necesario que sepas
valorar eso para que puedas conseguir bienestar en tú camino, así mismo,
tendremos la Luna Llena en Acuario, una luna para la elevación
mental que te permitirá estar en sintonía con lo que sientes y deseas. Como
parte de esta energía, debemos tener en cuenta ciertos puntos:
1. Aprende a soltar todo lo que te hace daño.
2. No permitas que los demás afecten tu bienestar.
3. escucha el consejo de quienes te rodean.
4. Trabaja el EGO. A veces debemos bajar la cabeza.
5. Reconoce que no siempre tienes la razón.
6. Sal de la rutina y no te quedes anclado a lo mismo.
7. Disfruta de nuevas experiencias.
8. Evalúa los proyectos que tienes en mente.
9. Es válido detenerse antes de actuar.
10. No te aferres a lo mismo, tienes que reinventarte.
Julio, será un mes para que valoremos nuestras acciones y entendamos que cada
acción, por muy pequeña que sea, multiplicada en millones, pude hacer el
cambio. Es sencillo. Las cosas comienzan por nosotros mismos y, en el sentido
de trascender, encontramos una respuesta bastante básica, sencilla y muy
valiente, que nos ayuda entender que una de las cosas que debemos valorar
es el esfuerzo. Solo cuando logramos entenderlo, podremos conseguir cambios
más palpables en nuestro camino.
¡Feliz Julio para todos!
EDUARDO LUZ
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