Leo
es el signo más carismático de todos, su brillo no deja indiferente a nadie,
por lo cual le es muy difícil pasar desapercibido e indudablemente, si lo
hiciera, no estaría respondiendo a su naturaleza.
La
Luna llena que se aproxima tendrá lugar en este signo, el más ardiente de los
tres signos de fuego, el que exhibe la llama, luminosa y ardiente, proporcionándonos
su extraordinario calor y brillantez.
Tendremos
entonces una Luna intensa que además será protagonista de un eclipse lunar en
el grado 22 del signo.
Con
la Luna en Leo las emociones tienen un papel preponderante, tendemos a ser
más
efusivos y demostrativos de estas y necesitamos que, de alguna manera, sean
reconocidas por los demás, precisando más atención y muestras de afecto de lo
habitual.
También
solemos ser más generosos en nuestra afectividad, más cálidos, valerosos,
extrovertidos y creativos respecto a los contenidos de nuestro mundo interior,
siendo posible que nos sea más fácil transmitir a los demás nuestras
necesidades, carencias y emociones, así como todo el afecto, nutrición y
protección que somos capaces de dar.
Sin
embargo, al ser eclipsada pueden surgir con mayor facilidad emociones
reprimidas que, normalmente, suelen ser más oscuras, aflorando del inconsciente
la sombra de este signo; así, la generosidad de Leo puede tornarse en
egoísmo, la dignidad en orgullo y arrogancia, el brillo y el carisma en
ridículo, el honor en jactancia, la pasión en celos, etc.
Será
también más fácil sentirse ofendido o menospreciado en cuanto a nuestra
dimensión emocional y afectiva, o en asuntos relacionados con la madre, la
familia, la comida y/o el hogar.
Es
posible, así mismo, que sintamos que no somos lo suficientemente reconocidos o
que nuestros talentos son de alguna forma opacados, pudiendo afectarnos
emocionalmente por ello si no somos capaces de gestionar ese contenido egótico
de forma asertiva y creativa.
Sin
embargo, en esa sombra leonina que aflorará en esta Luna llena eclipsada
también pueden emerger emociones positivas muy intensas que estaban reprimidas
en nuestro interior y que, por algún motivo no eramos capaces de mostrar o,
incluso, experimentar.
Tal
vez podría tratarse, por ejemplo, de un sentimiento de dignidad que quedó
frustrado en la infancia o en algún otro momento de nuestra vida en el cual no
fuimos reconocidos, sentimos que no se nos tomaba en cuenta, que lo que
hacíamos no era importante, que no se nos expresaba afecto de forma evidente,
etc.
Obviamente
para hacer consciencia de esa dignidad interior que es importante integrar
hemos también hacer conciencia de esa frustración subyacente y ese sentimiento
de indignidad que lo eclipsaba y que nuestro niño interior ha de superar
a través de ese adulto que ha sido capaz de mirar dentro de sí como si de un
reto heroico se tratase, haciendo acopio del valor propio de este signo.
No hay nada más hermoso que sentir que somos capaces de conquistar
nuestro mundo interior con toda su luz y su oscuridad y este eclipse será una
buena oportunidad para que la inquieta y juguetona Luna en Leo se dé a la
tarea. Para ella descubrir sus ángeles y demonios puede resultar hasta
divertido si sabe honrar a cada uno como parte importante del fascinante
entramado de su mundo interior.
El
Sol además de prestar a la Luna su brillo será también, en este caso, su
dispositor, por ser regente del signo de Leo en el cual la madre celeste se
impondrá como una reina, eclipsada, pero reina al fin, haciendo gala de su
presencia.
Este
la dispondrá e iluminará desde el signo de Acuario, donde tuvo comienzo esta
lunación, invitándola a atender asuntos relacionados con la amistad, la
fraternidad, lo colectivo, la originalidad, lo inesperado, ya sea porque le
toque confrontarse o bien, por el contrario, colaborar de alguna manera con
estos, como corresponde a la naturaleza de la oposición que es el
aspecto en que se encuentran la Luna y el Sol cuando acontece la Luna llena.
Puede,
por ejemplo, que sean los amigos o algún amigo en particular, o quizás algún
grupo del que formamos parte, detonante/s de ese emerger de intensidad
emocional que podríamos experimentar con esta Luna, incluyendo esa poderosa
sombra emocional que se evidenciará como resultado del eclipse.
Esta
Luna llena formará parte además de una cometa cósmica junto al Sol en Acuario,
Saturno en Sagitario y Urano en Aries, este es un trígono sumamente creativo
que facilita, entre otras cosas, la dinamización del potencial creativo que
albergamos en nuestro interior con la ayuda de una planificación optimista y
visionaria y del impulso irrefrenable de la originalidad.
Igualmente,
es posible que experimentemos un repunte de sincronicidades que permitan que
nuestras necesidades o incluso nuestros caprichos se manifiesten, pero como
resultado del eclipse también podrían manifestarse situaciones inesperadas que,
de alguna manera, respondan más bien a pulsiones inconscientes, donde las
programaciones más profundas de esta egótica Luna queden al descubierto.
Por
si fuera poco, esta Luna también formará parte de otra cometa cósmica que
implica al igual que la anterior a Urano en Aries y Saturno en Sagitario, más
no así al Sol sino a Júpiter, el cual se encuentra aún en el signo de Libra,
así que, entre otras cosas, los sueños y proyectos en los que está implicada la
pareja o el socio o que simplemente se realizan en cooperación con alguna
persona pueden ser impulsados por situaciones inesperadas, iniciativas
revolucionarias, a por el deseo de innovar en algún campo, o simplemente romper
los esquemas o aventurarnos con guiados por la pasión que genera lo novedoso y
el ansia por cambiar, despertar, cocrear.
Esta
será una luna pues para dejar volar nuestra imaginación incluyendo todo aquello
que estaba reprimido dentro de nosotros, tal vez es el momento de que nuestro
niño interior reconozca cuales son sus verdaderas motivaciones y de que desde
esa naturaleza fogosamente maternal de la Luna en Leo sepamos complacerlo en
todo aquello que sea auspicioso para él y para los demás.
Cierto
es aquello que se dice de que, cuando uno brilla, cuando uno se muestra y
expresa su potencial da también inconscientemente permiso a los demás para
hacerlo y ello puede ser enormemente sanador para aquel pequeño niño creador,
frustrado, castrado y/o no reconocido que cada uno lleva en su interior.
Que
sepáis aprovechar y jugar sabiamente con la energía de esta Luna llena en Leo
que será oscurecida para mostrarnos aspectos insospechados o menos conocidos de
su poder creador y para que prestemos atención a esos reclamos que nuestra alma
nos hace de forma contundente y dramática a fin de que podamos hacer
consciencia de todo el potencial que habita en ella y que por algún motivo no
hemos sabido honrar y reconocer.
Nathacha Oura
No hay comentarios:
Publicar un comentario