Por Mark Borax
Se combinan tres fuerzas astrológicas en el clima cósmico de este año,
produciendo una poderosa iniciación fuera de lo viejo y hacia lo nuevo y, como
todos los cambios astrológicos, solamente avanzará tanto como nos alineemos con
ella: Saturno en Capricornio, el paso del Año del Gallo al Año del Perro y el
número 11, del que se compone numerológicamente el 2018.
Saturno entró en Capricornio a finales del pasado año, conjunto con el
Sol en el momento poderoso del Solsticio de Invierno y continuará atravesando
este signo durante
los próximos tres años. Saturno en Capricornio nos pide dos cosas: que seamos claros en cómo manejamos nuestro poder y que seamos claros con respecto a cómo manejamos el tiempo, dos asuntos muy importantes que los astrólogos de la antigüedad vinculaban en las manos del Viejo Dios Kronos, Saturno – Padre del Tiempo. Ese Viejo Dios llegó al poder cortando en pedazos a su padre – el Dios Original del Cielo Ouranos, arrebatándole su reino, declarándose como el nuevo Rey de Todo.
los próximos tres años. Saturno en Capricornio nos pide dos cosas: que seamos claros en cómo manejamos nuestro poder y que seamos claros con respecto a cómo manejamos el tiempo, dos asuntos muy importantes que los astrólogos de la antigüedad vinculaban en las manos del Viejo Dios Kronos, Saturno – Padre del Tiempo. Ese Viejo Dios llegó al poder cortando en pedazos a su padre – el Dios Original del Cielo Ouranos, arrebatándole su reino, declarándose como el nuevo Rey de Todo.
Pero las Diosas del Destino le advirtieron que al igual que el cortó a
su propio padre en pedazos, así también su hijo le haría a él. Para evitar que
esto sucediese él se tragó a todos sus hijos recién nacidos, excepto a Zeus que
se escapó cuando su madre envolvió en pañales una piedra y se la dio de comer a
su esposo en su lugar.
Cuando Zeus maduró, apegado a la predicción, el cortó a su padre en
pedazos y se instaló como el nuevo Rey de Todas las Cosas.
Desde hace mucho tiempo hemos estado viviendo este mito, al tragarse
Saturno sus hijos en la forma en que la civilización occidental (el Viejo Dios
actual) se traga la inocencia de sus ciudadanos. Las vidas de asombro, alegría,
inocencia, verdad, virginidad, el alma joven de la humanidad, todos son devorados
por el Dios abotagado de la sociedad que ahora la gente adora en lugar de los
antiguos sacerdotes y reyes ante los cuales teníamos que arrodillarnos. Esta
corrupción del verdadero poder del alma necesita que la derroquemos, pero sin
reproducir el mismo karma que tanto Saturno como Zeus crearon cuando cortaron a
sus padres respectivos en pedazos. Lo cual se resume en encontrar una
forma de permitir que el alma inocente, mágica y creativa dentro de ustedes se
convierta en el nuevo dios/diosa que asuma las riendas, en lugar de dominarlos
a ustedes y a todos los que les rodean mediante el poder del ego.
Conjuntamente con encontrar una nueva forma de lidiar con el poder se
nos pide que encontremos nuevas formas de lidiar con el tiempo y estos dos temas
están vinculados indisolublemente, porque cómo ustedes utilizan el tiempo
define cómo utilizan su poder. En siglos recientes el Tiempo se ha
convertido en un tirano que obliga a la naturaleza orgánica a derivar hacia una
forma de vida mecanizada que sirve al Viejo Orden a costa de la maravilla
mágica de la existencia. El tiempo se divide en segundos, minutos, horas, días
semanas, meses, años, siglos – milenios, como si la existencia en la práctica,
estuviese configurada como pequeñas porciones precisas en un reloj y un
calendario que empujan a todos a marchar desde la cuna a la tumba. Este método
de lidiar con el tiempo puede ser excelente para programar computadoras pero es
un anatema con respecto al crecimiento de todo lo que es absolutamente único en
cada alma humana. Aferrarnos a esta versión del tiempo equivale a drenar la
maravilla de la existencia. ¿Por qué ser viejos a los 93? ¿Por qué comenzar en
la escuela a los 5 años? ¿Por qué lanzarnos de cabeza en la bocaza abierta del
Padre Tiempo, rindiendo nuestra existencia creativa superior a un orden social
obsoleto?
Al comienzo del siglo veinte, el ritmo de cuatro compases de las bandas
militares acompañaba los desfiles con su golpeteo. Esa forma de dividir el
tiempo configura las almas jóvenes convirtiéndolas en soldados obedientes.
Cuando surgió el jazz, los músicos encontraron la forma de hacer que el tiempo
fuese más elástico. Nacieron nuevos ritmos y sincopados en lugar del golpeteo
militar. Y ahora el paso de Saturno a través de Capricornio nos insta a
encontrar una nueva forma de jazz-vida que libere los ritmos a los que
marchamos y que nos permiten bailar al compás de la música del
alma.
Como el tiempo y el poder están estrechamente vinculados, un
descubrimiento en uno conlleva a un descubrimiento en el otro. Y debido a
que el 2018 es el primero de tres años en el que Saturno atravesará
Capricornio, mientras más innovadores sean ustedes, rehaciendo el poder y el
tiempo en este año, mejor podrán continuar con ese proyecto en años venideros.
La segunda característica del clima cósmico para el año es la
transferencia del Año del Gallo al Año del Perro, que ocurre el 16 de febrero.
Un Año del Gallo se relaciona con mejorar la visión. El gallo sube al punto más
alto del gallinero y capta la salida del sol antes que el resto del corral y lo
anuncia con una penetrante llamada al despertar. Tenemos unas cuantas
semanas todavía para elevarnos a un punto de visualización semejante en
nuestras vidas para lograr la llamada al despertar de lo que se avecina.
Si utilizan el extremo de la cola del Gallo para aumentar una visión de
a donde su vida necesita dirigirse, el Perro implementará esa visión,
llevándola a cabo en su totalidad, porque el perro es el más leal, constante y
determinado de todos los años. Y el perro en ustedes y en los demás necesita
una visión fuerte para servir, al igual que un perro le sirve a un amo fuerte.
Así que si se apartan del amo falso de la Sociedad Obsoleta y alcanzan una
nueva visión, el Año del Perro los ayudará a implementar esa visión y llevarla
a cabo con una perseverancia perruna.
El tercer factor en el clima cósmico del año es el número 11. El valor
numerológico de los años se compone añadiendo los dígitos: 2+0: 2. 2+1: 3. 3+8: 11. Durante los tiempos normales de la
vida como es usual, el 11 es mayormente una nota de gracia, un sonido mudo, una
fuerza durmiente, esperando su momento, reteniendo su poder, esperando a que
los elementos de apoyo maduren antes de hacer su magia. Y la magia de un 11
consiste en implementar el cambio más progresista en cualquier año. Los
elementos de apoyo incluyen a los amigos, grupos, almas de ideas
afines en su entorno externo y claridad interior y fuerza de
voluntad para lograr su verdad interior. Lo que significa que les
corresponde a ustedes orquestar los elementos internos y externos para sostener
el enorme poder de cambio del año.
Si recrean su relación con el poder y el tiempo y logran una visión del
futuro que van a crear, los elementos afines se pueden combinar para hacer del
2018 el final de todo lo que nunca funcionó en primer lugar y se verán
deshaciéndose de todo lo viejo sin duplicar el viejo karma.
¿Quién eres
realmente? ¿Para qué estás aquí? ¿Cuánto tiempo
más estás dispuesto a esperar?
Mark
n.t.
definición de Wikipedia: Quincunce es una disposición
geométrica de cinco piezas formada por cuatro elementos formando un
cuadrilátero, al que se añade un quinto elemento en el cruce de sus diagonales
Mark Borax es un Astrólogo Maestro a
Nivel Álmico
Mark Borax es un maestro, astrólogo y autor renombrado que vive en
Vermont y escribe el boletín electrónico “Reporte del Clima Cósmico”
mensualmente. Él ofrece lecturas por teléfono y en persona, y clases que
catalizan la evolución individual.www.markborax.com
Traducción: Fara González
Manantial del Caduceo en la Era del Ahora
http://www.manantialcaduceo.com.ar/libros.htm
https://www.facebook.com/ManantialCaduceo
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