by Carolina G
El 19 de Febrero entró el Sol en Piscis y comenzamos a
transitar el último signo del Zodíaco. Entramos en la Temporada
Piscis, temporada ideal para conectar con la profundidad, la sensibilidad y
percepción para la sanación que surge cuando resonamos con el mundo emocional y
del alma. Tiempo para bucear en las emociones, en las verdades del
Inconsciente, y observar lo que merece ser sanado. Tiempo de introspección
y contacto con la voz interior que nos guía para el cambio, la sanación y la
trascendencia de patrones hasta ahora sumergidos en el Inconsciente.
Durante
este ciclo, el Sol, nuestro centro, irradiará a través de sus rayos
oportunidades para iluminar las zonas más inconscientes del Ser, el reino
de la emoción profunda y las respuestas sentimentales, la voz del alma que
anuncia que quiere hablar. Es un tiempo para hacer contacto con la memoria
arquetípica y el Inconsciente, ese espacio de nuestro Ser que es sutil y no
vemos, está en oscuridad, en la profundidad, y que guarda los patrones
emocionales que modelan la forma de nuestros comportamientos y actitudes ante
la vida.
Piscis es un signo
que corresponde al elemento Agua modalidad Mutable, el signo más
transpersonal del Zodíaco, y que vibra con la profundidad e hipersensibilidad propia del fondo del océano.
La percepción a través de la extrema sensibilidad emocional del mundo,
hacen fluir esta energía hacia el
desarrollo de la compasión, la sanación individual y colectiva, y el
cambio consciente, que más que cambio es trascendencia hacia un nuevo estado
del Ser.
Así,
vibrando el Sol en Piscis, tenemos la oportunidad de iluminar los recursos sanadores dentro
de nosotros mismos, y percibirlos, es decir, darnos cuenta de esas zonas
sensibles de nuestro Ser que nos impulsan a poner fin a determinados
procesos para dar lugar a un nuevo comienzo.
Sin embargo, Piscis
es una energía sutil, es decir, no se ve con claridad sino que se siente. Y
para ello es necesario poder cerrar los ojos para abrir la percepción
emocional. Puede que tanta sutileza nos maree, tal como lo hace el agua
profunda. Hay quienes pueden estar viviendo un tiempo de gran intensidad
emocional y renovación de la energía vital, en el que se pone de
manifiesto el cierre de un ciclo y la apertura de una nueva etapa en
la espiral evolutiva de la vida. De todas maneras, el tránsito del Sol en
Piscis requiere entrega a la sensibilidad, conexión con la voz del alma,
inteligencia emocional, para que poder darnos cuenta cuál es el cambio que hoy
significa trascendencia y evolución.
El Sol en Piscis nos
hace sumergir en los aspectos más profundos y sensibles de nuestro Ser.
Por eso, es momento
de resonar con esa voz que nos marca el camino para crear un nuevo
orden. Es tiempo de enfocar conscientemente en aquello que que
necesitamos ordenar en nuestra vida, para limpiar y purificar nuestra
energía. Accionar desde esa íntima
autenticidad con el Ser esencial es la clave para sanar, y poder
realizar una nueva evolución.
Además, el tránsito
del Sol en Piscis nos recuerda que Somos Uno. Como signo transpersonal por
excelencia, en la Temporada Piscis la totalidad que somos se pone de
manifiesto. Es decir, es tiempo de resonar con todos los seres sintientes de nuestra Tierra. Es momento de crear
Conciencia y percibir cómo la propia sanación se irradia al todo, y que los
demás resuenan profundamente en cada uno de nosotros mismos.
Este ciclo del
tránsito del Sol en Piscis es ideal para cualquier tipo de trabajos artísticos para la sanación, la
meditación, la observancia de las sincronicidades, las señales del Universo que
anuncian nuevos procesos, la escritura de los sueños, el contacto directo con
el mar y todo lo que significa Conciencia Transpersonal.
Habrá mayor
disponibilidad para hacer contacto con la voz del alma y drenar energía
emocional a través de estas actividades, sanar el Ser y cuidar el cuerpo
que somos, en lo individual y también en lo colectivo. Porque Somos Uno.
Tiempo de cambio,
tiempo de renovación, de reciclaje y redención al amor universal.
Recuerda : el agua limpia, nutre y crea nueva vida
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