MILENA
LLOP
Nueva
Luna con eclipse de Sol, un pack de alta tensión que puede generar confusión a
menos que sepamos mantenernos en la luz, anclados en el amor incondicional.
La
Nueva Luna de Cáncer 2019 cae el día 2 de julio a las 19:17’ hora solar a
10º38’ del segundo decanato de este signo.
La
Nueva Luna se produce en el segundo
decanato de Cáncer, (decanato Escorpio) y
en grado Kether, lo que viene muy bien para tener la referencia de
Kether-Voluntad puesta a nuestra disposición, dado que tenemos un eclipse total
de Sol que será visto claramente en Chile, Argentina y Uruguay. Un eclipse
solar ocurre cuando la Luna pasa entre la Tierra y el Sol, oscureciendo, en
este caso, totalmente el círculo solar. Contemplado desde la Tierra,
aparentemente el diámetro de la Luna parece mayor que el del Sol, lo que
contribuye a bloquear la luz solar directa durante unos instantes. Aunque este
eclipse se ceñirá visiblemente a una franja de unos 200 km de ancho, y que no
será visto más que en contados lugares, su influencia es real en todo el
planeta. El último gran eclipse de Sol fue el 21 de agosto del 2017.
Los
eclipses tienen mala fama, porque la ocultación del Sol causada por la Luna
representa una “imposición” del inconsciente sobre el consciente. Entendamos
este dato poniendo el ejemplo del Árbol de la Vida.
Si el
Sol se sitúa en Tiphereth y la Luna en Yesod, el flujo normal de la energía va
del Centro 6, Tiphereth, al Centro 9, Yesod, cuando va de bajada, de subida
será al revés, claro está. Pero la superposición de Yesod en Tiphereth
representa una injerencia, por lo tanto la Luna, -inconsciente, emoción y
deseo-, eclipsa al Sol, -conciencia y corazón-, y el conflicto puede radicar en
que la emoción y los instintos impongan su criterio y su deseo a la voluntad,
dando lugar a situaciones caóticas cuando la personalidad y la razón se sienten
secuestradas emocionalmente. Pero hay otra lectura posible, y es que la
reflexión se manifieste, con la necesidad de valorar mucho más la parte
femenina de nuestra personalidad; que el empoderamiento no sea destructivo,
sino que produzca las “Bodas Alquímicas”. De hecho, recordemos que la
conjunción Sol-Luna propia del Novilunio ya describe el arranque de nuevas
posibilidades de realización que unen lo masculino y femenino. El eclipse solo
debería reafirmar esa necesidad de colaborar juntos, aunque la Luna imponga su
criterio, si el Sol escucha, nada contradictorio tiene que ocurrir.
Cáncer
es el signo de Aguas que empiezan a dibujarse en el panorama humano y en el
segundo decanato las corrientes tienen tendencia a ser más subterráneas, algo
que corresponde al decanato Escorpio. Es necesario, pues, buscar motivaciones
internas para reprogramar emociones, situaciones, mantener el control para que
las influencias externas, las sombras, no tomen las riendas de nuestra vida.
El
grado en que se manifiesta la lunación aporta un caudal lumínico
extraordinario, supongo que todo se conjuga para ayudarnos a que una mayor
cantidad de voluntad y de fuerza nos ayude para que las actitudes inconscientes
no se descontrolen. Pero quien tenga la creencia de que tiene una misión
primordial e importante será capaz de movilizar su consciencia para el bien.
Solo hay que cuidar que el ansia de libertad no se convierta en una anarquía, y
que la imaginación no nos lleve a proyectar utopías imposibles para que la
naturaleza humana no se sienta perdida, desconectada de su realidad, algo que
puede resultar nocivo para el interés colectivo.
Es una
lunación para generar una sabiduría amorosa de las cosas, para dedicarse al alivio
de las personas atormentadas, para dar cobijo y ser fuente de alegría, de
esperanza y renovadas ilusiones después de haber penetrado, con los solsticios
de verano e invierno, por la puerta de los Hombres y la puerta de los Dioses.
Los Genios de la Lunación, claves angélicas
Nelkhael:
nos permite ser consecuentes, coherentes y sobre todo fieles a los compromisos
personales. El deseo de aprender y descubrir lo que nos une, la verdad que nos
hace más libres está en el punto de mira. Con este Genio, “pedid y se os dará”,
porque con inspiración y voluntad se puede resolver cualquier problema.
Reiyel
nos da la posibilidad de elevar la conciencia y conectar con nuestro Yo
Superior, trascendiendo las limitaciones que nos hemos impuesto. Pero también
nos habla de dar el ejemplo, de liberarnos de opresiones, de traumas, de
complejos y bloqueos. Es un buen momento para meternos dentro y ver qué podemos
rescatar de nuestros mejores valores y qué podemos eliminar de nuestras
tendencias caducas.
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