Un gran astrólogo, Dane Rudhyar, nos comentaba que la energía
zodiacal de LIBRA, nos puede ayudar a convertir nuestra vida en un acto de
"autoconsagración a la Humanidad". La autoafirmación de Leo y la
actitud autocrítica de Virgo se reconcilian y se ven dominadas a través de esa
consagración. Salimos del campo del individuo y miramos al otro, los otros. La
individualidad permanece, pero ya sabe que es sólo una célula más.
Ya no se trata de la formación de la personalidad sino de un proceso
que nos lleva a la comprensión de las nuevas energías que surgen, fruto del
intercambio y la cooperación, tanto en un sentido espiritual, cómo material.
Desde el lugar de observación de
LIBRA, nos dirigimos hacia la visión
(Escorpio-Sagitario) de aquellas formas que puedan llegar a manifestar
(Capricornio) aquello que hayamos podido percibir que responde a la Voluntad al
Bien, que en la actualidad se expresa como "el mayor bien para el mayor
número". A través de la energía de LIBRA podemos hacernos, de verdad,
conscientes de los auténticos "valores sociales", ayudándonos en la
búsqueda de las formas ideales y correctas de cooperación y también en la
armonía e integración grupales. Vicente Beltrán Anglada nos decía que la
práctica del Agni Yoga es para nosotros un deber social.
Por otro lado, el arquetipo que LIBRA representa para nosotros es el
del Equilibrio. Todo aquello que se halle relacionado con este concepto en un
sentido macro y microscópico tiene que ver con esta energía zodiacal. Significa
la Balanza, en todas las expansiones de conciencia existe una evaluación
previa.
Su regente jerárquico es Saturno, que como todos sabemos es el Señor
del Karma y, por tanto, marca también la transición y el momento de Silencio
entre el Morador en el Umbral y el Ángel de la Presencia, cuando ambos se
"miran". Todas las etapas de aparente estabilidad, todos los
instantes fuera del tiempo: entre el día y la noche, entre una nota musical y
otra, un pensamiento y otro, etc., incluso en nuestro sistema, entre una raza y
otra, una ronda y otra, están de alguna manera condicionados por la energía de
LIBRA.
Por ello se nos dice que tiene mucho que ver con el Agni Yoga y la
oportunidad que desde la Jerarquía se nos está brindando en la actualidad, para
que vivamos y expresemos nuestra vida, desde el justo medio, desde la energía
del Corazón. Cuando la personalidad es absorbida por la Presencia, en íntima
conexión con el Ángel Solar, puede entonces el discípulo cumplir con su
cometido.
Por último, el regente esotérico, Urano, nos permitirá observar con
claridad, cómo llevar la creación (conciencia del mundo dévico) de aquellas
formas adecuadas, que permitan la plena expresión del Alma humana, individual y
colectivamente. La energía del 4º Rayo nos guiará en este trabajo... El momento
de equilibrio es de una enorme tensión, pues determina la dirección evolutiva o
no, que vayan a tomar los acontecimientos. Por eso el Maestro Tibetano nos dice
que la oportunidad para la reversión de la rueda de zodiaco se da (hablando del
alma individual) cuando el Sol está en Leo y el ascendente en LIBRA.
Aprovechemos este pequeño ciclo del sol en LIBRA para profundizar y honrar ese
sentido de Divina Comprensión, que constituye una de las máximas de este signo,
tal como nosotros podemos percibirlo.
Socialmente se está manifestando, actualmente, como
"equilibrio" entre opuestos en todas sus manifestaciones, marcando
elecciones donde nadie gana con claridad. La tensión entre unas fuerzas y otras
es patente y por ello nuestro trabajo fuera del campo de batalla, pero con un
claro sentido de responsabilidad espiritual, es tan importante.
Por Maricarmen Díaz Fernández
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